𝐓𝐡𝐚𝐭 𝐁𝐨𝐲 ❀ [Minsung]

03 🍜

Jisung nunca imagino que fuera tan doloroso, incluso la vez que su pequeño hermano Jeongin había necesitado suturas después de haber tenido una fuerte caída sobre unas grandes piedras en la playa, lloro o se quejo tanto como el.

— Cuanto falta!? A este paso creo que moriré de dolor! — Dijo llorando desesperado.

— Tranquilo Ji, ya esta haciendo la última sutura. — Mencionó su padre acercándose un poco.

Minutos después,cuando el doctor Lee ya se encontraba vendando a Jisung, este ya estaba un poco más tranquilo por lo que el silencio hizo notar una pequeña risita que venía desde la puerta.
Jisung levanto la mirada tallándose los ojos para liberarse de los restos de lagrimas que tenía, encontrándose con un joven alto de cabellos naranjas que muy probablemente era de su edad, riéndose, seguramente de el.
Su cara de dolor cambió rápidamente a una de enojo y vergüenza, pensando en por que un chico tan guapo había estado viéndolo desde quien sabe cuando, y ademas riéndose!

— ¡¿Quién eres tu y por que te estás riendo?! — Dijo el peliazul con una ceja enarcada; pero a quien engañaba, nadie en esa habitación lo tomaría en serio después de haber llorado y gritado tanto.

— Lee Minho, ¿qué estás haciendo aquí?, que te eh dicho sobre venir a verme cuando tengo pacientes. — Dijo firme el doctor Lee.

— Ah... es verdad, eh venido a dejarles a ti y a mamá su almuerzo que olvidaron en casa. — Dijo mientras entraba a la habitación y quitaba pequeñas lagrimas que tenia de tanto reír.

A este que le pasa, como se le ocurre estar espiando, y se ríe en mi cara como si nada. Pensó indignado el peliazul.

— Está bien, déjalo en mi escritorio. — Dijo el doctor Lee, mientras regresaba en lo que estaba. — Ya esta Jisung. Tienes que cambiar la venda y limpiar la herida diario por diez dias. También ponte esta pomada que te ayudara a cicatrizarla, tomate estas pastillas para el dolor y estas otras para evitar alguna infección. — Dijo mientras extendía su mano para darle los medicamentos. — Cuando pasen los días que te indique, vienes conmigo para retirar los puntos. Eso seria todo.—

— ¿E-entonces t-tendré que limpiar l-la herida yo s-solo? — Pregunto preocupado.

— Así es — Respondió el doctor Lee haciendo una afirmación con su cabeza.

— No creo poder hacer eso, me pongo muy nervioso cuando veo heridas o sangre y lo mas probable es que yo... — Hizo una pausa pues el pelinaranja seguía en la habitación y le daba vergüenza tener que decir aquello frente a el. — Lo mas probable es que yo... me desmaye... — Dijo en voz baja cuando vio que aquel chico ya estaba saliendo.

— ¿Y no hay alguien que te pueda ayudar? Es un trabajo sencillo. — Le respondió.

Mi padre trabaja todo el día, y no quiero molestarlo mas con todo esto. Mis amigos son unos brutos, podrían empeorarme la herida o arrancarme la pierna. Dijo en su mente preocupado.

— Creo que no hay nadie que pueda hacerlo... — Le respondió.

— !Lee Minho! Ya se que todavía estas ahí escuchando — Dijo de repente el doctor Lee en voz alta para que su hijo lo escuchara.

El pelinaranja entro de nuevo a la habitación con una sonrisa fingida. — ¿Que necesitas papá? —

Jisung estaba removiéndose nervioso en la silla en la que se encontraba, pensando porque hacia que regresara de nuevo aquel pelinaranja, que no hacia mas que burlarse de el en su cara.