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Desde ese trágico día nada volvió a ser normal, fue una etapa en su vida que lo había marcado demasiado, y ver como todos intentaban disimular que eso nunca paso era peor, sobretodo para el y cierto alpha peliverde, quien estaba en las mismas situaciones que el.

Pelear y desconocer a tu mejor amigo y tu destinado debía ser horrible, ¿No?, esa era la realidad de Shoto e Izuku.

— Uhg.. —

El bicolor se despertó con una fuerte migraña y dolor de cabeza, por más años que hubieran pasado no lo olvidaba, no olvidaba ese día, soñaba cada noche como su ex pareja, a quien tanto amo y su destinado, matando a sus compañeros frente a el sin piedad, recordar esa mirada sádica le daba asco, pero.. también soñaba con sus mimos y sus besos, con su calidez y sus feromonas.

Era una mierda, no poder superarlo era una mierda, que su Omega en cada celo sollozara y gimoteara llamándolo con desespero era una total mierda.
Tocarse así mismo con el anhelo de que fuera el cenizo quien se lo cogiera era horrible.
Su Omega estaba desesperado por tener a su alpha.

— Joder.. porque tiene que existir el celo —

Se volvió a acostar, cada vez lo sentía más cerca, faltaban pocos días para su celo, y por lo tanto le habían dado tres días de anticipación para que estuviera solo y no cometiera alguna locura.
Aunque la mayor locura sería embarazarse de un alpha desconocido, porque ya estaba marcado por ese puto alpha cenizo de sonrisa hermosa y ojos rubí, desde que descubrieron que eran destinados se habían marcado mutuamente; Y para su sorpresa y de muchos, aquella marca seguía estando en un tono rozaceo vivo, y demasiado sana... Lo cual significaba muchas cosas, y ninguna las aceptaba.

— Tal vez debería llamar a Izuku... Al menos no lo pasaría solo.. —

Ya se había resignado, por más que su Omega se mantuvo fiel y anhelante a la llegada de su alpha, era momento de madurar y entender que esté ya no volvería, y si lo hiciera, moralmente hablando, debería encarcelarlo sin dudas.
Tenía que hacer su vida, hacerse un profundo y doloroso tratamiento para quitarse la marca de el cenizo, y volver con su vida romántica, aunque sería difícil, al menos tenía que intentarlo.

Izu, ¿Aún está de pie tu propuesta?
12:37am

¡Hola Sho!, claro que sí, se que la pasas muy mal durante tus celos, así que sería un placer ayudarte.
12:39am

Bien, ¿Puedes venir a mi casa dentro de tres días?, cuando empiece mi celo.
12:40am

¡Ahí estaré Sho!, espero que pueda serte útil.
12:41am

Gracias Izu.. lo aprecio mucho, que pases linda noche ❤️.
12:42am

Igualmente Sho ❤️.

Sonrio levemente al terminar la conversación, sabía que el peliverde era su única y mejor opción, tal vez incluso podría intentar una relación con este.

Se durmió con esa idea en mente, aunque como siempre, tuvo pesadillas, y la horrible sensación de sentirse observado.

•¿Por que?• [Bakutodo]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora