65 » Verde esmeralda

270 31 32
                                    

Séptimo mes

- Hola pequeño. -Jughead dejó un besito en la barriga abultada de su esposa. Una sonrisa se formó en sus labios cuando sintió pequeñas pataditas desde adentro. - Mamá y yo te estamos esperando con ansias... Bueno, ella más porque dice que no aguanta los dolores en la espalda y dice que no la dejas hacer nada.

Recibió un golpe inofensivo en la nuca de parte de su esposa. - No le digas eso a Liam. -lo retó.

- ¿Que? Pero si es cierto. -él se quejó y volvió a ver a su barriga. - Si, mamá es un poquito agresiva, pero no tanto. -le quitó importancia. - Ya tu habitación está casi lista, pequeño Liam... Y tus tíos te han regalado muchas cosas, juguetes, ropa, cosas para tu habitación... ¿Sabes algo? Tu madre y yo ya imaginamos muchas veces como serías... Tu cabello probablemente será rubio como el de nosotros, pero tus ojitos son un misterio para nosotros... ¿Serán azules o verdes? Espero que verdes como los de tu mamá, son hermosos...

La rubia lo miraba algo sonrojada, sintiendo que su bebé desde adentro seguía dando pequeñas pataditas solo por escuchar a su padre hablarle como cada día.

- Si, bebé, tu mamá es hermosa. Sus ojitos, como ya dije, son de un tono hermoso verde esmeralda y muy muy lindos, parece que me hechizan cada vez que los veo. -él pelinegro sonrió. - Tiene unas pestañas largas muy hermosas... Sus labios son rosaditos y sus mejillas se ponen rojas cuando le digo cosas lindas. -rió. - Cuando estés más grande podremos molestarla porque no le gusta que la haga sonrojar, pero tú me ayudarás, ¿Verdad?

- Oye. -ella se quejó. - ¿Puedes no enseñarle esas cosas a nuestro pequeño tan rápido? -bufó.

- ¿Que? No son cosas malas. -él se defendió. - Solo le enseñaré a decirte cosas bonitas para que te pongas rojita como un tomate... -dijo burlón.

Ella rodeó sus ojos. - Ven, dame un besito. -pidió.

El se inclinó y unió sus labios en un beso corto. Cuando se separaron dejó otro par en su mejilla y le sonrió.

Cuando se estaba separando el sonido del timbre de la mansión llamó la atención de la pareja que estaba en un sofá de la sala.

- Yo iré. -él avisó levantándose.

Minutos después Jughead volvió con una caja en sus brazos. La dejó en medio de los sofás.

- Entrega de Amazon... ¿Pediste más cosas? -preguntó divertido.

Ella se sentó en el sofá sonrojada. - Si... -admitió. - Me olvidé de decirte, son unas lámparas para la habitación de Liam. -dejó sus manos sobre su barriga.

El sonrió abriendo la caja, sacó las lámparas y se las enseñó, eran dos con forma de nube y otra con forma de luna.

- Están hermosas, nena. -él admitió. - ¿Donde las quieres poner?

- En la pared dónde está la cuna. -ella respondió. - Creo que ahí quedarán bien.

El asintió. - Creo lo mismo. -dijo metiendo todo a la caja de nuevo. - ¿Vamos arriba para ponerlas?

La rubia asintió levantándose haciendo una mueca debido al dolor de su espalda baja. - Vamos...

Subieron a la habitación de su hijo, entonces Betty se sentó en el sillón que compraron y Jughead comenzó a sacar de nuevo las lámparas para ponerlas en la pared que le dijo la rubia.

Criminal Love | Bughead | +18Donde viven las historias. Descúbrelo ahora