||✿Capítulo 9: Reunión✿||

53 12 15
                                    

Una sala con poca luz, un ambiente pesado, miembros de un grupo reunidos para tratar un tema de suma importancia.

A excepción de dos que ya no están entré nosotros, todos estamos aquí presentes para hablar sobre cómo tratar con la sacerdotisa de los cerezos de aquí en adelante.

Yo, Akina, la alma errante de la ira, estoy tan furiosa que podría salir de está reunión y dirigirme rápidamente hacia la ubicación actual de la sacerdotisa.

Quiero asesinarla con mis propias manos. Lamentablemente, Hayato es el que tiene la última palabra.

- Bueno, para empezar, quiero decir que es un gusto verlos a todos, ha pasado un tiempo desde que nos reunimos así. Por favor, tomen asiento. - Dijo Hayato con una sonrisa.

En ese momento, asentimos con la cabeza a las palabras de Hayato y tomamos asiento.

- Antes de que entremos en el tema principal, quiero pedirte algo, Hayato. Todos los aquí presentes sabemos que hemos perdido a dos de nuestros compañeros, así que por favor, deja de actuar tan despreocupado al menos por está ocasión.

- Vaya, veo que no has cambiado en nada, Satoru, tal y como se esperaría de alguien que vivió durante la guerra.

- Huh, tú tampoco has cambiado nada, actúas de la misma manera de siempre. Estoy seguro que Hana y Satoshi habrían dicho lo mismo...

El ambiente quedó invadido por un profundo silencio después de que Satoru, la alma errante de la hambruna dijera esas palabras.

- ... ¿Qué haremos? Yo no quiero acabar como ellos. - Dijo Katsuya con un tono de voz suave.

- ¡¿Qué dices, Katsuya?! Tu aura es una de las más fuertes entre las almas errantes, no tienes nada de que preocuparte. Por otro lado, debo decir que envidio a la sacerdotisa de los cerezos.

- Oye, no puedo ignorar ese comentario que acabas de hacer, Yuzu. Sé que te conformas de envidia, pero, ¿cómo vas a envidiar a la sacerdotisa de los cerezos? - Le pregunté.

- Tú no lo entiendes, Akina, esa chica ha estado disfrutando su día a día mientras poco a poco está acabando con nosotros... Siento envidia de que este viviendo su vida tranquilamente como si nada. - Continuó.

- Cuando yo estuve viva no pude darme ese lujo, mi vida fue un infierno. - Dijo Yuzu con una mirada aguda.

- Te comprendo, Yuzu, aunque en mi caso, siento bastante desprecio hacia esa chica.

Tras una breve pausa, Himari continuó.

- Su existencia ha hecho que las almas comunes sean más complicadas de controlar, debido a eso, he perdido muchas ganancias durante estos últimos años.

- Nunca dejarás tu obsesión por el dinero, ¿eh? Nuestras vidas se acabaron hace tiempo, ¿qué importa el dinero ahora? Deberías dejar eso de lado, Himari.

- Es cierto que el dinero no nos sirve debido a que ya estamos muertos, pero para mí no se trata de funcionalidad, sino de poder. - Continuó.

- El dinero lo mueve todo, es un símbolo de poder innegable, no hay nada mejor que estar por encima de todos en ese aspecto y tener el control de todo tu entorno. - Expresó Himari con una sonrisa.

- La ambición y la sed de poder se apoderaron completamente de ti. Durante tu vida fuiste una millonaria que hacia lo que quisiera, a pesar de que perdiste la vida por tu avaricia, tu forma de pensar no cambio, sino que se intensificó. - Continuó.

Jardín De CerezosOnde histórias criam vida. Descubra agora