Capítulo tres

3 1 0
                                    

A la mañana siguiente se despertó por los ruidos de una sartén friendo huevo, el sonido de la licuadora encendida y como se preparaba un desayuno completo, pero no quería levantarse, tenía mucho sueño.

—Hola durmiente —le saludo su amigo del de la cocina—.

—Ah, Buenos días Liam —dijo bostezando—.

—Estoy preparando tu desayuno, estoy seguro que ayer no comiste es nada.

—Bueno en eso tienes razón — lo miró por varios segundos—. Oye, ¿me prestas tu baño y una camisa?, es que no me gusta usar la ropa dos días seguidos.

—Vaya, siempre tan delicado pero si te presto alguna camisa pero creo que te va a quedar grande.

—No importa, pero único que me importa en estos momentos es darme un baño.

—Bueno si tu lo dices, ya hay toallas en el baño y jabón, el baño está al fondo girando a la derecha.

—Bueno —agradeció por el favor y se fue a dar un baño—.

—Se queda pensando un momento y sigue cocinando—. Mm.

~•~

Media hora después se encontraba Liam riéndose a carcajadas de su amigo pues le había prestado una camisa, la más pequeña que él tenía y aún así le quedaba grande.

—¡Parece que estás usando vestido! Ja ja ja—Exclamó Liam a carcajadas—.

—. . . —Daniel solamente se quedo callado—.

—¿Quieres que te traiga un cinturón para que resalte tu cintura? —Intentaba ponerse serio pero era algo imposible en esos momentos—.

—¡Te voy a matar! — exclamó Daniel bastante molesto mientras que se balanceaba sobre Liam y le jalaba el cabello—. ¡Muere!¡Ahg!.

—éste se intentaba soltar del agarré de su compañero pero trataba de no lastimarlo—. Oye, oye, ya relájate, es una broma.

—Eso dices pero no te creo nada.

—¡Pero al menos suéltame!.

—¡Lo hago porque quiero no porque tú me lo digas! —Le suelta el cabello y voltea hacia otro lado enojado—.

—¿Alguien se despertó de malhumor?.

—Tú me pusiste de mal humor, tonto.

—Auch, eso me dolió akim.

~•~

Estos ya se encontraban caminando por los largos pasillos del lugar mientras que Daniel estaba algo avergonzado y no podía ni siquiera mirar a su compañero.

—Yo... pido perdón por mi comportamiento de hace rato, no fue apropiado de mi parte atacarte e insultarte de esa manera, pido perdón.

—Este se sobaba el cabello adolorido— Pues la verdad ya empecé todo esto así qué yo te pido perdón.

—Oye, una pregunta —Este lo voltea a ver—.

—Dime —Se deja de sobar el cabello y lo mira—.

—¿Por que te dejaste el cabello largo?, literalmente te llega al final de la espalda.

—Ah, es que lo uso de arma, en la punta de mi cabello tengo una daga —Respondió tranquilamente sin darle tanta importancia mientras que se agarraba el cabello en una trenza—.

—Daniel lo mira bastante maravillado—. Wow, es realmente cool.

—Así es mi pequeño akim —le dijo sonriente—. Así es.

Akim Donde viven las historias. Descúbrelo ahora