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Haberme arreglado con Valen se sintió muy bien, ahora ese vacío en mi pecho había desaparecido.
Al volver a donde se encontraban nuestros amigos medio que nos hicimos los boludos, pero más tarde vi como Valen se acercaba hacia mi.
- Vení a casa - dijo mientras me miraba.
- Sii, extraño dormir con vos - respondí mientras le corría el pelo hacia atrás.
- Y yoo - dijo sonriendo mientras estiraba sus brazos al rededor de mi cuello y más tarde plasmó un beso en mis labios.
- Loca linda - dije sonriendo mientras me acercaba a darle otro beso.
Enserio que extrañaba con todo mi ser los besos de la castaña, era algo que me volvía loco y yo no podía creer como había sido tan tarado de estar haciendome el enojado por 5 meses.
- De que me perdí? - dijo Santi confundido mientras nos miraba.
- No se habían peleado?? - agregó Simon.
- Ustedes son boludos?? es obvio que se acaban de arreglar, no ven que se están dando un beso?? - dijo Pipe.
- QUEE, EL MEJOR REGALO DE CUMPLEAÑOS - dijo Juani mientras saltaba y nos abrazaba.
- AY LOS AMO, que lindoness - agregó Santi sonriendo.
- Ay chicos que exagerados - dijo Valen sonriendo mientras sentía como rodeaba con mi brazo su espalda.
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Finalmente la hora de irse ya había llegado, ya habíamos comido y le habíamos contado el feliz cumple a Juani, parecía un nene chiquito era re tierno.
Después de unos minutos ya nos encontrabamos en el departamento.
- Por fin vuelve a ser nuestra casa - dijo resaltando la palabra "nuestra" con la voz mientras se acercaba a mi.
- Uy que lindo eso - respondí dándole un beso.
Al estar cómodos y listos para dormir nos acostamos en la cama y ambos nos abrazamos.
- Te extrañe mucho gorda - dije mientras la miraba y acariciaba su cintura por debajo de mi ropa.
- Y yo mas, que lindo que ahora no voy a pasar frío - sonrió y más tarde me besó.
- Sabes que otra cosa extrañaba?? - dije cerca de su boca.
- Que cosa?? -
- Tus besos, me vuelven loco - ambos sonreímos y nos volvimos a besar.
Estar con ella me calmaba, la sensación de que finalmente volvíamos a estar juntos me encantaba, a Valen la amaba demasiado, era mi persona favorita y fui un boludo al dejarme llevar por los malos pensamientos.
Ambos durmimos abrazados, sin antes habernos llenado de besos, no nos queríamos volver a separar y sabía que eso no iba a pasar, iba a poner toda mi voluntad para controlar mis enojos y hacer las cosas bien.
Al día siguiente nos levantamos y nos lavamos los dientes, habíamos quedado en ir a almorzar así que nos estábamos preparando para eso.
Una vez con la comida sobre la mesa empezamos a comer.
- Amor, invito yo - dije mientras la miraba sonriendo.
- Noo, enserio yo pago lo mío -
- No, quiero pagar yo - insistí sin dejar de sonreír.
- Bueno mi vida, te amo - respondió estirando su mano para agarrar la mía.
ೃ⁀➷
Al salir caminamos en dirección a la plaza, al lugar de siempre, frente al lago y en los banquitos.
Valen se sentó sobre mis piernas y rodeó con su brazo mi cuello, yo hice lo mismo con su cintura.
Estuvimos un largo rato abrazados, admirando el silencio y el simple echo de volver a estar acompañados el uno con el otro.
- Quiero estar con vos para toda la vida - dijo Valen y automáticamente una sonrisa se posó en mi cara.
- Yo también, quiero hacer las cosas bien y vas a ver que vamos a estar juntos para siempre - sonreí mirándola y ella hizo lo mismo.
- Te amo Agus, no se que haría sin vos - agregó la castaña agarrando con sus manos mi cara.
- Yo te amo mas - sonreí acercándome a ella y más tarde la bese por un buen rato, no se si ya lo había dicho pero esa sensación de nuestros labios chocando me encantaba.
Con tan solo un abrazo de ella mis días grises se volvían rosas, incluso mis días rosas tomaban siempre un color más intenso mientras estoy con ella. Estar con Valen me daba seguridad y mucha felicidad, es algo que nunca nadie podría cambiar.
En estos últimos meses fui un pelotudo y nunca me voy a cansar de pedirle perdón por eso, decirle que ya no la amaba por un simple amiguito es mi momento más inmaduro y humilde de toda mi vida, algo que con sólo imaginarlo me daba vergüenza ajena.
En fin, el amor que siento por la castaña es de otro mundo, su presencia me calma y asegura que cada día la amo más, que cada día mi amor por ella aumenta. Me hace sentir un cursi todo esto, pero no está de más aclarar que nunca había sentido algo así por nadie..
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HOLA, les gusta?? espero que si porque sino bala JAJAJA, gracuas por bancar no me voy a cansar de decirlo. Voten y comenten, las amoooouuu
