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Las clases de fotografía eran lo mejor de mi semana, llevaba ya dos clases y aunque amaba lo que estudiaba a diario, sin duda alguna mis clases con el profesor Haitani eran increíbles

Me encantaba observar al de cabello morado, era un agasajo ver como hablaba de fotografía y todo lo relacionado a ello, si bien la primer clase se basó en presentarnos y mostrar nuestras cámaras, la segunda clase fue más técnica y eso me fascinó, él era profesional y se notaba por todo lo que decía y enseñaba

Lo único malo durante las últimas tres semanas, era que no había visto a mi hermano desde que me había llevado a casa en medio de la semana, luego de eso solo había hablado por llamada e incluso en más de una ocasión hicimos video llamada donde me mostraba al pequeño gatito que iba creciendo sano y fuerte

Me encontraba sentada en el primer banco en la clase de fotografía, con mi mejilla poyada contra la mano observando al Haitani que caminaba entre las mesas observando las fotografías que habíamos tenido que traer para ese día

No podía quitar la mirada del profesor que se detenía en todos los bancos, observando las fotografías para darnos consejos para mejorar las tomas, como tener una mejor luz, un mejor ángulo o incluso mejorar la cámara de ser necesario

La mayoría de los que asistían a esa clase, no les gustaba o interesaba para nada la fotografía, los chicos que habían en ella eran cinco o seis e iban por amor al arte, mientras que las chicas eran muy pocas las que si lo hacían por ello y podía contarlas con los dedos de mis manos

Las chicas solo iban a esa clase para verlo o coquetear descaradamente con él, era increíble la forma en la que casi se le tiraban encima cuando se acercaba a ellas para hablar sobre la clase, pero a él no parecía molestarle eso, incluso disfrutaba de la atención que recibía por su parte, lo cual no me importaría ni me molestaría de comportarse de la misma manera conmigo, algo que no sucedía

Cada vez que intentaba acercarme a él para hablarle, ya fuera de fotografía o no, mantenía una distancia innecesaria, siempre buscaba la manera de que nuestras manos no se tocaran al entregarnos fotografías, hojas o las cámaras fotográficas, me evitaba y eso me frustraba muchísimo

¿Acaso lo había hecho sentir incomodo al coquetearle semanas atrás?

No lo comprendía, había dejado de insinuarme a él al notar que no tenía resultados, tampoco era como que nos viéramos tanto para decir que lo acosaba, solo le había coqueteado al conocerle y en la primera clase, ya luego había dejado de hacerlo ¿Porque seguía evitándome?

Intenta mejorar eso y tus imágenes se verán mucho mejor- le dijo al chico que estaba en el banco detrás de mí y se acercó al mío, deteniéndose frente a mí para tomar las fotografías que había dejado sobre mi mesa- vaya, tienes talento- lo vi mirar una por una, quedándose viendo una en específico- esta es hermosa

Dejó frente a mí la fotografía y sonreí al ver la playa que estaba cerca de la universidad en ella, amaba ese lugar, era tranquilo y solitario, como había paraderos turísticos cerca, en ese lugar que era solo naturaleza no iba nadie, preferían la comodidad y lujo antes de la belleza de la naturaleza

Creo que tus fotografías son difíciles de mejorar- comentó al momento en que la campana se escuchó, dándole final a la clase- muy bien, pueden irse, recuerden aplicar lo que les enseñé

Vi como todos comenzaban a tomar sus cosas para salir del lugar y comencé a guardar las mías también, tomándomelo con calma así poder quedarme a solas con el profesor ya que quería hablar con él, quería dejar varias cosas claras así poder disfrutar de sus clases al máximo y que no hubiera malos entendidos

Cuando quedamos solo nosotros me levanté y caminé hacia su escritorio, donde él estaba frente a su computadora concentrado

¿Todo está bien, señorita Kurokawa?- preguntó sin levantar la mirada

Photography | Ran Haitani | +18Where stories live. Discover now