lies-truth || railo

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Alondra' POV

Me desperté con una fuerte bofetada en la cara. Entonces tosi y salió agua de mi boca. Apenas podía abrir los ojos y cuando lo hice, encontré al culpable de esa fuerte bofetada en la cara.

"¿Es así como rescatas a una persona de morir, dándoles una bofetada?"
Pronuncie a pesar de ser tan debil.
La persona justo en frente de mí colocó
sus manos en su cintura y se quedó alli muy poderoso.

"Si esa persona eres tu, entonces si". El respondio con tanto sarcasmo e irritación en su voz.

"Eres tan duro jatziel". Sonrei y lentamente me puse de pie y lo envolví en un fuerte abrazo que el correspondió de todo corazón.

"Solo para ti, mi prima idiota". Jatziel se rio entre el abrazo. "¿Como supiste que estoy aquí?" Entonces le pregunte justo después de que nos separamos del abrazo.

"Alex me dijo que eras un desastre y aquí estoy, rescatandote, como siempre". El replico mientras me miraba con su habitual mirada interrogante. Sólo le di una pequeña sonrisa y lentamente volví a la mansión de mi abuelo construyó aquí en su isla, en la que siempre nos quedamos cuando vamos de vacaciones. Jatziel es mi primo más cercano entre los tres, porque quizás tengamos la misma edad y me haya visto en diferentes estados, bueno, malo e incluso peor. Y un hecho divertido; El esta en una relación con mi mejor amigo Alex. Cuando entre a la mansión, las criadas nos entregaron bruscamente a mi y a Jatziel toallas que rapidamente envolviomos al rededor de nuestros cuerpos.

"¿Que nivel es esta vez, Alondra?" Jatziel me pregunto de repente.
Su pregunta me hizo parar en mi camino.

"Código amarillo". Respondi justo después de girarme para mirarlo y, una vez mas, le envié una pequeña sonrisa que se que el sabe que era falsa.

Luego me di la vuelta y fui a mi habitación, y me di una ducha tibia.
Jatziel y yo tuvimos una nivelación de cúan malas eran nuestras situaciones. Verde, amarillo, naranja y rojo. Podrá comprender las indicaciones de inmediato.
Cuando el agua tibia golpeó mi cuerpo frio, respire hondo.
¿Después de escuchar a tu novia gemir por otra mujer y solo era un código amarillo? ¿A quien estoy engañando?
Mi corazón se apretó una vez mas, pero antes de que mis lagrimas pudieran caer nuevamente, abruptamente terminé de bañarme y me puse algo de ropa nueva.
Entonces escuche un golpe en mi puerta.

"¿Alo? ¿Vamos a casa o nos quedaremos a pasar la noche?" Jatziel dijo desde afuera. Luego me dirigi a la puerta y la abri.
Lo miré a los ojos y respire hondo antes de decir.

"Vamos a casa, Jatziel".

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"¿Estas segura de que no tengo que acompañarte adentro?" Jatziel me pregunto por enésima vez.
Me rei de sus acciones.

"Por enésima vez, mi primo más querido, si, estoy 100% segura de que estaré bien, y ademas, ¡todo lo que tengo que hacer es abrir mi puerta y tada! Estoy en casa". Le respondi con la mano señalando mi casa. Luego me dio un suspiro de derrota.

"Bien. Enviame un mensaje de texto cuando necesites algo ¿De acuerdo?" Finalmente dijo y me entregó una caja blanca.

"¿Que es esto?" Pregunte, confundida cuando comencé a abrirlo.

"Un nuevo teléfono, idiota. Tu teléfono viejo estaba más alla de guardarlo, asi que le pedi a mi asistente que te comprara uno nuevo. Esta todo configurado, puedes usarlo de inmediato" Jatziel explico sin mirarme. Inconscientemente sonrei por lo que hizo, una verdadera sonrisa por primera vez después de lo que descubri.
Luego lo envolví en un abrazo una vez mas.

"Muchas gracias, Jatziel. Eres el mejor"
Susurre entre el abrazo.

"No te preocupes, Alo." El respondió mientras me palmeaba la espalda y se retiraba del abrazo.

"Ahora sal y saca tu trasero de mi hermoso auto". El continuo mientras me empujaba fuera del auto. Salí riéndonos de el y lo salude con la mano antes de entrar a mi casa.
Todas las luces encendidas y mis criadas sabian que no me gustaba que mi casa sea tan brillante que solo indica una cosa; Ella está aquí. No es que este ahorrando electricidad, pero simplemente no me gustan los lugares demasiados brillantes,  por lo que tiendo a encender solo algunas de las luces y las mayoría de esas son luces tenues porque tengo ese tipo de comodidad cuando estoy en lo oscuro, pero cuando Rainelis entro en escena iluminó mi vida, en sentido figurado y literal. Pero ahora ya no lo sé. Parece que mi luz está perdiendo lentamente su brillo. Me encojo de hombros por esos pensamientos y respiro profundamente y lo dejo salir en voz alta.

"Puedes hacer esto, Alondra" Me susurre a mi misma antes de entrar completamente a mi casa. Bendito sea tu corazón.

//

Rainelis POV

Son más de las 12 de la medianoche y todavía estoy aquí en el sofa, esperando a Alondra cuando la puerta se abrio de repente, revelando a la persona que estaba esperando.
Me levante abruptamente y fui hacia ella.

"¿Que demonios te paso? ¿Que hiciste en la isla privada de tu abuelo? ¿Y por que diablos no pude contactarte? ¿No dije estrictamente que no deberías dejar que  tu teléfono se apagara o lo apagaras?
¡Estaba preocupada por el amor de Dios!
Estaba...." No pude terminar mi oración cuando ella me atravesó sin siquiera mirarme y dirigirse a su habitación como sino me viera ni me escuchara.

"¿Que?" Me dejo en mi lugar, conmocionada. Mi corazón se apretó por lo que ella hizo. No lo sé, pero derrepente senti que algo andaba mal con ella.
Ella no hace cosas como esta, quiero decir que tiene tanto frío y parece que le importa un bledo lo que pasa a sus alrededores, a menos que tenga un gran problema que no puede manejar, pero solo sucedió una vez que nos reunimos y juro, que no me gustaría ver a Alondra asi una vez mas.
Ella siempre me informa de su paradero porque no quiere que piense demasiado.
Y no importa cúan problematica o cansada este, siempre me saluda con un abrazo y sus besos calidos. Luego la segui después de recuperarme del shock.
Cuando abrí su habitación, la encontré acostada en su cama con la espalda hacia mi.
Lentamente me acomode a su lado y la envolví en un cálido abrazo desde atrás mientras colocó mi barbilla entre sus hombros y cuello.

"¿Bebe, que esta mal?" Le susurre mientras acariciaba lentamente sus abdominales y dibujaba pequeños circulos sobre ellos. La sentí derretirse en mi toque que me hizo sonreir un poco, pero aún asi no me respondió ni me miró.

"Bebe..." La llame una vez mas tan suavemente y lo suficiente como para escucharla suspirar y darse la vuelta para mirarme. Sonrei triunfante, pero se desvaneció rápidamente  cuando finalmente fije mi mirada en sus hermosos ojos, estaban llenos de tristeza y dolor.

"¿Hey, que paso?" Le pregunte y puse mi mano en sus rostro para acariciarla, ella sacudió la cabeza y cerró los ojos y se inclino más cerca de mí toque.

"¿Se trata de la empresa?" Le pregunte pero ella volvió a negar con la cabeza.

"¿Tu familia? ¿amigas?" Lo intente una vez mas, pero solo volvió a sacudir su cabeza cuando abrio los ojos y me miró. suspire.

"Se que algo esta mal contigo, amor. Por favor, dime, tal vez pueda ayudarte con eso". Le dije mientras la miraba profundamente a los ojos.

"¿Todavía me amas, ¿verdad, Rai?" su pregunte me tomo por sorpresa pero rapidamente me recupere.

"Por supuesto, amor. No tienes que cuestionar eso". Le respondi con una expresión levemente herida.
Después de que le respondi, una sonrisa finalmente se formo en sus labios rojos y gruesos, pero por alguna razón, nunca llega a sus ojos.

"Lo se, bebe. Lo siento". Alondra dijo mientras colocaba un suave beso en mi frente y me envolvió en un fuerte abrazo
me hace caso omiso de lo que he notado.
Bruscamente correspondi a su brazo con la misma intensidad.

"Te amo, cariñio" Luego Alondra dijo sinceramente.

"Te amo más, bebe" Respondi mientras apretaba más mi abrazo sobre ella.

Lo siento mucho, Alondra. Prometo compensarte.