JenLisa 1/5

1.2K 80 1
                                    

Lalisa Manoban (G!p)

El sabor del ron degustaba mi paladar mientras miraba el hermoso paisaje según una pequeña castaña. Esa castaña desde que la ví supe que iba a ser mi perdición, poco sabía que me haría perder rápido la paciencia y sentir ira ante su absoluta desobediencia hacia mi. Pero solo eso hacía que la deseara aún más.

—¿Jennie?—miro a Kai por encima de mi hombro. Vuelvo a llevar el vaso a mis labios degustando la bebida alcohólico nuevamente.—

—En su habitación, dormida.

El se apoyó en el barandal a mi lado, arqueé mi ceja ante su comportamiento extraño. Poco importancia le dí, no me interesaba.

—¿Seguirás teniéndola aquí secuestrada?—el preguntó. Mis ojos surcaron por el amor cristalino, llamándome para un refrescante baño.—Lalisa...

—No te importa, Kai.—acato. No le daría explicaciones a nadie.— la quiero aquí, a mi lado, eso es lo único que tienes que saber para hacer tu trabajo.

—Tienes miles de mujeres que estarían dispuestas a darte lo que quieras. ¿Por qué ella?—deje el vaso sobre el borde. Me estaba agotando la paciencia con su insistencia por Jennie.— te acostabas con todas y ahora de repente quieres a una chica en concreto.

—Esas mujeres no son Jennie.—hablo.— y si la quiero a ella es mi puto problema, Kai. No me hagas extrañarme por tu comportamiento hacia ella.—miro a BamBam, mi hermano, acababa de llegar. Al percatarse de la situación camina tranquilo hacia nosotros.— no me falles en lealtad, Kai. ¿No querrás acabar como aquel hombre? Eres más listo que eso.

Palmeo su hombro indicándole que se largue, el obedece suspirando pero vuelvo a ignorarlo. Sonrío al ver a mi hermano.

—¿Lo enterraron?—BamBam asiente con las manos en los bolsillos de su traje. Sonrío.— gracias, te debo una hermanito.

—Me debes varias, Lala.—el habla serio.—

—Soy una mujer de palabra, BamBam.—el suspira.—

—Mataste a ese hombre sin parpadear.—asiento.— ¿que hizo para enfadarte? Nunca tomas decisiones tan precipitadas.

—Tocar a mi mujer.—bebo el poquito de ron aflojando mi corbata. La sangre me hervía.— tratarla como una puta delante mío. Sabes que no me gusta que toquen lo mío.

—¿Cuándo dejarás de meterte en problemas por ella?—lo miro. Aunque estuviera preocupado no debe juzgar mis acciones.— joder Lisa, ¿quieres dejar de pensar con la polla?

—¿Qué harías si un soplapollas toca a tu esposa de esa forma, juzgándola por como viste o simplemente llamarla puta porque baila?—el se queda callado, como imaginé.— deja de meterte en mi asunto con Jennie, BamBam. Es cosa mía.

—Es que no entiendo porque de un día para otro solo quieres una mujer.—el suspira.— no quiero que mueras por actuar impulsivamente, Lisa. Entiéndeme.

—Vuelvo y repito, deja de meterte con el tema de Jennie. Si la quiero a ella es mi problema.—mis manos aflojan los botones de mi camiseta.— ahora si me permites iré a darme un baño, me duele la cabeza de escuchar vuestros malditos reclamos.

—Solo me preocupo por ti, Lala. Eres todo lo que me queda.—lo miro por encima de mi hombro y sonrío.—

—Deja de preocuparte ¿acaso dudas de mi habilidades?—el niega.— entonces quédate tranquilo. Ve y descansa un rato, debemos salir luego.

—Bien.

[...]

Kim Jennie

—Dios mi cabeza...—masajeo la zona con mis dedos. Los recuerdos de anoche me invaden sintiendo los reconocidos escalofríos cada que recuerdo su mirada salvaje y animal.— mierda...

JENLISA Y TÚ/ ONE SHOTSDonde viven las historias. Descúbrelo ahora