Capítulo 74: Recuerdos del asesino

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Después de la escuela, Xie Shiyu entró en un antiguo edificio residencial con una mochila negra a la espalda.

El resplandor del sol poniente se filtró por las rejillas de ventilación del pasillo, arrojando un pequeño cuadrado de sangre en las oscuras escaleras. En el crepúsculo, la basura del pasillo emitía un hedor húmedo y mohoso.

El edificio era demasiado viejo y muchos de sus habitantes ya se habían mudado. Cuando Xie Shiyu pasó por el tercer piso, miró la placa oxidada de la puerta del 304.

Hacía varios años que nadie vivía allí.

El tío del quiosco de la habitación 304 se había mudado hace mucho, pero sus palabras antes de irse aún permanecían en la mente de Xie Shiyu:

"Oye, Xiao Yu, ¿quieres matarlo?"

Ji Shiming, el tío del quiosco, con una sonrisa amable en su rostro, se agachó inocentemente, tocó la cabeza de Xiao Yu y dijo:

"El tío puede ver, oh sí~, en lo que estás pensando."

Aquella noche llovió, y Xie Shiyu se empapó por completo.

Esa noche, su padre no tenía dinero para drogas y volvió a casa a pedir dinero, golpeando a su madre violentamente. Su madre recibió fuertes patadas en el estómago y fue hospitalizada con una hemorragia gástrica y Xiao Yu tenía la cabeza abierta. Acababa de volver del hospital después de que le pusieran puntos, no llevaba paraguas, y la venda recién atada en la cabeza estaba muy mojada.

Se quedó mirando al tío Ji Shiming, fingiendo que no entendía nada:

"Voy a casa."

Ji Shiming lo miró fijamente de manera significativa. Cuando Xiao Yu se dio la vuelta y caminó hasta el cuarto piso paso a paso por los escalones, alejándose cada vez más a punto de perderse de vista, escuchó:

"¿Realmente no tomaste esa cinta?"

Ji Shiming de repente preguntó.

El corazón de Xiao Yu dio un vuelco.

Ya habían pasado tres meses desde que presenció cómo el tío del quiosco mataba al hombre abusador de gatos y partía su cuerpo en pedazos.

El tío del quiosco supuestamente ya no dudaba de él, pero ahora de repente mencionó esto...

Xiao Yu se sorprendió, pero sus pasos no se detuvieron en absoluto y murmuró de manera infantil:

"¡Loco!"

Xiao Yu caminó directamente de regreso a la habitación 404, bang.

Se oyó un fuerte portazo.

Ji Shiming vio la reacción de Xiao Yu y se encogió de hombros.

Este chico se comportó como un niño bueno que se topó con un tío extraño, y al no ser capaz de entender en absoluto lo que decía la otra persona, lo regañó con desdén y le dijo que estaba loco, luego cerró la puerta de un portazo entrando a casa.

Esto significaba que Xiao Yu no entendía lo de la cinta azul. No tiene nada de malo, es solo un niño pequeño con una mente sensible y malos antecedentes familiares.

En los últimos tres meses, ya sea amenazando a su buen amigo Chu Feng o probándolo de forma explícita o implícita, Xiao Yu se había desempeñado a la perfección. Ji Shiming no pudo encontrar ningún defecto.

Desde un punto de vista de inferencia racional, sólo se puede concluir que este niño no tiene nada que ver con su acción de matar y torturar al hombre maltratador de gatos en una noche de invierno. Es imposible que este niño normal fuera testigo de cómo su vecino asesinó y desmembró un cuerpo para luego robar las pruebas y permanecer en calma durante tres meses.

Todos en la ciudad son mi antiguo GongDonde viven las historias. Descúbrelo ahora