23 Desiciones

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Llego la noche Katsuki me dijo que no lo aceptará hasta conocer a la dichosa persona.

Había de dos o las consecuencias serían fatales o muy buenas.

La noche la pase en la sala planeando una cafetería a mi gusto, haciendo menús, me ilusione mucho la verdad, Hellen se quedo en la habitación escuchando música.

Como a las 11 del anoche escuche una ambulancia y me sentí muy abrumada pero no le di importancia yo seguí trabajando, además me dio mucha inspiración y comencé un cuadro.

No tenía nada planeado pero deje que la pintura me guiara.

Como a las 3 de la mañana tome un descanso para hacer un capuchino ya qué el clima estaba intenso, cuando lo termine, mire el cuadro y vi que ya casi estaba terminado.

Decidí dormir así que me dispuse a hacerlo.

***

Cuando desperté recibí un mensaje de Dylan diciéndome que pasaría por mi para ir a la Universidad.

Tenia cinco minutos para estar lista así que me puse mi ropa, lave mi cara e hice mi rutina para el cuidado de mi piel lo más rápido que puede, agarre lo que estuviera enfrente de mi para almorzar en el camino y salí corriendo.

Dylan estaba esperándome, así que nos pusimos a caminar, el campus estaba muy cerca así que era mejor caminar qué hacer tráfico y llegar tarde.

— Ya pensaste que vas a hacer con lo de la cafeteria.

— Si, voy a esperar a que esta persona de la cara.

Me detengo en seco la tienda de Jonh esta cerrada.

—Qué raro siempre está abierta —hago una seña a Dylan para que lo note.

— Si de hecho, esos no son compañeros tuyos, están afuera esperando.

Mierda.

Los materiales.

Mi cara de espanto alerta a Dylan.

— ¿Qué sucede? — se detiene en seco.

— Se me olvidaron unos materiales.

Saco rápidamente mi celular para marcarle a Amelia ella siempre lleva de más.

— Pero ahorita lo resuelvo — me pongo el teléfono en el oído, — Ame traes de pura casualidad más acetato.

— Claro, nesesitas.

— Si — Digo sinceramente — Me podrías dar, vender o regalar.

— No — me tenso — Jaja, es broma por supuesto.

Cuelgo y Dylan me mira expectante.

— Asunto arreglado — le comento.

Dylan me abraza.

— Oye te quería invitar a la presentación del sábado.

Me sorprende que me invite por lo regular nunca me cuenta nada de su vida.

—Claro a que hora.

Me da la hora y pronto llegamos al campus.

—Aun no me puedo creer que estemos juntos —sus pupilas están dilatadas y me mira directamente a los ojos, haciendo que me ponga nerviosa.

—Ni yo —respondo.

Estábamos cara a cara y yo poco apoco fui acercandolo a mí, su nariz choco con la mía así que decidí girar mi rostro y besarlo.

Tome sus labios lento y luego el me tomo de la cintura para acercarme más a él, mi corazón latía muy rápido quería seguir, pero el paro.

—Rexi se nos hará tarde— cerré mis ojos frustrada, era cierto.

Asentí y le di un último beso antes de echarme a correr por que en efecto se me hacia tarde quedaba un minuto.

Llegue justo con el profesor James.

— Llega tarde señorita — me dice.

Yo me adelanto y entro primero.

— Pues al parecer llego más tarde usted.

Y con eso me voy a mi asiento.

Miro a Amelia y ella muy disimuladamente me pasa el material.

***

Cuando termino la clase salimos a dar la vuelta hasta que la maestra Pech llegará.

—Rexi, supiste lo que le pasó a Jonh.

Mi cara de que chingalos me estas diciendo lo dijo todo.

—Por tu cara me imagino que no, ayer estaba comprando, sabes lo normal y un chico le había pedido unos materiales, había tardado mucho y cuando checa os en el almacén estaba recargado en la encimera tosiendo mucho, vi que le costaba respirar y lo único en lo que pensé fue en llamar una ambulancia, tardó una eternidad imaginate yo llame a las 10 y llego pasadas las 11.

A hora se a que se debía la ambulancia.

— No me dejaron ir con el porque no era familiar, así que solo cerré la tienda ye fui.

Cuando termino un nudo se instaló en mi estómago.

***

Por donde empiezo...

Tuve el impulso de ir al hospital y fingir que era la hija de Jonh, em... Sí.

Lo peor es que se lo creyeron o mejor dicho nadie había ido a verlo, dijeron que se intentaron contactar con todos sus contacto pero fue inútil.

Cuando llegue a su habitación lo supe sin siquiera saberlo.

Jonh ya no estaba aquí.

El shock llego y me adentre.

Pero cuando llegue más cerca me di cuenta que si respiraba y que la persona que no lo hacía era la que estaba a su lado.

El alivio llegó pero aun así no sabía que hacer.

Me senté en la silla qué estaba frente a su cama.

Y espere.

Me puse a platicarle algo extraño que me paso tal y como lo hacía cada día.

Esperaba ver su sonrisa o sus ojitos achicandose.

Pero no pasó.

Cuando dieron las 7 de la tarde decidí ir a comer y ver a Hellen.

***

Cuando llegue al apartamento el gatito me recibió.

En unos días será mi cumpleaños.

Y el gatito cumple un mes aquí.

Le preparo un pescado y como junto a él.

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⏰ Última actualización: Apr 18 ⏰

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