Pago (Itasasunaru)

Capítulo 13

-Puedes verla? -Naruto levantó un puchero evaluando el jardín y la casa, no era enorme, ni pequeña, era perfecta, tenía bastante dinero ahorrado de su trabajo en la primavera, no gastaba en absolutamente nada, había entrenado y capacitado a la seguridad de la aldea, creando un pequeño ejercito para defensa de la primavera, asegurando una fuerte alianza entre ambas aldeas y por consiguiente la mejor tecnología del mundo para konoha -me agrada, veo un jardín con muchas flores, eso tiene el cincuenta por ciento hecho -Itachi sonrió -me costó bastante trabajo encontrar algo para ustedes, ya di el anticipo con el dinero que me enviaste, está cerca de la torre y del hospital por cualquier cosa, puedes observar los detalles, en lo personal me encanta el estilo clásico y lo veo aquí, elegí algo bastante respetable señor delicadeza y próximo hokage -una carcajada salió del teléfono.

Itachi sonrió al verlo -estoy seguro que nos encantará, te agradezco tu ayuda Ita, no quería llegar sin un hogar para mi hijo -el Uchiha sonrió ligero -tampoco los iba a dejar llegar sin un lugar para ustedes, vendí tu departamento y amueblé como me pediste, espero te guste mi estilo, es algo conservador aunque agregué bastante color si me preguntas -Naruto veía con emoción el lugar -me encanta, yo también lo hubiera arreglado así ttebayo -infló su mejilla, el azabache rió quedito -lo sé, debo irme, necesito salir a esa misión que te conté, de regreso pasaré por ti y Aiko-chan -el Uzumaki suspiró quedito, asintió con una suave sonrisa -te estaremos esperando -el corazón de Itachi latió con fuerza ante esa expresión en su rostro y sus palabras, abrió sus labios para responder, el rubio colgó, el Uchiha se quedó perdido observando el celular con atención, lo guardó lentamente analizando que había sido esa sensación, tragó pesado sintiendo su corazón relajarse, observó el lugar con cuidado, lo había arreglado pensando en cómo quisiera decorar su propia casa y cómo le hubiera gustado al rubio vivir, por un momento se imaginó a él leyendo un libro mientras Aiko y el rubio jugaban a su lado, su corazón nuevamente se aceleró, qué era lo que le sucedía?

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-Naru, en verdad voy a extrañarte bastardo, me enamoras y ahora me abandonas -el rubio sonrió con cariño -bastarda, también te enamoraste del chico de ayer, no mientas -koyuki rió con una risa escandalosa -demonios, ya no caes tan fácil -ambos rieron con diversión, la princesa abrazó al pequeño bebé con cariño -mi pequeño heredero, te roban de mi lado corazón -Aiko-chan rió quedito recibiendo los besos de su tía -tía Yuki son muchos -la princesa sonrió divertida -nunca suficientes para ti hermoso -la azabache vió al rubio y al pequeño con tristeza -los visitaré pronto, tu papi tendrá mucho trabajo de ahora en adelante, así que llamaré para ponernos al corriente, quieren no perderse por favor? -Naruto sonrió -gracias mamá Yuki, no nos perderemos -koyuki negó con fastidio abrazándolo con fuerza, susurró -te extrañaré cariño, piensa en lo que te dije el otro día, dale una oportunidad a tu corazón de ser feliz -Naruto se acostó suavemente en su hombro, eran casi de la estatura, el rubio era un poco más alto, cerró sus ojos con miedo y dolor por la despedida -te extrañaré demasiado yuki, tus consejos y regaños, te marcaré constantemente, no sé si estoy listo -Koyuki sonrió..  -en la noche no, es mi horario y lo estás Naru, estás listo, sino, siempre tienes a un caballero que gusta de tenderte la mano cada que surge un problema existencial en tu vida -apuntó con su mirada y sus cejas coquetas hacia la entrada -enserio Naru, si no lo abordas tú, lo haré yo, no podemos desperdiciarlo de esta manera -Naruto la empujó con el hombro -bastarda, deja de verlo -koyuki sonrió con diversión.

Itachi llegó a su lado con una suave sonrisa -Itachi por favor, te los encargo, no los dejes solos o destrozaran su casa -Naruto tenía una gota en la nuca, el Uchiha sonrió con diversión -bastarda, que sepas que dejé tu palacio y aldea como una fortaleza, me sé cuidar solito -Itachi sonrió quedito -los cuidaré, no se preocupe Koyuki-san -la chica sonrió, levantó sus manos y les dio un azote a ambos, Naruto volteó cabreado, Koyuki reía con diversión -hija de perra, te cortaré la mano a la siguiente -el rubio vió el enorme sonrojo en el Uchiha, apretó el ceño -nos largamos -empujó al Uchiha con velocidad fuera del lugar -si quieres te doy un balde para que sigas babeando -Itachi sacudió su mente desconcertado -babeando? -Naruto apretó su ceño aún más -por Koyuki, le gusta a todos los chicos, no soy la excepción Uchiha -el rubio se sonrojó aunque seguía molesto -¿no dijiste que no te gustaba? -el Uzumaki lo vió con duda por el tono a reclamo -gustar?, a todos les gusta, pero no la amo de esa manera -el mayor lo observó con cuidado -¿Estás seguro?, aún puedes regresar, se veían bastante felices juntos -Naruto levantó un ceja con curiosidad -estoy seguro, estoy aquí contigo porque tomé la decisión de regresar a konoha, si en verdad la amara no hubiera salido de ese lugar, le hubiera espantado a todos esos fanáticos que la persiguen -rió con diversión, Itachi lo escuchó con cuidado, estaba con él, sonrió para el rubio, Naruto se sonrojó quedito al verlo -Papá Tachi, ¿cuánto falta? -Itachi sonrió con cariño -mañana por la tarde estaremos en konoha pequeño -Naruto los observó algo perdido, giró su mirada al frente pensando en lo que le esperaba mañana, mordió su labio inferior un poco comenzando a dudar de su camino.

Por la noche llegaron a un hotel donde compartieron habitación doble, Itachi los veía con atención, la luz de la luna entraba por la ventana, ambos ojiazules respiraban tranquilamente mientras dormían, sus onix revisaban cada detalle de ambos, su mirada reparó en las facciones del mayor adquiriendo un ligero sonrojo, no pudo evitar verlo con otros ojos, con esa vista comenzó a dormir contento teniendo a ambos a su lado..