prologo

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Las mañanas en el cielo solían ser un poco apresuradas, más aún cuando se acercaba un exterminio, en el recinto de God se encontraba Adan desde muy temprano, al contrario de la creencia popular Adan no era un completo imbécil ni un homicida empedernido, le gustaba atrasar los exterminios para ahorrarse la flojera de ir al infierno y de escuchar gritos de bastardos raros, aunque siempre trataba de tardar todo God siempre terminaba por obligarlo.

–¿Hasta cuándo tengo que ir hasta allá para matar a tanto raro? Ya me cansé papáaaa- se quejaba el castaño tirado en el suelo casi que haciendo un berrinche por tener que ir de nuevo al infierno-

–Los exterminios fueron tu idea Adan, te di gusto y ahora debes hacerte cargo, Será tiene razón necesitas ser un poco más responsable pequeño- hablo God con seriedad, bajando una de sus manos hasta el pequeño en comparación con el, angel y lo levanto para empujarlo hasta la puerta- ni un minuto más niño caprichoso, cumple con lo que se te ordena y aprovecha la mañana para terminar de organizar todo-Regaño, no pudo evitar reír al ver cómo su berrinchudo primer humano se dió la vuelta para sacarle la lengua molesto e irse dando un portazo, negó divertido- ese niño nunca aprende-susurro enternecido por el comportamiento de Adán-

El primer hombre caminaba molesto hasta su casa, tendría que volver a bajar y llenar su túnica de guerra de sangre de sucios demonios, estaba muy fastidiado, al llegar a su casa cerro la puerta de un portazo y comenzó a hacer un berrinche descomunal, la puerta del lugar fue tocada, se levantó de mala gana y le abrió a Lute para luego ir hasta el sofá y tirarse a lamentarse más sobre este.

–Ya no seas dramático Adan, es un exterminio, no una guerra contra fuerzas desconocidas- el castaño levanto un brazo aún con su cara hundida en el sofá y saco el dedo del medio a la mujer, Lute rio con ternura, viniendo de otra persona le ofenderia pero ya conocía a Adán lo suficiente como para saber diferenciar cuándo estaba siendo el mismo y cuando estaba siendo honestamente grosero-

–Para ti es fácil, como tú no tienes que agarrarte a vergazos con el diablo si se aparece por ahí, uuuhg ¡Cómo lo odio!- chillo cerrando sus puños con rabia, con el paso de los años nisiquiera recordaba gran parte de su historia con lucifer, pero si lo odiaba era por algo no necesitaba recordar el porque- te ves bonita hoy perra plana- halago levantándose del sofá y yendo hasta la cocina seguido por Lute-

En el lugar comenzó a prepararse un café, tenía una torre enorme de trastes sucios en el fregadero, Adan era un desordenado sin ninguna duda, aunque lute solía regañarlo por ello este nunca le hacía caso, cuando el castaño se volteo para seguir hablando con su amiga sin querer tropezó con aquella torre de platos, cubiertos y ollas sucias, todo aquello le callo encima y al caer al suelo no pudo detenerse se golpeó fuertemente la cabeza contra el suelo.

–¡Adan!- exclamó Lute asustada por su amigo y jefe, quien había perdido la conciencia-

Cargandolo con todas sus fuerzas lo llevo hasta la sala donde lo tiró al sofá, luego de que Adán comenzará a despertar regreso a la cocina para limpiar todo rápidamente, al menos no se había muerto...es decir, por segunda vez.

–señorita angel,disculpe- ser llamada así por el jefe de los exterminadores resultó completamente extraño para Lute quien se dió la vuelta inmediatamente, vio a Adán mirándola desde el marco de la puerta, los ojos del primer hombre Lucian muy diferente a lo habitual, se veían brillantes y llenos de inocencia...no era la típica mirada de Adán mucho menos el lenguaje corporal de este mismo-¿Que hago aquí?...

(...)

–Esto es muy malo muy muy malo! ¿Enserio no recuerdas nada?- llevaba al rededor de 15 minutos tratando de comprender como alguien podía perder tantos años de memoria por un simple golpe, sentándose junto al castaño tomo las manos de este entre las suyas e invadió su espacio personal colocándole aún más nervioso-

–Señorita me está asustando, nose dónde estoy ni quién es usted- tartamudeo nervioso por el comportamiento de aquella mujer desconocida, nisiquiera sabía dónde estaba, lo último que recordaba era haber pasado la noche anterior con su amigo Lucy recorriendo los jardines del Edén- ¿Sabe usted dónde se encuentra mi amigo Luzbel? Lo que pasa es que no entiendo dónde estoy ahora mismo y la verdad ya me siento incómodo- hablo con un tono de voz bajito y temeroso-

–Lamento hacerte sentir incómodo- se disculpo pero al escuchar la última pregunta del castaño alzó una ceja desconcertada- ¿Lucifer dices?...¡Claro! Seguro el raro ese sabe cómo remediar esto! Y si no, verlo debe ser suficiente para que recuerdes!- levantándose tomo con algo de brusquedad la muñeca del hombre y lo comenzó a arrastrar consigo sin explicarle absolutamente nada-

–¡Señorita! ¡Me lastima!- se quejo Adan dejándose llevar por la mujer, al abrirse un portal delante de ellos se asomo con curiosidad, el lugar era algo sombrio con tonos rojos y fríos, cuando Lute quiso arrastrarlo dentro de este se colocó firme para impedirselo- ¿A dónde me quiere llevar?- cuestiono completamente asustado-

–oh cierto, este...te llevaré con Luzbel, el también debe estarte buscando- necesitaba de la colaboración de su jefe para poder llevarlo hasta lucifer y que este le ayudará- mejor abro un portal directo a su mansión, debes conocer su nuevo hogar!- el castaño sonrió con dulzura y asintiendo acepto seguir a la mujer a dónde está quería ir-

Ya en la mansión del rey de los infiernos Lute camino por los enormes pasillos sin soltar al primer hombre en ningún momento, no le convenía perderlo en aquel enorme lugar lleno de trampas y patos, cuando finalmente había llegado a la oficina de lucifer pateó la puerta de esta para abrirla, Adan se oculto tras de ella con mucho miedo y desconcierto.

–¿Uh?- balbuceo el dueño del infierno quien había Sido atrapado besando uno de sus patitos, tirando el juguete a un lado frunció el ceño al ver a aquellos angeles que se habían colado en su hogar, cuando estuvo a punto de reclamar Adan se arrojo a él para abrazarlo con fuerza y cariño, cosa que le desconcertó por completo-

–¡Lucy! Te estaba buscando jaja- exclamó con un tono lleno de alegría el primer hombre, ver de nuevo a su amigo le traía un poco de calma ante lo que ocurria-

–Tienes que ayudarme lucifer- hablo Lute finalmente a quien permanecía perplejo resiviendo el desbordante cariño de su enemigo- está así desde hace una hora, se golpeó la cabeza y perdió más de 1500 siglos de memoria...piensa que aún son amigos- explico con preocupación por lo que le ocurría al castaño-

–Él que?...- balbuceo lucifer completamente sonrojado y desconcertado-

Continuara...

AAAAAH prologoooooo ✨✨✨ todo está en paz

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AAAAAH prologoooooo ✨✨✨ todo está en paz...por ahora.

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