Famosas y Tú [One Shots]

3: Mica Suárez

-Bueno chicas, yo me voy afuera. Hace un calor terrible acá adentro.- dijo Bar saliendo con un vaso de gancia en la mano.

Yo le había dicho que se cuidara más en esta fiesta. En la última se pasó con la bebida y con Kevin casi la perdemos.

-Y... ¿Qué onda? ¿Qué andas haciendo por acá en Buenos Aires?- me preguntó Mica.

Estábamos casi escondidas en el pasillo que llevaba al baño. Bar me había invitado a la fiesta para conocer a sus amigos y divertirnos. Aunque al final me dejó sola. Bueno, no sola, estaba Micaela. Era incomodo, a ella no la conocía, solo por redes sociales. Esta noche fue cuando la vi en persona por primera vez.

-No vine por nada en especial. A pasear y estar un tiempo con Barbara y con otros amigos de acá. ¿Vos que onda? Sos de acá si no me equivoco, ¿No?- tomé un poco de fernet. Estaba fuerte, los de la barra le habían puesto casi la mitad del vaso fernet y lo demás Coca Cola.

-Estoy acá hace un tiempo y ya tenía ganas de irme. Ya que estamos en verano quería ir a conocer el sur... Pero ni idea, no sé ni que voy a hacer mañana. Viste que cuando uno improvisa parece que le va más bien que cuando planea las cosas.- las dos reímos.- ¿Te gusta bailar?- sonreí

-Vamos, parece que se vienen los temas buenos.- le agarré la mano y empezamos a caminar.

-Si es con vos bailo hasta chamamé.- reí.

(...)

-¿Te gustan las pibas?- me preguntó Mica volviendo a tomar.

Mica estaba media ida, había tomado bastante y se le notaba. Yo me rescaté un poco más, al menos una tiene que manejar, y ya había visto a Kevin, Barbara y Angie hasta las manos de alcohol.

-¿Estás bien Mica?- le pregunté preocupada. Ella tenía el rímel corrido y el maquillaje estropeado.

-Si, obvio. Vení, acompáñame a la barra.

-Ni en pedo.- le dije-. Vos no te alejas de mi, y menos si es para tomar, ¡Mirá como estás, Micaela!

-Uh loco, sos re ortiva.

-Si dale, después la boluda que maneja soy yo.

-Puedo manejar tranquilamente yo, eh.- me cagué de risa.

-Si dale, dejas la camioneta arriba del obelisco.

Empezó a sonar canciones de Plan B. Las más conocidas.

-Uh, escuchá. Mi re tema es ese.- empezó a cantar-. ¡Es un secreto! ¡Que tu mirada y la mía!- se tiró la bebida encima.

-Viste que sos pelotuda Micaela, te manchaste toda. ¡Tan divinas tus bucaneras y las ensucias!- la reté

-¿Te gustan mis bucaneras? Algún día te las podría prestar, eh. Si sos buena conmigo, obvio.

-Estás hablando boludeces ya.- dije limpiando un poco sus brazos y cuello, que estaban empapados en bebida.

-Pero me las tendrías que sacar primero.

-Micaela tenés que tomar un poco de agua, estás pasada ya.

-Acompáñame al baño mejor.- me agarró el brazo y me llevó en dirección al baño.

Se tropezaba y casi se caía, yo ya estaba preocupada porque no veía a los chicos.

-Mica, tenemos que buscar a Bar y a los otros.

-Uy Dios, T/n. Si te traje acá al baño es para chaparte toda, no me importa Bar ni los otros estúpidos. Dale, estamos solas, ¿Me vas a decir que no querés?

Me agarró la cara y me encajó un beso. Al principio me sorprendió pero, obviamente, no iba a negarle un beso a tremenda mujer.

Capaz lo hizo porque está en pedo. Y si es por eso, seguro mañana cuando esté consciente no se va a acordar y capaz que hasta le da asco.

-Estás muy mal, Mica. Busquemos a los chicos y vamos.- ella revoleó los ojos y yo la llevé para el lado de la pista-. Ni idea donde estén los chicos, espero que sigan acá. O capaz se fueron a la estación de servicio a comprarse una hamburguesa, habían quedado en eso cuando vinieron.

-Y llámala por teléfono, boba.- se rio de su propio comentario.

-Uh, bueno.- agarré mi celular y busqué el contacto de Barbara, lo encontré y la llamé, coloqué el celular en mi oído escuchando el tono rítmico por unos segundos hasta que escuché la voz de mi amiga.

-¡Eu! ¿¡Qué pasa!?- preguntó Bar.

-¡¿Dónde mierda están?!

-Acá, cerca de la barra con los chicos, ¿Por?

-Con Micaela los estamos buscando.

-Vengan rápido, Angie y Kevin están como manga y hablan pelotudeces. Tengo miedo de que cuenten secretos, ¡Están gritando por todos lados que la Mica estaba loca por vos!

-Están en una re nube esos, vamos para allá y nos vamos.- respondí.

-Dale, apúrate.- cortó la llamada.

-¿Quién era?- me preguntó Micaela casi cayéndose.

-Guarda boluda, te la vas a re dar vos.

-Quién era te pregunté.

-Bar, Mica, era Bar.- le agarré la mano.

-No me hables así, mirá que no te doy más besos, eh.- revoleé los ojos riéndome-. Soy re chistosa, ¿Viste? Te hice reír, me merezco un beso.- le di un piquito.

-¡No, T/n! ¡No sabía que eras lesbiana!- llegó Bar con Kevin y Angie atrás-. Dale, vámonos antes de que estos caigan.

En cuarenta minutos más o menos, ya estábamos en el departamento de Bar. Kevin se durmió en el sillón y Angie en la habitación de Bar, creo. Bar estaba inflando el colchón inflable para Micaela.

-Che, Mica se tendría que bañar, su pelo está empapado en vodka me parece que es, no sé, pero está re pegajoso. Tiene todo el maquillaje corrido, no puede dormir así.- sugerí.

-Si mal, ¿Te animas a bañarla vos?- la miré sorprendida.- Dale tarada, las dos tienen concha, ¿Tanto miedo te va a dar?

-No es miedo pero, bañala vos, vos la conoces hace más tiempo. Yo la conocí recién hoy. No da que la bañe yo.

-Si, la conociste hoy y hoy mismo le comiste la boca. Andá a saber si no hicieron algo más.

-Sos tonta, eh. Dale, yo termino de inflar esta cagada y vos la ayudas a bañarse, yo no me animo.

-Uh, bueno.

(...)

-Levántate Mica cara de perica dale, arriba.- moví a Mica.

-Fue buenísima la rima T/n. ¿Por qué no empezás en el freestyle?- me dijo Bar.

-Porque estoy ocupada laburando, no como otras. ¡Dale Mica, despertate!

-¡Dejá de romper las pelotas!- me contestó Micaela poniendo una almohada en su cara-. Mejor pásame un ibuprofeno para el dolor de cabeza.

-¿O para dolor de labios?- dijo Bar mientras reía.

-Si dale, ¿Querés que te traiga el desayuno acá también?- pregunté sarcásticamente.

-Mínimo.- revoleé los ojos-. Ahora me levanto, hincha bolas.

-Mica, ¿Vos te acordás de algo?- le preguntó Bar.

-Un poco si, bah, me acuerdo por ratitos.

-¿Te acordás cuando se comieron la boca con T/n?

-Vos ni estabas ahí, Bar.- contesté yo.

-¿O sea que si pasó?- preguntó ahora sorprendida.

-Obvio, ¿Vos pensás que iba a desaprovechar la oportunidad de encarar a esta belleza?- respondió Micaela y ahora la sorprendida fui yo.