THE DESTINY

Capitulo treinta y uno

Louis y yo no habíamos hablado de lo que paso anoche, no sabía que decirle y tampoco quería causar un problema entre nosotros si es que esto le molestaba.

Ambos nos habíamos ido a dormir y en la mañana hizo como si nada había pasado, no sabía si estaba listo para esto, no quiero abrumarlo porque se que el no es el padre de las mellizas y tal vez eso no es lo que quiere.

-¿Que quieres de desayunar Lou?- pregunto entrando a la cocina, el estaba tomando un gran vaso de agua.

-No quiero algo en especial cariño, puedo ayudarte a hacer el desayuno para las niñas- dijo dejando el vaso en la barra.

No se si soy yo pero siento que el ambiente esta tenso pero tal vez soy yo viendo cosas donde no las hay.

Comencé a sacar los el tocino del refrigerador para después encender la estufa, haré unos huevos con tocino porque es el favorito de las niñas.

-Esta bien,¿Quieres huevos con tocino? Eso es lo que voy a cocinar para ellas- dije colocando el sarten en el fuego.

-Claro- dijo, no pude ver más porque me concentre en cocinar.

De repente siento como pasa sus brazos por mi cintura mientras me abraza por atrás.

-Se que tal vez estas un poco preocupado e incomodo por lo que Grace dijo ayer mientras dormia- dijo en mi oído- No te preocupes cariño, me gusta que me llame así, se que tal vez lo hizo mientras dormía pero si lo dice en cualquier momento me sentiré muy feliz de ser su papá si es que ellas así lo quieren.

-¿No sientes que es muy rapido- dije observándolo de por el rabillo de mi ojo.

-Nada contigo y con las niñas es demasiado rápido Harry, estoy listo para lo que sea que venga entre nosotros, desde que te conocí supe que las niñas venían incluidas y me encanto- beso mi mejilla mientras yo me concentro en los huevos que estoy cocinando.

Beso mis mejillas-No tienes porque estar tenso si es que las niñas quieren llamarme papi, quiero que entiendas que yo también quiero eso.

-¿Estas seguro? No quiero que te arrepientas después y terminan es dañando los sentimientos de mis hijas- no quiero verlo a los ojos.

-Jamás me voy a arrepentir de estar contigo, mucho menos voy a dejarte voluntariamente porque eres mi omega, nada me hará dejarte y nada me hará arrepentirme porque esto es lo que quiero contigo- volvió a besar mi mejilla haciendo que mis mejillas se sonrojen-Ahora te dejare cocinar pero seguiremos hablando de esto.

Sigo cocinando hasta que tengo las porciones para los cuatro, sigo nervioso porque nunca imagine que esto pasaría aún cuando inicie a salir con Louis, no se como expresarlo y no quiero ser grosera con el.

Lleve con cuidado los platos al comedor, las niñas ya están despiertas y tienen el cabello regado por todas partes.

-Grace cariño anoche olvidaste quitar las ligas de tu cabello-viendo la liga en su cabello, incluso yo lo olvidé.

-Te dije que no te hagas colas de caballo cuando veamos películas porque siempre se te olvida- la reprende Cheryl, la pequeña odia las marcas en su cabello así que prefiere tenerlo suelto, solo lo sujeta cuando tiene calor y suda.

Grace es desalineada y Cheryl siempre tiene que estar bien vestida, así de diferentes son.

-¿Eso que? Yo no me quejo de eso y mi cabellito esta bien- dijo volteando su cara para otro lugar haciendo que su cabello se moviera al otro lado.

-No tiene nada de malo que se duerma así cariño, tu puedes dormir como tu quieras tambien- dijo Louis interrumpiendo la conversación.

-¿Vez? El es doctor de niñas y sabe que estoy bien- dijo tomando el tocino de su plato.

-No es justo que tengas a papi de tu lado- dijo observandome- ¿verdad que es malo mami?

Voltee a ver a Louis y su sonrisa podía iluminar todo el lugar.

-Bueno aveces puede doler la cabeza pero no te molestes por eso ¿Okay? - acaricié su cabello.

-Lo siento Grace- dijo con su mirada en su plato.

-Esta bien, no es nada malo- se encogió de hombros y siguió comiendo- Papi ¿puedes cervirme un poco de jugo por favor?

Esto está empezando de la nada y no se como disimular que me sorprende que ambas lo hayan llamado papi porque es algo que inició literalmente de un día para otro.

Lucen tranquilas con llamarlo así como si no fuera algo nuevo para ellas así que deje de tensarme por esto.

Se que lo llamen así es algo grande porque ni siquiera hemos iniciado un cortejo, esto me muestra que lo nuestro está yendo muy bien pero sigo teniendo un picó de miedo en mi interior.