ɴᴏ ʟʟᴏʀᴇꜱ ; ᴍᴀʀɢᴜꜱ

16

"Marcos, no te muevas"

La voz de Luke le alerta cuando va a servirse su quinto café del día. Suena tensa por lo que, quedándose quieto de repente, levanta su cabeza para ver cómo los ojos del alfa están abiertos de par en par.

"¿Qué mierda pasa?" Está de suficiente mal humor como para que ahora su amigo le empiece a molestar.

"No sé si lo sabes, pero tienes algo en el pecho. No le golpes cuando lo veas" Mirándole con la mandíbula apretada, dirige su mirada a su pecho para observar a un pequeño bebé que le mira fijamente con su chupete en la boca desde el portabebés.

"Sos un tarado" Un gruñido sale de su pecho mientras le tira un plátano del tazón que hay en la isla de la cocina dentro de la estación.

El chillido que suelta Luke coinciden con el jadeo de Nico, pues el cachorro se ha asustado con la reacción de su alfa. Cuando vuelve a mirarle, este ya está con un puchero a punto de llorar.

Mierda.

"No, no, cachorro. Ya está, bebé. Era una broma, ¿sí?" El labio inferior de Nico sigue temblando mientras le mira, por lo que él observa a Luke y le indica con una mirada feroz que se acerque "Ven aquí ahora mismo" Susurra para que el cachorro no se altere más.

Luke asiente, temeroso a un nuevo golpe. Se acerca rápidamente a su lado y Nico se queda mirándole fijamente, curioso ante el nuevo individuo frente a él.

"¿Qué hago?" Marcos ignora el susurro de su amigo y le sonríe amorosamente al pequeño que ha dejado caer el chupete de su boca.

"Ves, cachorro. Este es Luke, es un poco tonto. Es su culpa si lloras" Luke le frunce el ceño cuando dice eso y alza su mano para golpearle el hombro levemente, pero Nico grita manoteando en su dirección.

"¡Ooooh!" Ambos alfas se miran anonadados.

Marcos nunca había escuchado a Nico gritar de esa manera. Es cierto que hace ruiditos de vez en cuando, intentando imitar lo que escucha, pero su sorpresa es mayor cuando el cachorro quiere alcanzar a Luke con una mueca enfadada y agitando su mano.

No puede evitar soltar una carcajada.

"Te quiere pegar" Luke sigue sin decir nada, visiblemente sorprendido con la situación "Este cachorrito me está defendiendo" No puede evitar sonar tan emocionado cuando lo dice. Lo levanta un poco y besa sus mejillas efusivamente, lo que hace a  Nico sonreír.

"Le estás pegando tu agresividad" Luke habla por fin y el cachorro vuelve a querer golpearle "Controla a la fiera"

"No le llames así" Ahora es él quien cumple el deseo del cachorro y le pega un golpe seco en la nuca, recibiendo una reacción que nunca habría imaginado tan mágica.

Una carcajada. Nico se está riendo.

"¡Se ríe!" Luke tiene una sonrisa boba como él, por lo que ni siquiera se inmuta cuando Marcos vuelve a darle un golpe en el mismo lugar.

Otra risa más. Marcos jura que puede llorar en cualquier momento.

"Dios, es el sonido más bonito que he escuchado en mi vida" Nico ríe entrecortadamente intentando imitarle y pegar a Luke también "Hermano, acércate y deja que te pegue"

Luke no duda ni un segundo y deja que Nico le dé unas palmadas en la mejilla imitando golpes que hacen reír más fuerte al más pequeño. Esto es lo mejor que le ha pasado en mucho tiempo.

"¿Qué están haciendo?" Eduardo entra extrañado a la sala. Los mira con el ceño fruncido "¿Por qué sonríes, Marcos?"

"¡El cachorro se ríe!" Eduardo abre los ojos sorprendido y corre hacia ellos para observarlo. Nico sigue haciéndolo, cada vez más agitado ante la gracia que le produce las caras que hace Luke cada vez que recibe un golpe.