🥀Las pasiones del emperador Capitulo 4🥀

1.5K 221 88
                                    

Bianca caminaba de un lado al otro nerviosamente, esperando por que los guardaespaldas de su madre trajeran a la mugrienta pordiosera que su padre le impuso como hermana hace 15 años, el respetado general Pionnoir Firzant, también conocido como "E...

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Bianca caminaba de un lado al otro nerviosamente, esperando por que los guardaespaldas de su madre trajeran a la mugrienta pordiosera que su padre le impuso como hermana hace 15 años, el respetado general Pionnoir Firzant, también conocido como "El Ejército de Un Solo Hombre", el guerrero mas fuerte del ejército blanco y el alfil más importante de la Reina Blanca, fue quien te adopto y te llevo a su casa cuando solo tenias 4 años, todo por una deuda de honor contigo.

No recuerdas mucho de esa época, solo recuerdas a este temible monstruo parecido a un dragón con cara de pez y lengua de serpiente destruyendo tu aldea, lo quemaba y destruía todo a su paso, la gente huía asustada pidiendo ayuda, pero el dragón no dejaba sobrevivientes ya que a los aldeanos que no devorada prefería calcinarlos vivos con su potente rayo, tú fuiste la única sobreviviente de ese insidente, por que el general en compañía de sus soldados lograron derrotar al monstruo, cuando acabó la batalla y buscaban sobrevivientes por la aldea el señor Pionnoir te encontró llorando abrazada al cuerpo sin vida de madre, suplicando que despertara, eso le rompio el corazon, le recordó a su propia niña en casa con su esposa, le había fallado a esta pequeña al llegar tarde al salvar este pueblito, asi que te llevo con él como manera de compensar su error.

El señor Pionnoir fue un gran padre adoptivo para ti, amoroso, amable, te consentía siempre que podía, con el tiempo te vio como su propia hija, sin embargo no fuistes recibida con el mismo amor por su esposa Carlota, tampoco por su hija Bianca, ya que la niña no quería tener hermanas y era feliz siendo hija, única no quería compartir el amor de su padre ni nada de lo que ella tenía con otra niña que ni era su hermana de verdad.

Por su lado Carlota veía a la está niña recogida como un simple acto de caridad de su esposo y que este debió dejarla en un orfanato en vez de llevarla a la casa como quien recoge un gato o perro de la calle, encima se atreve a ser más sobresaliente en los estudios y poderes mágicos que su amada hija de sangre, por eso se aseguró de nunca fuera mejor en nada que Bianca a punta de maltrato fisico y psicologico a escondidas de su marido... Estas mujeres te odian con todas sus fuerzas.

Pero la inconformidad de la mujer ante tu presencia se convirtió resentimiento y odio, ya que conforme pasaba el tiempo parecias volverse más hermosa, con mejor personalidad y talentosa en los estudios que su hija biológica, como cereza sobre el pastel, comenzó a circular el rumor en entre los aristócratas y los nobles sobre que _____, podría ser hija de Pionnoir con alguna amante que tenía escondida y que a Carlota le vieron la cara de estupida ya que adopto a la hija ilegitima de su marido, ya que el general Firzant y tú comparten el tono cabello negro media noche, un color muy poco usual en ese reino, pero eso es solo una casualidad del destino, pero esa casualidad fue tu condena.

Aprovechando que su trabajo mantenía a Pionnoir lejos de casa por meses, incluso años, Carlota desquito todo resentimiento y desprecio hacia a ti, siempre siendo cruel y violenta contigo, te golpeaba a la mas minima falta, algo tan simple como respirar con fuerza o no pararte erguida ameritaba una bofetada, recordándote que eras solo una pordiosera y basura que su esposo recogió de la calle que nunca serás una hija de la familia Firzant asi que no vale la pena que le diga a su padre cuando vuelva de sus misiones, finalmente te obligo a ser la sirvienta personal de Bianca e instigó a su hija para también fuera tan cruel como pudiera contigo y que te hiciera toda clase de maldades mientras crecían.

Primeros cosas simples como hacer travesuras y luego echarte la culpa para ver cómo su madre o la criada de turno te regaña y castiga, pero fue escalando hasta hacerte cosas realmente violentas y crueles, como cuando te encerró en una baúl pequeño y estrecho todo un dia o cuando te empacho por las escaleras mientras cargabas y un momento de libros pesados, y cuando despertaron tus poderes de santa se puso aun peor, primero robandote el crédito de tu habilidad, obligandote a siempre estar a su sombra y hacer magia milagrosa, solo ser una sombra... Aún no sabes cómo sobreviviste a todo ese maltrato.

-Basta de caminar así Bianca, sudaras tu vestido- Ordenó Carlota tranquila, sentada tranquilidad en un elegante sofá del salón de espera donde se encontraba.

-Debimos empezar hace 5 minutos y si _____ no llega...- Trato de hablar Bianca muy nerviosa.

-Va a llegar a tiempo, Gaspar y Horacio siempre traen a la pordiosera cada vez que intenta escapar, esta no es la excepción- Dijo la mujer mayor con confianza,

La señora Firzant ya estaba ideando cómo castigará a esa huérfana inutil una vez que la ceremonia de ascensión termine y su marido este distraido, sin embargo al cabo de un rato los que volvieron fueron su esposo, el príncipe William y el gran sacerdote del templo, pero ni rastro de su hija adoptiva _____.

-Oh cariño ¿Pero qué haces aquí? ¿Y _____?- Pregunta Carlota comenzando a ponerse nerviosa por la mirada seria de los varones.

-_____ no aparece- Dijo Pionnoir secamente -La última vez que le vieron fue hablando con los invitados del evento y ya no se supo más de ella, ya envié a mis mejores alfiles a buscarla- Agregó el pelinegro ocultando que en realidad está preocupado, ya que le vieron hablando con el emperador Rosehearts, solo espera que no le haya faltado el respeto al temperamental monarca, pero esas palabras solo hicieron a las mujeres empezar a sudar frío.

-Pe.. Pe.. ¡Pero necesito a _____! ¡Si ella no está junto a mi me da miedo usar mi magia milagrosa, sobre todo con tanto público!- Tartamudeo Bianca aún más asustada de que están por descubrirla -¡Yo necesito a mi querida hermana para tener confianza!-

-Señorita Bianca usted no necesita de su hermana- Dijo el sacerdote muy firme -Usted a hecho milagros únicos y maravillosos que ha traído mucha prosperidad a nuestro reino los últimos años, eso lo hizo usted, nuestra esperada santa, es momento para que sea reconocida por sus logros-

-Además Bianca, ya te dimos gusto dejando que un familiar te acompañe en el altar además de mi el sacerdote y si insistes en que un miembro de tu familia te acompañe para tener confianza, pues que lo haga tu padre, es un militar importante y admirado, se verá bien que esté junto a ti- Agregó William cruzándose de brazos.

-Prefería seguir buscando...- Dijo el señor un poco nervioso y no muy convencido, después de todo no le gusta estar enfrente de tantas personas, por algo prefirió la carrera militar y esconder su cara tras un casco.

-No querido, tu sube con Bianca y yo buscare a _____- Interrumpió Carlota a su marido forzando una sonrisa, pero por dentro está muerta de miedo e iracunda a partes iguales -Yo la buscare me asegurare que este detras del escenario para darte apoyo mi niña- Agregó la mujer sujetando a su hija por los hombros dándole a entender su plan desesperado para salvar la reputación de su hija y ultimadamente de toda la familia.

-Es.. Esta bien madre...- Dijo Bianca sintiendo que aun no todo está perdido, definitivamente le dará a _____ la golpiza de su vida en cuanto estén a solas.

-En ese caso empezamos de una vez con la ceremonia, que mi madre está muy molesta por este retraso de más de 15 minutos- Dijo el príncipe blanco adelantando para salir altar.

-Después de ustedes- Dijo el sacerdote amable pero firme para que ya Bianca y su padre pasen al altar también

Bianca miró a su papá forzando una sonrisa que parecía muy nerviosa, mientras que su padre le dio una ligera palmada en la espalda para que avanzaran juntos y dar inicio a la ceremonia...

Continuara...

No quiero al héroe, quiero al villanoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora