𝐋𝐚𝐛𝐲𝐫𝐢𝐧𝐭𝐡 - 𝐌𝐚𝐭𝐢𝐚𝐬 𝐑𝐞𝐜𝐚𝐥𝐭

QUINCE

"Estoy riendo con mi amado haciendo fortalezas bajo las sábanas, confío en él como un hermano. Sabes que hice algo bien. Ojos estrellados iluminan mis noches más oscuras"

Call it what you want - Reputation (Taylor Swift)

Conducir no era su fuerte, de hecho había tardado un año en sacar su licencia de conducir y había desaprobado tres veces el examen. Roberto solía molestarla diciendo que le habían dado la licencia por pena, y ella también lo creía porque aún después de dos años todavía no podía estacionar.

Pero ahí estaba, eran las cinco de la mañana y había pedido el auto a su mamá para ir a la playa junto a Matias, quien observaba en silencio como la chica parecía meditar con los ojos cerrados mientras el motor del vehículo estaba apagado.

- Si no le das arranque no salimos, pero sin presión eh. - se animó a decir finalmente cuando pasaron más de veinte minutos y ella seguía tensa sosteniendo el volante. -

- No, si lo se, chistoso. - respondió ella soltando el aire que guardaba. - Es que no sabía que mi mamá había estacionado entre dos autos. -

Tenía espacio de sobra para hacer más de tres maniobras y salir del lugar sin problema, claro, eso era obvio para alguien que si sabía estacionar y sacar el auto del estacionamiento pero Greta no lo sabia y el temor en su interior de chocar no le ayudaba mucho.

- ¿Queres que maneje yo? - quitó el cinturón de seguridad después de que ella hiciera lo mismo. -

No hizo falta que lo preguntara dos veces porque cuando quiso darse cuenta Greta estaba del lado del copiloto cebando mates y guiando al chico con el gps del celular mientras el manejaba escuchando a la chica hablar sobre Taylor Swift.

- Encima, ¿sabes qué es lo que me da bronca? ¡Ella estaba ganando un premio cuando él subió al escenario! - toma un largo sorbo del mate antes de volver a hablar. - Y el otro boludo tiene el tupé de decir que la hizo famosa, no, que chistoso que es. - suelta un suspiro y niega. - En la próxima salida tenes que girar a tu izquierda. -

Matias podía escucharla hablar de aquella artista por horas, le gustaba el tono de su voz y le gustaba como sus emociones se desbordaban sin vergüenza alguna cuando estaba con alguien de confianza. Era alguien muy extrovertida cuando estaba con gente conocida, pero demasiado introvertida cuando no veía rostros conocidos o no había tanta confianza en el vínculo. También le gustaba cuando se ponía a hablar de los libros que quería leer, de los que había leído y sobre las películas a las cuales siempre volvía.

Frenaron en una estación de servicio después de una hora y media de viaje, mientras cargaban el tanque se metieron al negocio de la estación con la idea principal de comprar algo para el desayuno, pero los ojos de bambi de Greta ocasionaron que terminarán comprando gomitas ácidas, galletas y doritos junto a un energizante.