La velocidad de la exitación.

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Su vida fue decidida por alguien más,nunca hizo nada que no llevara antes la autorización de Oleg Románov.

Su padre.

Cada entrenamiento,clase ó ejercicio era con el fin de convertirle en un digno sucesor de la mafia rusa,lo obligaron a manejar su temperamento y convertirlo en un líder sabio,capaz de controlar sus emociones y no dejarse guiar por sentimentalismo barato.

Oleg Románov fallo en la ecuación,no hizo a Jungkook alguien capaz de controlar sus emociones,lo hizo alguien inherente a ellas.

Un monstruo despiadado que dirigía la Bratva,teniendo así el mandato más sangriento que hallan tenido jamás.

Jungkook era incapaz de sorprenderse, era demasiado calculador como para permitírselo.

Pero siempre había una primera vez.

Nunca pensó que sería esta.

Su cabello era una maraña que cubría su rostro,incluso se había aflojado el nudo de la corbata por el nerviosismo que el hombre a su lado le provocaba.

¿Conocen la fórmula uno?

El maldito provocador era uno de ellos, estaba cien por ciento seguro.

Cuándo minutos atrás se burlo por su forma tan lenta de conducir no previó que le dañaría el ego,y sacaría una pequeña parte del pecado que tenía incrustado,mismo que los llevaría a aquella posición.

Su padre seguramente se retorceria en su tumba si presenciara dicha imagen.

Jungkook sentía que sus uñas no estaban demasiado incrustadas en el tablero,su instinto le decía que moriría ese día de un maldito accidente automovilístico.

Era incapaz de girar su rostro completamente y mirar a su desquiciado piloto.

Pero sabía que tenía una sonrisa en sus rostro,las malditas palabras de burla lo confirmaban.

—¿Le apetece más velocidad?,Señor Jeon,No quiero que mi lentitud nos retrace.—Se burlaba Taehyung.

Jungkook contuvo el gruñido que tenia en la punta de la lengua.

—¡PON TU VISTA AL FRENTE,JODER!

Taehyung lo estaba disfrutando de sobremanera,muy pocas veces tenias la oportunidad de derribar las defensas de un maldito presuntuoso como su nuevo jefe.

Pero la cara más pálida de lo normal de Jungkook le hicieron contemplar la idea de haber llegado ya demasiado lejos con aquella demostración,el remordimiento llegó a él...

¿Se detuvo?

Por supuesto que no,llegaría al limite.

—¡¿Justo así?,Señor Jeon!.—Llamó Taehyung llevando sus manos hacia arriba soltando el volante y pisando el acelerador,el aire desordenado sus rizos y el viento pegando directo a su rostro.

Jungkook miraba de reojo aquella escena,su corazón estaba apunto de sufrir un maldito ataque,

—¡VAMOS SEÑOR JEON,SUBA LAS MANOS Y DISFRUTE CONMIGO!—Gritó Taehyung con dificultad por el viento complicando su habla.

—¡Para ya!—Refunfuñaba Jeon.

—¡No pararé hasta que disfrute conmigo,yo le protegeré!

Jungkook pudo haberse reído si no estuviera concentrado en no morir en el intento.

El era un maldito mafioso,su altura era intimidante y sus músculos asustaban a cualquiera.

¿De qué lo protegería exactamente el arrogante a su lado?

War Of Hearts-KookvDonde viven las historias. Descúbrelo ahora