𝟒

1.1K 68 13
                                    


Eran las doce, del 24 de noviembre, lo cual significaba que era el cumple de Alex.

Noemí apareció con una tarta para el cordobés y le cantamos el cumpleaños, lo cual le hizo muchísima ilusión.

-Felicidades niño. -Me acerqué a el y le dí un fuerte abrazo.

-Gracias niña.

Nos quedamos un rato hablando hasta que nos cansamos y nos fuimos a dormir.

(...)

Hoy sorprendentemente me había levantado mas pronto de lo normal, hoy nos tocaba grabación del disco, así que sería un dia relajado.

Estaba terminando de arreglarme cuando escuché la puerta de la habitación abrirse.

-Que madrugadora estás hoy. -Alex se acercó a mi y me abrazó por la espalda.

-Lo mismo le digo al cumpleañero, ¿has dormido bien?

-Pues la verdad es que si. -Sonrió.

Aproveché a peinarme y despejarme un poco, cuando sonó la música indicando que el día daba comienzo, varios de nuestros compañeros fueron apareciendo.

-¿Ya estás así de guapa a estas horas? Joder chica, ya me gustaría ser tu. -Me acerqué a Naiara y la abracé.

-Hoy no se que me ha pasado pero me he levantado bastante pronto para ser yo. -Dije y me dirigí junto a la zaragozana a la cocina para desayunar.

Estábamos charlando tranquilamente cuando de repente la botella de Paul se abrió sola. Se le cambió la cara por completo.

-Decirme que habéis visto eso, que la botella se ha abierto sola.

-Una puta polla. -Dije yo, echándome para atrás.

-Los fantasmas del Tórax acaban de hacer su primera aparición. -Dijo Omar vacilandonos.

-Callate Omar, que a mi me dan mucho cague estas cosas de verdad. -Lo admito, soy una persona que me cago con estas cosas. Le di una pequeña colleja en la nuca. -Rusli, esta noche duermo contigo. -Ella se limitó a reírse.

-Dejar de decir tonterías que aquí no hay entes, tenéis unas cosas de verdad. -Dijo Juanjo medio enfadado, en el fondo creo que le pasa como a mi, pero tiene miedo de admitirlo.

Noté como alguien intentó darnos un susto a Juanjo y a mi por la espalda, Juanjo pegó un grito y yo me dí la vuelta y sin reaccionar, le dí un puñetazo en la nariz por el susto.

-Hostias. -Dije viendo que a Alex le empezaba a sangrar la nariz. -Joder, perdón soy imbécil, espera que te ayudo. -Dije levantándome rápidamente de mi sitio para ayudarle.

Fuimos al lavabo y le ayude a limpiarse hasta que le dejó de sangrar.

-Madre mia, menudo regalo de cumpleaños te he hecho, de verdad que lo siento.

-No te preocupes Luna, para la próxima no te daré mas sustos. Anda ven. -Dijo y me abrazó.

-Para la próxima vez tendré mas cuidado.

𝒕𝒂𝒏 𝒅𝒆𝒔𝒄𝒐𝒏𝒐𝒄𝒊𝒅𝒐𝒔; ot 2023Where stories live. Discover now