Alicia cree que hay pocas cosas que le salen bien: causar problemas e huir de ellos son algunas de esas cosas. Así es como termina en un pequeño pueblo de España, lejos del caos del mundo y de la gente que solía conocer.
Jacob es un actor de Hollyw...
-Lo siento pero... ¿De verdad crees que no lo sabia?-
Jacob me mira con una sonrisa ingenua.
-Entonces ¿por qué no dijiste nada?-
-¿Por qué diría algo Jay? Me da lo mismo, no es de importancia para mi- Le sonrió de costado.
Jacob y yo estamos tumbados en el sofá de mi sala, mirando videos de youtube. Nuestros brazos se rozan cada vez que nos reímos, pero no me molesta.
Creo que lo ultimo que dije fue algo tranquilizador para Jacob, simplemente me devolvió la sonrisa y me dio un empujoncito con su hombro.
——
-Jay, ¿Quieres que haga algo de cenar?- Grité desde la cocina mientras tomaba agua.
-¿Que te parece si mejor pedimos algo?-
-Mhm, como tu prefieras- Digo sentándome a su lado otra vez.
-Perfecto, ¿Que quieres?- Cuando me mira con esos ojos siento que me derrito, pero no puedo decir nada, no aun, no deseo espantarlo ni nada por el estilo.
-Me gustaría algo grasoso-.
-También me encantaría Ali-.
——
Terminamos de comer nuestras hamburguesas a la par del video que mirábamos.
-Ali, ¿no te molesta si me quedo a dormir?- Preguntó mas bien hablando para adentro.
Sonreí con ternura -Claro que no Jacob, ¿como sería molestia eso? ¡Podríamos hacernos mascarillas! Las traeré-
Y sin esperar respuesta corrí a buscar todo para una sesión de masajes profesional, o algo así...
-¿Jay estas listo?- Grité desde el pasillo dirigiéndome hacia él.
-Si, Ali, hazme tuyo- Reímos.
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-Estas quedando im-pe-ca-ble - Mencioné entrecortando las sílabas.
-Confío en ti- Dice mientras me sonríe.
Cuando Jacob abre los ojos y me ve a centímetros de distancia, siento que me perfora con la mirada, no deja de verme ni por un segundo. Me pongo nerviosa y trato de alejarme pero tropiezo con su pierna y me acerco mas.
Jacob agarra mi cara y me atrae hacia la suya, juntando nuestros labios, tardo en reaccionar y Jacob para:
-¿Quieres que pare?- Niego con la cabeza.
Sigue. Sigue besándome. Lento. Sabe lo que hace, conoce cada movimiento con exactitud. Yo solo lo sigo, sigo la sinfonía que el empezó a tocar. Era perfecto. Sin dudas él es perfecto, sus labios son perfectos igual que sus besos.
Jacob se para sin dejar de besarme y me sujeta rodeándome todo el torso con sus grandes manos. Me alza y nos lleva a la cama, se pone encima de mi.
De repente empieza a sonar un celular. No nos detenemos. Pero no deja de sonar. Paro a Jacob y le digo que atienda, luego seguiríamos.
Cuando responde la llamada se pone raro, como si le hubiesen dicho algo malo. Cuelga.
-¿Que sucede?-.
-Es mi manager, me dijo que hay un nuevo proyecto y les gustaría que me presentara- Está sentado en los pies de la cama.
-¿Que tiene eso de malo Jay?- Se da la vuelta y se acerca hacia mi.
-Luego hablamos, ahora solo quiero estar contigo, de esta manera o de cualquier otra, pero contigo, Ali-
Lo abrazo por la cabeza y se apoya en mi pecho, así nos quedamos dormidos.
