Rivales. (Pablo Gavi)

Capítulo 21.

Narra Olivia.

Esto es demasiado.

Lágrimas bajan por mis mejillas. - Eh, pequeña, esta noche es para nosotros y no para estar mal. -

- Es que nunca había vivido algo así. -

- Porque no me tenías en tu vida. -

Ni en momentos románticos se le quita el egocentrismo. Pero Pablo es así y es mi Pablo.

Le cojo del nudo de la corbata y lo acerco a mis labios, para después saborearlos entre los míos. - Yo también te quiero mucho, Pablis. -

- ¿Te he dicho alguna vez lo mucho que me gusta que me llames así? -

- ¿Si? -

- Si, porque eres la única que me llama así. -

- Y espero que la última. -

- Por supuesto. -

Me lleva hasta la mesa y corre la silla para poder sentarme. Él lo hace enfrente y ya veo entrar a un camarero para traernos una botella de vino blanco y de agua. Sirve en copas y vasos y se vuelve a ir. - Esta noche es por nosotros. - dice alzando la copa. - Y por ese bendito día en el Bernabéu. -

- Bendito día. - digo yo detrás de él.

- El fútbol no hace más que darme alegrías. -

Brindamos y el camarero vuelve con dos platos. Puedo ver que es carpaccio con salsa tártara sobre una tosta de pan muy fino que está muy rico. - Oye, y cuéntame, ¿tuviste alguna relación duradera? - me pregunta Pablo. Yo ya sé que él estuvo con Ana un tiempo, pero al final no fue nada serio, pero él nunca me había preguntado por mi pasado amoroso.

- Tuve un único novio que duró dos años. - asiente. - Se llamaba Abel, era bastante mayor que yo. -

- ¿Bastante? -

- 7 años. Estaba yo terminando el bachillerato y él ya estaba en tercero de carrera. - Pablo está flipando. - Resultó ser un cerdo. Lo pillé con dos en la cama. -

- Joder. -

- Un chico y una chica. -

- ¡Hostia! - Pablo se ríe.

Yo ahora me río, pero en el pasado no podía creer lo que me había hecho.

- Por cierto. Mi amigo Lucas quiere que quedemos un día con él y su chico. En plan cena de parejitas. -

- ¿Podemos invitar a Pedri? Lo ha dejado con Coral. -

- Pobrecito. Pero no sé si será lo mejor. Mi amigo Lucas tiene la mano muy larga y es experto en volver heteros en homosexual. -

Pablo se ríe y pasa la mano por su frente. - Qué tío. -

- Uhhhh no sabes lo que es. -

El camarero vuelve para retirar los platos y nos trae una crema de champiñones con boletus salteados. - Me habló Fran el otro día para decirme lo de Elena, y me ha dicho que se vieron el sábado después del partido. Según él fue una noche placentera. -

- Algo me ha dicho Elena, si. -

Cuando terminamos la crema nos traen un tartar de vaca madurada. - ¡Dios! Esto está increíble. -

Para finalizar nos traen un tiramisú de postre y unas copas con champán. - Porque esta sea la primera de muchas cenas románticas. -

Brindamos y terminamos la cena entre risas. - Ahora nos vamos. -

- ¿A dónde? -

- A hacerte el amor. -

Me besa de manera pasional mientras que el ascensor sigue bajando. Llegamos abajo y rápidamente montamos en el coche y llegamos al hotel entre besos.