Capítulo 29

4 2 0
                                    

Ayla

- ¿Ya quieres irte? –me preguntó Chris a mi espalda espantándome por lo que di un brinco, no quería volver a encontrarme con Alexa.

-Como quieras –le respondí viendo que estaba completamente ebrio, sus amigos estaban haciéndose los tontos a su espalda, para estar en la Universidad seguían siendo bastante tontos.

- ¿Cómo te la estás pasando? –me preguntó Chris un poco mareado, su aliento de alcohol penetraba mis fosas nasales haciendo que hiciera una mueca de desagrado por ello.

-Creo que es momento de que no vayamos –le contesté un poco molesta porque nunca podría encajar en ningún lugar que fuera justo como este, ninguno de sus amigos de Chris me había dicho nada, ni siquiera un saludo, pero sus miradas juzgaban demasiado a pesar de que en realidad no estaba haciendo nada malo.

Cuando tienes una mala reputación es muy difícil que las personas cambien de opinión acerca de tu persona, especialmente cuando no haces más que reforzar lo que dicen de ti, todo lo que he hecho es cometer errores para tratar de aliviar la pena que no me deja vivir.

-Chris, quédate otro rato –apareció Dante a su lado mientras lo tomaba del hombro para sostenerse él mismo.

-Ya me voy amigo –le contestó Chris mientras trataba de mantener el equilibrio, esto era demasiado vergonzoso, no era el Chris que yo conocía, pero la realidad es que ni siquiera lo conocía.

-Quédate, hace mucho que no sales con nosotros por culpa de ella –le dijo Dante poniéndose frente a mí para que Chris no pudiera verme, esta situación no me agradaba en lo absoluto, presentía que algo malo pasaría si no nos íbamos de la fiesta.

Comencé a hiperventilar ahí de pie sintiendo las miradas de todos a mi alrededor, otra vez no podía pasar por lo mismo.

-Chris... –dije en un pequeño susurro mientras me hacía a un lado para que pudiera verme, mis ojos estaban cristalizados y mi garganta estaba seca.

-Otro rato no hace daño –dijo Chris cuando otro de sus amigos le pasó otra copa.

-Así se dice –le respondió Dante mientras lo llevaba a la sala para que se sentara, Chris ya no pensaba claramente por el alcohol.

-No puede ser –dije en voz baja, mi mano derecha sostenía aun las llaves de la camioneta de Chris, sabía que no era buena idea venir a esta fiesta, pero lo hice para buscar a Jeff que no se encontraba aquí.

Comencé a caminar en dirección a la salida cuando una mano fuerte me detuvo en seco haciendo que perdiera el equilibrio.

Dante me empujó haciendo que mi cuerpo se estrellara con la pared, la puerta estaba a solo unos cuantos metros y desde aquí se veía como la salida se iba desvaneciendo.

Presionó su cuerpo con el mío mientras acercaba su rostro a mi oído.

-Ahorita que Chris no está en sus cinco sentidos, tú y yo nos vamos a divertir bastante –me susurró Dante al oído, no podía moverme porque su cuerpo me pegaba a la pared y sus manos tenían mis muñecas presionadas, ya no sentía mis manos.

-Por favor, déjame –fue lo único que pude decir, lágrimas estaban comenzando a bajar por mis mejillas, solo quería desaparecer porque sabía lo que me esperaba, él estaba tomado y no sé qué otras tantas cosas.

-Ayla, Ayla, Ayla, no sabes cuánto he esperado para este momento, por fin comprobaré que tan buena eres en la cama ya que Christopher no quiere decirme nada. No te pongas así, la mayoría de la escuela ya ha tenido algo contigo, uno más no será la gran cosa –me dijo Dante mientras acercaba su rostro al mío para besarme.

Miedo de estar soloDonde viven las historias. Descúbrelo ahora