Sobre el velo de la mafia

Capítulo 20

Jungkook y yo examinamos el motel y el área circundante, y luego nos sentamos en el auto y esperamos a que las cosas se calmen. Mis pensamientos están inundados de lo que pasó entre Jimin y yo. Mientras estábamos en la isla, no tuve que preocuparme por perderlo, estaba relajado.

Pero ahora las cosas han cambiado. Al estar de vuelta en el trabajo, es imposible contenerme, y soy demasiado posesivo con él. Ahora que todo está a la vista entre Jimin y yo, no me arrepiento.

"Él es mío."

Lo sé con certeza ahora.

"Y a él le encanta."

Es hora de que Jimin vea quién soy realmente y no la versión diluida que conoció en la isla. Y tengo la sensación de que lo volverá loco.

―¿En qué estás pensando?― Jungkook pregunta mientras ve el motel a través de un par de binoculares de visión nocturna.

―Le dije a Jimin que me pertenecía ―admito, finalmente listo para hablar de eso ahora que he ordenado mis propias emociones.

Deja escapar una risa.

―¿Cómo se lo tomó?

―Está haciendo todo lo posible para resistirse ―digo, y mi boca se levanta en una sonrisa.

―¿Por qué el cambio? Esta mañana querías arrancarme la cabeza por mencionarlo ―pregunta, mirándome.

Lo veo a los ojos.

―No tuve que preocuparme en la isla, fue como una burbuja de seguridad donde realmente pude relajarme. Aquí afuera, ambos sabemos que es un juego feroz, es hora de que vuelva al modo de trabajo.

Jungkook coloca una mano en mi hombro.

―Mierda, gracias. Por un tiempo, me preocupaba que estuvieras tan jodidamente dominado que nunca volvieras a funcionar con normalidad.

Suelto una carcajada.

―Vete a la mierda. ―Miro alrededor del área y, al ver que está en silencio, digo―:Terminemos con esto.

Ambos revisamos nuestras Heckler & Kochs y enroscamos los silenciadores, luego abrimos las puertas, salimos y caigo al lado de Jungkook. Mis ojos siguen escaneando nuestro entorno, y cuando llegamos a la habitación donde está Tao, pateo la puerta y, sosteniendo mis brazos en una posición cerrada frente a mí, entro en la habitación. Tao se lanza hacia un lado mientras nos dispara. Evito su línea de fuego, y luego Jungkook le dispara, golpeándolo en la pierna.

Hay un hilo de emoción en mi pecho por haber vuelto al trabajo.

―Mierda ―Tao grita mientras cojea hacia el baño.

―Amigo, vamos ―grita Jungkook―. No nos hagas correr detrás de ti.

―Rechazaste el contrato ―dice Tao.

―Sí, y deberías haber comprobado que el omega es inocente ―dice Jungkook mientras voy tras Tao, pateo la puerta del baño y luego disparo dos tiros, ambos le dan en el pecho.

―Sin resentimientos ―grita Jungkook, su tono está lleno de diversión.

Me acerco a Tao, donde está jadeando por aire, y luego le planto una bala en la cabeza.

―Está hecho ―le dejo saber a Jungkook mientras veo el cuerpo con gran satisfacción.

"Una amenaza menos para mi omega."

Jungkook viene a tomar una foto de Tao y luego me sonríe.

―Un regalo para Yuri.

―Salgamos de aquí.