Ay, qué rico huele Ese culito es mío, ya yo tengo los papele'.
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a licha martinez shot !! ☆☆☆
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23 de Mayo, 2023. Manchester, Reino Unido.
Chelsea contra Manchester United. Me detuve a un costado de los demás fotógrafos, con la mirada fija en mi hermano antes de comenzar a capturar su imagen a través de mi celular y mi cámara profesional, intercalando las tomas entre ellas. Enzo había aprovechado de mi presencia en Londres para pedirme que le ayudara con las fotos que subiría a su Instagram después del partido, y nada mejor si se lo pedía a su hermana fotógrafa deportiva.
Trabajaba para River gracias a los contactos de Enzo, comencé a trabajar para las inferiores en el momento en que terminé mi carrera de Marketing y luego me llamaron de primera, lo cual me abrió las puertas para trabajar en ciertas ocasiones para la selección. Donde no solo gané experiencia en mi ambiente laboral, sino que conocí a una de mis mayores debilidades en el campo de juego. Lisandro Martinez. Como para no dejarse llevar por ese hombre. Me había lanzado miraditas durante el último entrenamiento que habían tenido antes de viajar a Qatar, me había invitado a salir y hasta rogó por mi número, pero no pensaba dejarme de un hombre con novia. Al menos hasta que llegaron los festejos en Buenos Aires y el alcohol en mi sistema logró que haya actuado de manera inconsciente. Un pequeño desliz que podía sucederle a cualquiera que tuviera a Lisandro entregado a hacerse cualquier cosa.
Ni yo lo iba a desperdiciar así.
Afortunadamente no se encontraba jugando de titular, por lo que aún no lo había visto en el juego y mucho menos había cruzado mirada con él desde que entré al estadio. Habíamos quedado raros después de lo sucedido, sobre todo yo que había roto mi condición de no meterme en relaciones ajenas, por lo que ignorarlo había sido mi decisión y eso era lo que había llevado a cabo desde esa vez, ignorándolo cada vez que lo tenía cerca y hasta bloqueándolo de las redes sociales donde lo tenía, que afortunadamente, era solo Instagram. Y por más de que llevaba unos pocos meses separado de su mujer, no pensaba desbloquearlo.
Tomé mi cámara profesional y la apunté al campo de juego, disparando al ver a mi hermano con la pelota y a un par de jugadores que veía con la misma, sonriendo al ver a Enzo hacerme señas de cuidado cuando los suplentes del United comenzaron a calentar en nuestra zona. Al menos hasta que mi vista interrumpida por un rubio observando fija y seriamente a la cámara, haciéndome sobresaltar ante la cercanía a la que se encontraba de la cámara. Licha bajó la mirada y haciéndose el desconocido la subió, sin poder evitar dejar salir una sonrisa al ver como me había asustado.
