I'm not your fucking Dad, but I could be your Daddy

3. El niño mimado de Papi

Resultó que al día siguiente Shouto no pudo ver a su padre a los ojos. Ni a Katsuki. De por si a Enji no le prestaba mucha atención, pero a Katsuki sí, y después de cogérselo diciéndole cosas como "Papi, te sientes muy bien", o "¿Me puedo correr, Papi?" pues no le hacía sentirse mejor.

Además, Katsuki participó en su parafilia muy abiertamente, como si se burlara de él. Lo abrazaba y le decía "Muy bien, bebé, Papi está orgulloso de ti" y "Puedes correrte dentro de Papi, te lo ganaste".

Tener problemas paternales era una cosa, pero tener problemas paternales EN LA CAMA, era algo que Shouto no quería.

Por que en todo caso sí tiene Papá, vale, no el mejor, pero lo tiene. No debería ser como Midoriya, que según le contó Katsuki, tenía encuentros con hombres mayores por ese problema. Midoriya nunca ha tenido pareja por lo de ser el símbolo de la paz, pero eso no significaba que no se divirtiera.

A lo que va es, que estaba más distraído que de costumbre. No ayudaba que cuando veía a Enji, Katsuki esta detrás, y para torturarlo, imitaba todo lo que su padre hacía como si de un mimo se tratara. Shouto no puede seguir así, ya revolvió 3 casos de papeleo en una hora.

– Shouto, necesito hablar contigo – Y claro que revolver papeleo ameritaba un sermón de Enji.

– Seguro – Masculló mientras lo seguía, pues era una plática privada. Eso no evitó que a lo lejos viera que Katsuki se reía de él.

– ¿Sucede algo? – Preguntó su padre cuando estuvieron solos. Shouto ni le miró.

– Nada.

– Estás muy distraído, hijo – Siguió Enji – Si continúas así tendré que mandarte a casa. No puedo dejar que retrases el trabajo del resto de la agencia.

Pero Shouto no quería ir a casa. Si lo hacía iba a tener pensamientos sobre el asunto todo el día, se supone que estar trabajando le ayudaría a no pensar en ello, pero ya la jodió revolviendo papeleo y tirando el café de un novato en la mañana.

– N-No, yo... – Shouto carraspeó al sentir que la voz le sonó demasiado aguda – Voy a hacerlo bien, solo necesito comer algo y estaré de vuelta.

Enji le puso la mano en el hombro. Con el tiempo, Shouto creció hasta tener una altura bastante alta; superó los 1.95m de su padre por 2cm, pero en musculatura, digamos que Shouto siempre fue de complexión delgada. La mano de Enji le dio palmaditas de aliento.

– Cualquier cosa, hijo, Papá está aquí para escucharte – Shouto sintió que se ahogaba con su saliva ante esa frase.

– Lo sé, lo sé... – Se quitó la mano de Enji de encima y se alejó para regresar al papeleo sin atreverse a verlo. No era su intención verse grosero, pero ya ni modo.

Su padre no le siguió, se fue por otro camino y eso dejaba en claro que la plática terminó. Después de todo, la relación de Enji y Shouto seguía siendo un poco incómoda para los trabajadores de la agencia, sea por la razón que fuera. No era nada nuevo.

Katsuki era el único que se encontraba en la sala de papeleo. Cuando salió a hablar con su padre quedaban 2 héroes más, pero quizá la plática tardó más de lo que Shouto pensó. Las pilas de papales estaban ordenadas, y Katsuki daba vueltas en la silla giratoria mientras esperaba.

– ¿Ya volviste, bastardo? – Preguntó el rubio cuando Shouto se sentó a su lado – Terminé el papeleo con los extras hace rato; sin ti todo fue más fácil.

Shouto gruñó y se recostó en el escritorio, escondiendo la cara en sus brazos. Pensar que fue su culpa que todos se hayan atrasado le hizo sentir mal, y ciertamente la conversación con su padre no le hizo sentir mejor.

– El viejo insistió en que lo llame Papá otra vez – Confesó Shouto, como si eso fuera lo más importante de la plática sobre su salud mental hace un momento – Lo intercaló con la conversación, para nada disimulado – Escuchó perfectamente como Katsuki se reía a su lado.

– Pff, mala suerte – Katsuki dejó de reírse soltando un suspiro, acercó la silla hacia él y le habló con una sonrisa burlona – Pero tampoco te pongas así. Papi ya se encargó de esto. Ven aquí.

Después de su encuentro sexual bochornoso, ninguno definió nombre para la relación enfermiza. Sin embargo, cuando Katsuki le tomó del rostro y lo acercó para besarlo, pues, tampoco es como que se haya negado.

– Muy bien ¿Quién es el número uno de Papi? – Shouto volvió a besarlo principalmente para que se callara con las burlas.