Tantos años- Pablo Gavi

Cpaitulo 23

Tres maletas.

Una niña de 2 años.

Y el aeropuerto lleno.

Que estrés. 

Mis padres se habían ido con los padres de Aurora y Pablo a Barcelona para ir a Qatar.

Mi hermana había volado de Barcelona a Sevilla y nos esperaba dentro del aeropuerto para ir juntas.

Los chicos se fueron hace unos días.

Senté a Sofía en una maleta y con el carro fuimos a embarcar las maletas.

La que llevaba más ropa era Sofía.

Pero es que con una niña pequeña nunca había suficiente ropa.

Uno de los primeros consejos que me dio mi madre.

Embarcamos las maletas y pasamos el control.

Cogí el teléfono y llame a mi hermana.

Donde estás?- le pedí cuando descolgó el teléfono.

En la D87 es nuestra puerta- me dijo antes de colgar.

Fuimos hasta la puerta para encontrarnos con mi hermana.

No sin antes comprar una botella de agua y unas galletas.

Mira la tita- le dije a Sofía antes de dejarla en el suelo y corrió hasta Candela que estaba sentada en la silla.

Que tal Sofi?- le pidió Candela

Bien- dijo ella y yo me senté a su lado dejando el bolso al lado del de mi hermana para abrazarla.

Estuvimos hablando y se hizo la hora de subir al avión.

Íbamos en primera clase y lo que más agradecí es que tuviera televisión para poder entretener a Sofía durante el viaje.

Porque si no, no sabía que hacer con ella 10 horas sentadas sin poder levantarnos.

Antes de despegar fue pasando de asiento en asiento y Candela me hizo una foto con Sofi para subirla a insta.

@candelarodriguez.   próximo destino, Qatar.

El vuelo comenzó y tras ver una película, Sofía se quedó dormida.

Me giré a ver a Candela y también estaba dormida.

Así que me dispuse a hacer lo mismo.

En una hora aterrizaríamos y nos acababan de traer la cena.

En Qatar serían las 10 de la noche cuando llegáramos.

La comida estaba malísima, pero era un avión, no se podía pedir mucho más.

Sofi come- le estaba intentando dar una cuchara de pasta con tomate.

Ella me abrió la boca y le pude dar la comida.

Mastica- le dije poniendo la mano tapando la mini tele que tenia cada asiento.

Ella me miro frunciendo el ceño, cuando ponía esa cara era igual a Pablo.

Ella acabo la comido y hasta que aterrizo el avión estuvimos jugando con las muñecas.

Mi hermana durmió hasta que aterrizamos en Qatar.

Bajamos del avión y nuestro padre nos esperaba en la puerta del aeropuerto.

Cojemos las maletas y fuimos hasta la salida.

En cuanto salimos una ola de calor nos golpeó.

Mi hermana se quito la sudadera.

Sofía estaba sentada en las maletas en el carrito.

Sofi tienes calor?- le pedí y ella negó.

Nos dirigimos a mi padre y los saludamos.

El empezó a besuquear a Sofi y nosotras guardamos las maletas.

Sentó a Sofía en la sillita y nos montamos al coche para ir al hotel.

Cuando llegamos al hotel me puse seria en cuanto baje del coche y luego mire a mi hermana.

Si te lo decía te negabas- me dijo mientras bajaba maletas del coche.

No Candela, tenia derecho a saberlo- le dije mirando el autobús de la selección española.

Estábamos en el mismo hotel.

Te mato- le dije y ella solo sonrió.

Cogí a Sofía que ya estaba dormida y nos dirigimos dentro.

Estaba temblado.

Nerviosa por si lo veía ahora.

Sabía que lo vería pero no estaba preparado para verle ya.

Nada más entrar, Pedri se acercó a saludar y abrazó a mi hermana.

Al separarse me miro.

Momento incómodo?

Si.

Hola Pedri- le salude yo con una sonrisa.

Hola Carlota- dijo el dándome un abrazo por el hombro.

El ambiente se calmó un poco.

Pero dejo de ser tranquilo cuando escuchábamos muchas voces detrás.

Solo reconocí la suya.

Al igual que mi hermana.

Yo me voy- les dije antes de dirigirme al ascensor.

Camine rápidamente hasta el ascensor.

Noté unas manos en mis hombros y me sobresalte.

Al girarme vi a Sira.

Que susto me has dado tía- le dije y ella rio.

Me dio un abrazo y nos subimos al ascensor.

Cómo está?- me pidió acariciando su cara dormida.

Enorme- le dije- crece por días.

Me imagino- me sonrió- has salido corriendo.

Porque le he oído- dije saliendo del ascensor- y aún no estoy preparada para verle.

Pues mañana lo verás seguro-

Lo sé- le dije resoplando- pero no esperes que me siente en la mesa con ellos.

Nos sentamos en una mesa apartada- me dijo y yo se lo agradecí.

Buenas noches amor- me dijo antes de darme un abrazo.

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