Clandestine love

Venganza

Italia                             2:00pm

Yoongi llegó con la bañera de agua hirviendo, viendo el cuerpo de Jeon cubierto en sangre así como estuvo el mío en algún momento.

- ¿Por qué estás haciendo esto? - Le preguntó a su jefe.

- La verdad, ni yo sé - Respondió con su voz rasposa por los gritos, gemidos y sollozos de dolor que estaba soltando hace minutos.

Dos horas en las que no paré ni un segundo, su cuerpo en heridas abiertas.

Lo desaté llevándolo hacia la bañera de donde salía humo.

- No - Dijo en un suspiro con lágrimas en sus ojos.

- Tu no te hubieras detenido si yo te lo hubiera pedido - Sin más lo tiré al agua de la misma forma que él lo hizo.

Escuchar sus gritos mientras yo me tomaba el mismo vino que él tomaba me satisface.

Me quedé sentado hasta que el agua se puso fría, me levanté directo a la puerta.

- Jimin.... - Lo escuché

- Tranquilo, solo te faltan cuatro días sin comer.

Salí cerrando la puerta con candado.

¿Ahora como llego a mi habitación?

Comencé a divagar por la mansión viendo lo grande que era, puertas por todos lados.

Ví a Yoongi de nuevo y le pedí que le llevara un vaso de agua y le aplique la crema que me aplicó a mi.

- ¿Por qué están haciendo esto? - Indagó.

- Es un trato entre él y yo - Sonreí - Por cierto, me puedes llevar a mi habitación.

"Suga", su nombre dentro de la mafia me llevó a mi habitación, segundos después caí dormido.

7:00pm

Desperté después de unas horas de sueño reparadoras, me senté en la cama viendo una lapto en el escritorio.

Sonreí, estaba cumpliendo así como yo también.

Me acerqué viendo que encima de la lapto había una nota.

<<Llama apenas despiertes, Jungkook me pidió que te diera una llamada hacia tu mejor amigo>>

Vi al peli morado abrir la puerta de la habitación y por un ladito meter una bandeja de comida.

- Ey!, espera - Alcé la voz para que me escuchara.

- Si?.

- Le puedes decir a Yoongi que ya desperté por favor, y gracias por la comida, es deliciosa - Pedí y agradecí

- Claro, no es nada, debes comer bien, estás muy flaco - Respondió después de mirarme con extrañes

Minutos después mientras yo terminaba la cena Yoongi entró a mi habitación con mi celular en la mano, extendió su mano y yo lo tomé.

- Gracias - Sonreí

Sin decir nada se postró a un lado de la puerta.

Encendí mi celular viendo miles de mensajes de Taehyung, básicamente está en pánico.

Lo llamé y no esperó ni que el celular sonora.

- ¿¡Jimin!? - Habló con angustia.

- Hola TaeTae.

Escuché como se soltó en llanto y yo sin poder evitarlo lo acompañe con mis lágrimas.

- Por dios, estaba tan preocupado, por favor dime qué estás bien - Suplicó entre sollozos.

- Si TaeTae, estoy relativamente bien - Sorbí mi nariz.

- ¿Dónde estás?.

- En Italia.

- ¿¡QUÉ!?, ¿¡CÓMO CARAJOS LLEGASTE AHÍ!?.

Me dispuse a contarle todo lo que recuerdo, recibiendo respuestas como:

<<Que hijo de puta>>

<<Asi se hace Mimi>>

<<Lamento por lo que volviste a pasar>>

<< Lo mataré con mis propias manos>>

Después de tener una charla refortalecedora con mi mejor amigo y asegurarle que en algún momento nos volveremos a ver terminé la llamada.

Entregué mi celular y con lágrimas en los ojos agradecí, Yoongi se fué y me derrumbe.

Extraño mi vida, extraño todo antes de esto.

Sé que Suga se siente culpable pero ya ni modo, ya estoy aquí.

Las horas pasaron y ocupado en mis clases pasaron dos días, dos días en los que no salgo de mi habitación porque todo me lo traen.

Hoy iría a visitar a Jeon, son las 11:40 de la noche, la comida hoy fue pizza y como si todo cuadrara le llevé la misma comida que él me llevó a mi.

Abrí la puerta del sótano viéndolo hecho bolita en una esquina, yo realmente no entiendo porqué está soportando todo esto cuando claramente puede ordenar que lo saquen y ya.

Y es claro, a él si le duele más que a mi.

- Jimin - Habló muy poco audible

- Toma - Le dí la porción de pizza y me senté cruzando mis piernas, apoyando mi barbilla en la palma de mi mano mientras mi codo reposa en mi muslo.

Mientras comía le dije a una de las personas que estaban en la puerta que le trajeran agua.

No soy tan malo, y aunque no lo demuestre esto no me agrada, solo me gustó el primer día.

- Park, no sé cómo soportaste esto sin inmutarte.

- ¿Es un halago? - Indagué

- Tómalo como quieras - Bufó

- Yo no tomo palabras de personas tan mierda como lo es usted - Pude notar como me fusilaba con los ojos.

Pero también un pequeño brillo de admiración.

Quien lo diría, el lider de la mafia teniendole admiración a un simple mortal como yo.

- Ya solo te faltan dos días, soporta que queda poco - Me levanté y abandoné el lugar.

Llegué a mi habitación y me duche para caer en los brazos de morfeo.

¿Realmente quiero seguir dándole ese sufrimiento?

Y muy adentro de mi, mi inconsciente solo pensó una respuesta.

"No"

No sirves para ser malo Jimin, ya deja de intentarlo.

No des lo mismo que te hicieron pasar a ti años atrás, sabes cómo se siente.