Capítulo 14

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Eduardo

-Si las miradas matasen el pobre Jude estaría  muerto- niego con la cabeza ante las palabras del brasileño, no debería haber venido, verla bailando con otro me esta matando y más si ese otro es mi amigo. Nunca me he comportado como un chico celoso pero esta situación esta pudiendo conmigo.

-Es todo culpa tuya- le recrimino, fue su idea traerme aqui y hacerme pasar este mal rato.

- No me responasabilices de tu incapacidad para ligar.- dice haciéndome enfadar aun más-

-Yo sé ligar perfectamente- me defiendo, iniciando una estupida discusión de tíos.

-Pues ya lo veo ya- dice retándomela aun más- ¿Ves a la chica rubia de allí?- señala con su cabeza detrás de mi haciendo que me gire - no ha dejado de mirarte en toda la noche, te hubieses dado cuenta si no hubieses estado perdiendo el tiempo en Sheila. - y tiene razón mis ojos impactan sobre aquella chica provocando una sonrisa en ella -Ve y vuelve a subirte la autoestima.

Y por algún motivo estupido decido hacerle caso

Sheila
Jude camina cerca de mí mirado al frente apenas hemos hablado en toda la noche.

-¿Lo estás pasando bien?- me pregunta sentándose en un pequeño muro cerca de la discoteca.

- Claro - respondo alegre porque sí que lo estoy pasando bien a pesar de las constantes miradas de Edu, para comportarse así podría haberse quedado en casa.

-Ya...- no le noto muy convencido por mi respuesta.

-¿Por?

-He visto como os miráis.

-No hay nada entre Edu y yo - aclaró rápidamente.

-Que no quieras que exista no quiere decir que no lo haya Sheila, has sabido a queen me refería en a penas segundos- moja sus labios incómodo antes de seguir hablando- Edu es mi amigo no quiero meterme en esto, se nota que le gustas mucho.

-Bueno no sé yo - miró hacia otro lado y una sonrisa tonta escapa de mis labios ante la idea de poder gustarle, porque es innegable que algo sucede entre ambos.

-Créeme - le miró - le gustas y mucho.

-Siento mucho haberte hecho perder el tiempo - confieso dándole la razón.

-No tienes nada que sentir la fiesta ha estado bien, y hablar contigo es divertido, así que no te preocupes.

-Eres genial Jude.

-Si... aunque haber estado recibiendo sus miradas asesinas duraste toda la noche ha sido intenso.

-¿Qué?

-¿Vamos no lo has notado? Cuando no te miraba a ti me miraba a mí con ganas de arrancarme la cabeza. - lo dice de manera divertida aunque a mí no me sienta especialmente bien, le dejé claro que solo quería que fuéramos amigos, no puede comportarse como un energúmeno celoso. -¿Volvemos?

- Si vamos- caminamos hasta entrar a la discoteca y lo primero que puedo ver es a Edu sujetando la cintura de una chica segundos después los labios de ambos se unen provocando que algo en mi interior se resquebraje.

Juego del destino - (Eduardo Camavinga)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora