Jardín De Cerezos

||✿Capítulo 10: Confianza✿||

Bien, solo queda esperar aquí. Recibí un mensaje de Yumei-chan, parece que quiere hablar conmigo en persona para ver qué tal me fue con el objetivo que tenía planteado.

Hoy fue un día bastante productivo, logré lo que buscaba, interactúe con algunas de mis compañeras de clase.

Cuando les dirigí la palabra, ellas mostraron algo de asombro al notar que les estaba hablando. Sentí un poco de pánico en ese momento, pero me mantuve firme y seguí hablando.

Pensé que sería algo más complicado, que no me aceptarían tan fácil. Sin embargo, su reacción fue bastante amistosa, me invitaron a unirme a su conversación.

Y eso no es todo, cuando la siguiente clase estaba por empezar, me pidieron mi número de teléfono y me agregaron a un grupo de chat. El resultado fue un éxito rotundo, superé mis expectativas.

Lo que viví hoy era un sueño que tenía desde hace tiempo, ahora se convirtió en una realidad. No cabe duda de que esto es el resultado de todo mi esfuerzo.

Por otro lado, lo que experimenté hace una semana perfectamente podría haber sido un sueño. Aún no puedo creer que Yumei-chan sea un sacerdotisa con habilidades que parecen salidas directamente de un libro de fantasía.

Almas errantes y un Kami que le otorgó una misión. Los detalles me parecen una completa locura, pero lo ocurrido con ese chico habla por si solo.

Él fue el responsable de que todos en la preparatoria nos quedáramos dormidos, al parecer estaba alimentándose de nuestra tristeza, por eso Yumei-chan tuvo que detenerlo.

Pensando en retrospectiva, Yumei-chan se veía muy calmada ese día. A pesar del peligro que estaba enfrentado sola, no titubeó ni un segundo y siguió luchando.

Me parece increíble que se haya mentalizado hasta ese punto, es como si estuviera preparada para todo.

Solo es una chica que está cursando su primer año de preparatoria, ¿cómo es posible que tenga esa fortaleza mental?

Desde mi perspectiva, eso solo sería posible para alguien con bastante experiencia en la vida. Por eso me preguntó, ¿cómo habrá sido su infancia? ¿Qué experiencias habrá vivido para convertirse en la persona que es hoy en día?

Por más que le dé vueltas al asunto, simplemente no puedo llegar a una conclusión, solo ella sabe lo que ha vivido.

No soy del tipo de persona que se mete en lo que no le incumbe, así que no tengo intenciones de indagar al respecto. Si en algún momento desea hablar conmigo sobre ese tema, la escucharé con gusto, así de simple.

- Haruka-senpai, ya estoy aquí. Bueno, ¿nos ponemos en marcha? - Me preguntó Yumei-chan con una sonrisa en su rostro.

El peso en su espalda debe ser considerable, a pesar de eso, es capaz de mostrar una sonrisa como esa... es alguien increíble, esa opinión mía sobre ella no ha cambiado en lo absoluto.

- Sí. - Le respondí mientras la observaba fijamente a los ojos.

Ambas comenzamos a caminar a un paso constante y, tras unos segundos, salimos de las instalaciones de la preparatoria.

...

Veamos, llegó la hora de saber qué tal le fue a Haruka-senpai con el objetivo que le dí. Por la expresión que tiene en su rostro, puedo deducir que le fue bien.

Sin embargo, debo asegurarme de ello y escuchar los detalles. Una vez hecho eso, podré decirle cuál será el siguiente paso.

- Dime, ¿qué tal te fue con el objetivo de hoy? - Le pregunté.