𝙏𝙝𝙚 𝙝𝙖𝙡𝙛 𝙗𝙡𝙤𝙤𝙙 𝙙𝙞𝙖𝙢𝙤𝙣𝙙

3.10

Potter salió corriendo hasta donde sus amigos. Remus se iba acercando poco a poco mientras se reía de su viejo amigo, todos se miraron confusos unos a otros, ¿estaban ayudándose?, ¿los había traicionado Remus?

Hermione chillo al ver semejante acto de traición, iban a matar a Potter, pero lo que dolía era ver que aquel profesor que parecía ser el guía de los chicos en realidad era un lobo con piel de cordero.

- ¡Es un hombre lobo!, por eso faltó a clase. - dijo Granger

Remus empezó a acercarse con una mirada un tanto asesina. Tonks llevó su mirada asustada hasta su padrino, pero este lo único que hacía era observar a su mejor amigo acercándose poco a poco a los dos Gryffindor. El alma de la muchacha empezaba a pesar, al final todos esos rumores iban a ser ciertos y su primo era un asesino. La rata de Ron empezó a chillar más de lo normal por cada paso que daba el profesor, la muchacha agarró más fuerte a su amigo Ron del brazo.

- Calma a ese bicho. - Le dijo nerviosa.

- ¿Hace cuento lo sabes? - dio un paso más.

- Desde que Snape nos dio la lección. - Dijo una Hermione temorosa.

Sirius se puso a gritar como un loco, tenía mucha sed de sangre, aunque parecía que el maestro tenía menos ya que le decía que esperase.

- ¡Ya tuve suficiente!, ¡doce años para esto!, ¡En azkaban! -

Todos estaban en silencio procesando lo que estaba pasando, Sirius parecía que le salían los genes locos de los Black. Remus miró con cara de asesino a Harry, el muchacho solo se movia nervioso.

- Muy bien mátalo, pero tienes que esperar un minuto más, Harry debe saber porque-

- Yo sé porque, tú mataste a mis padres, los traicionaste, murieron por tu culpa- gritó furioso mientras era sujetado por Granger.

Remus se puso más serio y decidido se acercó al grupo.

- No fue él, fue un hombre que hasta el día de hoy pensé que estaba muerto. -

Harry empezó a chillar en busca de respuestas, toda esta situación estaba podiendo con él.

- Peter Pettigrew- chillo Sirius. - ¡Qué está en esta habitación justo ahora! -

Todos los niños se miraron extrañados, ¿estaba perdiendo la cabeza?

Sirius empezó a gritar por el nombre de ese ser, sin embargo Snape apareció en el momento adecuado y lo desarmó.

- La venganza es dulce, esperaba ser yo quien te atrapara- dijo suavemente, como si se estuviera alimentado de algo.

- Severus yo...- dijo Remus.

Snape apuntó la varita hacia él.

- Le dije a Dumbledore que estabas ayudando a un viejo amigo en el castillo y aquí está la prueba. -

- Brillante Snape, volviste a usar tu privilegiada mente y como siempre fallaste. Ahora si nos disculpas, Remus y yo tenemos unas cosas pendientes. -

Le puso la varita en la barbilla a Sirius. Ambos seguían discutiendo, estaban sacando todo el rencor que se tenían uno al otro de años acumulados.

- Puedo matarte, pero creo que voy a dejarte para los Dementores. Un beso de dementor, dicen que es algo insoportable de ver, pero yo me esforzaré. -

- ¡No ! - gritó Aurora, apuntó con su varita al profesor. - Expelliarmus. -

- Aurora, ¿Qué hiciste?- dijo Ron perturbado.

- ¡Atacaste a un maestro !- gritó Hermione alarmada.

Harry aprovechó el momento y se acercó hacia el fugitivo, listo para preguntar y resolver todas las dudas que tenía. La rata empezó a chillar cada vez más fuerte, provocándole un dolor de oidos a la Hufflepuff.

- Calla ese bicho Ronald. -

- La estáis asustando. - dijo el pelirrojo asustado.

Aurora frunció el ceño. Estiró su mano con intención de coger aquel animal cuando este de repente la mordió. Eso hizo que la castaña soltara una maldición, un pequeño corte por el mordisco apareció en uno de sus dedos. Una punzada de dolor le atravesó en su mente, provocando que cerrara los ojos y se agarra la cabeza.

- ¿Rora? - preguntó Ron temeroso.

Está en una especie de sola oscura, hay una pequeña luz que es la única ayer alumbra el lugar. La muchacha empezó a andar hasta donde dos figuras que se susurraban cosas entre sí, una voz sonaba más débil que la anterior.

- ¡Dime!, ¿Donde están? -

Se escucharon unos pequeños gimoteos.

- No lo sé señor. - tenía la cabeza agachada mientras soltaba ruiditos como un cachorro herido.

Se escucha un grito, el muchacho se encoje ante tal acto.

- Valle de Godric en el West Country. - dice casi llorando.

Una mano en su hombro hace que saliera de ese trance.

- ¡Tú! , ¡Tú eres mejor que Potter! - decía una voz acorbadada. Aurora miró extrañada a ese hombre, ¿en qué momento había llegado hasta aquí y quien era? - ¡Yo conocí a tus padres!, ¡Tú padre era bueno!, seguro que eres como él. -

- ¡Tampoco hables con mi ahijada sucia rata. ! -

Remus y Sirius cogieron al hombre. Tonks se quedó procesando lo que acababa de pasar. Hecho una mirada a Ron, el cual ahora no poseía a su rata, volvió su vista hasta el profesor Lupin y el fugitivo Black, luego observó a aquel hombre nuevo. Así que ese era Pettigrew, tenía que ser él, haciendo quedar como inocente y que las palabras de su padrino fueran ciertas. Se levantó y se acercó hasta donde Granger.

- Vendiste a James y a Lily, ¿cierto? - dijo furioso Remus mientras lo rodeaban en un piano.

- No era mi intención de hacerlo, no se imaginan las clases de armas que él posé. - dijo negando mientras hablaba dolido. Luego miró a Black. - ¿Qué hubieras hecho tú Sirius? -

- No los hubiera vendido. - gritó furiosa. El joven de su visión había sido Peter. - El señor tenebroso sólo te chilló y ya fuiste una rata embustera y se lo dijiste todo. - gritó furiosa. En un principio no iba a rebelar que había tenido aquellas imágenes, pero le ardía en su corazón que fuera de inocente cuando había vendido a sus amigos por nada, pero lo que más le dolía era ver que por su culpa un hombre inocente fue a la cárcel.
Sirius Black se quedó un rato en silencio extrañado por las palabras de su sobrina, salió de su trance cuando su examigo empezó a gimotear como cuando a un niño pequeño lo pillan en una travesura.

- ¡Hubiera muerto antes que traicionar a mis amigos! - chilló furioso.

Intentó escapar pero el elegido le tapó la salida. El traidor empezó a implorar clemencia al muchacho, pero sus súplicas fueron tomadas en nada.
En ese momento se iba a cometer un asesinato, pero el pelinegro lo paró, diciendo sus deseos, que Peter Pettigrew fuera juzgado por el ministerio y enviado a los dementores. La antigua rata de Ron empezó a temblar de miedo, porque todos sabían que lo peor que te podía pasar era que te sentenciaran a un beso de dementor.

Bueno, al final decidí subir el capitulo. No, este no es el último, lo he partido por la mitad.
Espero que os guste como va yendo la historia.