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─ ¿preparado Harry? Vamos a volver porfin. ─ sonrió la castaña una vez llegaron a la puerta del despacho del director.

─ Finalmente.

La hora llegó. La estatua de hormigón giró dando lugar a las escaleras.

─ Puntuales ─ comentó Dumbledore al notar la presencia de los estudiantes.

─ Muchas gracias profesor, por ayudarnos.

─ Ni lo mencione señorita.  ─ se giró bruscamente hacia los chicos y acercó ─ no tenenos tiempo que perder. Esto ha sido muy peligroso, no tiene caso alargarlo. Tomen ─ del bolsillo de su desgarrada túnica sacó un pequeño círculo de cobre con un diamante céntrico, dos agujas brotaban de él en direcciones opuestas.

─ ¿que es eso? ─ divagó la castaña con genuina curiosidad

─ Lamento desilusionarla, pero es confidencial y me temo que no podré facilitarle esa información. ─ extendió el cachivaque para que Hermione pudiese cogerlo ─ bien, ¿ven el diamante central? Lo que tienen que hacer es pulsarlo un total de 18 veces con interrupciones breves. ¿De acuerdo?

Ambos muchachos asintieron aún un poco dubitativos ─ vale...

─ Perfecto. Lleva bien la cuenta, una mínima equivocación y no quieres saber que pueda pasar. ─ su tono de voz era serio y firme, intimidante.

─ Sí, señor.

─ Adelante.

Hermione tomó a Harry de la mano, apretandola con fuerza y comenzó su cuenta atrás.

─ dieciocho ─ pausa  ─ diecisiete ─ pausa...

Sucesivamente hasta llegar al uno.

Durante unos segundos nada ocurrió. Los mayores temores de ambos muchachos asomaron y entonces una corriente los cubrió. Todo su entorno giraba conformando un torbellino de colores y formas indistinguibles. El agarre entre Harry y hermione no aflojó en ningún momento y mantuvo firme. 

Ninguno fue consciente del tiempo transcurrido hasta que se encontraron desperdigados sobre la cama de la castaña.

En cuanto retomaron la compostura, Hermione se incorporó sobresaltada, mirando a su alrededor y palpando toda superficie, queriendo asegurarse de que no fuese un sueño

 ─ ¿esto es real? ─ cuestionó con voz temblorosa ─ no es ninguna ilusión ¿cierto Harry?

─ No... O eso creo

Hermione salió disparada dando saltos de alegría ─ ¡volvimos Harry!

Este se la unió y entonces la muchacha se abalanzó sobre él, quien seguís tirado en el colchón, envolviendole en un fuerte y longevo abrazo. ─ que feliz estoy

La puerta del cuarto se abrió sin previó aviso, Lavender se asomó por él umbral de la puerta.

Sus labios formaron una amplia "O" y el libro que llevaba en brazos cayó al suelo en un sonido sordo ─ ¡Un tío!

Tanto Harry como Hermione se separaron abruptamente por el susto

─ ¡No es lo que crees! ─ se apresuró a aclarar la castaña ante la reacción de su compañera de cuarto

─ ¡No! No me digas nada. Esto... Siento interrumpir... Yo... Regreso luego. Si me hubieses dicho no habría venido Hermione. No os preocupeis...¿seguid? No se. Ser felices. Adiós. ─ Y sin esperar ninguna respuesta cerró la puerta

─ Ay dios. Que se habrá pensado...

─ Pues...

─ Mejor no lo digas

viaje a 1976 | harmioneDonde viven las historias. Descúbrelo ahora