Es curioso cómo funcionan las cosas que no recordamos y las que no podemos olvidar.
Adora no recordaba la última vez que salió de su manada a pesar de ser la alfa, la persona que debía mantener a salvo a todos los miembros de esta.
Catra no olvidaba...
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Ellos están huyendo. Corren tanto como sus cuerpos se lo permiten, sus pulmones arden por el cansancio, tratan de no pensar en que ellas irán detrás de ellos. Tratan de huir a través de la frontera donde tienen prohibido entrar. Los cuatro parecen cansados y es demasiado obvio él porque. Escaparon de noche, cuando todas ellas descansaban.
-Mierda- exclama Catra cayendo entre el pasto del prado –Al fin.
-Esto fue la peor idea del mundo- asegura Bow sujetando su cuello con cuidado –Nos castigaran por esto y puedo apostar que dolerá bastante.
-Estoy harto de que tengamos miedo a los castigos- confiesa Sea Hawk limpiando el sudor de su frente.
-La verdad yo solo quería marcharme de ese lugar- exclama Scorpia con diversión –Así que no me quejo de nada.
-Bow sabemos que amas a Glimmer y la chingada- bromea Catra mirando el cielo nocturno –Pero estoy hasta el carajo de que ellas decidan sobre nuestras vidas, el amor no se puede obligar... ellas también necesitan aprenderlo.
Bow mira el piso no muy convencido, nunca le gusto ser secuestrado, alejarse de su familia, tener que olvidar toda su vida sin que él pudiera decir o hacer algo, era simplemente injusto y tal vez sus amigos tenían razón y eso no era amor.
-Pensé que ya estabas en buenos términos con Adora- comenta Sea Hawk mirando a Catra con curiosidad.
-Sí, pero hace mucho tiempo un amigo me dijo que tengo que estar de lado de los míos hasta el final, aparte Adora puede sobrevivir un tiempo sin mí- responde la cazadora sin prestar mucha atención.
(...)
Adora mira con fastidio como todas sus betas gritan en la sala del consejo, a todas les parece imposible que sus parejas escaparan de noche sin que nadie lo notara, incluso parecía que alguien los había ayudado a escapar.
-¡Tenemos que ir por ellos!- grita Mermista con fastidio -¡Solo perdemos tiempo!
-Por primera vez estoy de acuerdo con Mermista- apoya Perfuma mirando a Adora –Necesitamos ir por ellos.
-"Necesitamos ir por ellos" "Tenemos que ir por ellos", tan siquiera se escuchan a ustedes misma idiotas- comenta con frustración Shadow Weaver –Ellos no son su propiedad, no son objetos, ellos tenían una vida antes de conocerlas y ustedes solo los alejaron de su familia, como si ellos no sintieran nada.
-Es una tontería- bromea Glimmer con diversión –Ellos son nuestra pareja, es el maldito destino.
-¡Pero no es el destino de ellos!- grita Weaver mirando seriamente a Glimmer –Ustedes tienen que entender que esos humanos se pueden enamorar e cualquier persona, porque ellos no están atados por algún destino, ellos pueden amar a cualquiera y decidieron amar a un montón de mujeres estúpidas que los ven como propiedad.
-Eso es verdad- confirma Casta con una sonrisa tranquila –He tratado de hablar con todas ustedes de eso y la única que lo entiende es Adora, lo cual es sorpréndete porque Catra es la persona más irritante que he conocido.
-Dejaremos que ellos estén fuera- habla finalmente la rubia con diversión –Weaver tiene razón, durante mucho tiempo los han tratado como una propiedad, ahora dejen que tengan su propia libertad.
-¿Qué haremos si nunca regresan?- cuestiona Perfuma con ansiedad.
-Nada, no podemos obligarlos a nada- responde Adora con una sonrisa –Tienen que confiar en que ellos decidan volver por amor y no por obligación.
Adora se pone de pie y abandona la sala, camina con cansancio hasta estar en su habitación donde se deja caer en la cama, la verdad es que extraña demasiado a Catra, más de lo que pensó que era posible extrañar a alguien pero tampoco está inquieta pues la marca ayuda demasiado a sentir que siguen unidas. Algo bueno entre todo el caos con el que tendrá lidiar en los próximos días.
-Te amo así que regresa... no importa cuánto te tardes pero vuelve- susurra Adora abrazando la almohada de Catra.
(...)
Roy mira con curiosidad al grupo enfrente de él, desde que llegaron en la mañana parece que tiene una extraña sensación de incomodidad o posiblemente abstinencia.
-Parecen un grupo de drogadictos que escapo de una clínica- bromea el chico con diversión.
-Recuerdas cuando te hable de los hombres lobo- le recuerda Catra quien esta recostada en su sofá –Cuando te alejas mucho de tu pareja tiene abstinencia durante todo un día, después todo es más tranquilo.
-Tu pareja es un lobo- exclama con asombro el peliverde –Eso es muy mala suerte para una cazadora, es irónico.
-Lo sé, parece sacado de una estúpida película de adolescentes pero sin sexo- se queja Catra mirando al chico –Al menos el sexo sería bueno pero Adora y yo pasamos más tiempo en drama que haciéndolo
-Entonces que te parece si salimos a la ciudad y te diviertes de la forma que quieras, con suerte podrás tener todo el sexo que quieras- comenta Roy con una sonrisa amable.
-Yo solo quiero sexo con Adora, si no es ella no quiero a nadie- sentencia con tristeza la cazadora –Pero acepto tu idea de salir a la ciudad.
Roy asiente para ponerse de pie y estirarse, mira a Catra de reojo con un claro sonrojo en sus mejillas, era curioso como después de meses sin tener ningún mensaje de Catra la volvía a ver, solo que en esta ocasión ella finalmente estaba enamorada de alguien más y él tendría que superar ese sentimiento por el bien de su amistad.
-Dile a tus amigos que se alisten porque esta noche olvidaran lo que les duele- pide Roy despeinando el cabello de la cazadora.
