Epilogo

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El viento ululaba entre los edificios desmoronados mientras Damian se erguía en lo alto de su reino en ruinas

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El viento ululaba entre los edificios desmoronados mientras Damian se erguía en lo alto de su reino en ruinas. Su mirada, llena de determinación y oscuridad, escudriñaba el horizonte desolado, donde las sombras de la noche se cernían como testigos silenciosos de su voluntad implacable.

¿Ustedes creen que yo la voy a dejar?, murmuró, su voz resonando con una intensidad que cortaba el aire como un filo afilado. Aunque me toque destruir el mundo piedra por piedra y matar a cada ser que existe, ella es mía.

Sus palabras eran un eco ominoso en el vacío, un presagio de la tormenta que se avecinaba. Sabía que el camino que había elegido era oscuro y peligroso, pero estaba dispuesto a recorrerlo hasta el final, sin importar las consecuencias.

Puede clavar el maldito cuchillo en mi corazón, continuó, su voz resonando con una mezcla de dolor y pasión ardiente, y aún así la seguiré eligiendo, porque sí, a veces la obsesión es más fuerte que el amor.

Una chispa de determinación brillaba en sus ojos, una llama ardiente que consumía todo a su paso. Sabía que el destino los había unido de una manera que trascendía la comprensión humana, y estaba dispuesto a enfrentarse a cualquier desafío con tal de mantenerla a su lado.

En el horizonte, las sombras se retorcían como serpientes en la oscuridad, susurrando promesas de poder y gloria. Damian sabía que el camino que se extendía ante él estaba lleno de peligros y sacrificios, pero estaba dispuesto a enfrentarlos con valentía, sabiendo que al final del camino, encontraría la redención que tanto ansiaba.

Y así, mientras la noche caía sobre el mundo en ruinas, Damian se preparaba para enfrentar su destino con la determinación de un guerrero y el corazón de un amante desesperado. Sabía que el camino que se extendía ante él estaba lleno de secretos y peligros, pero estaba decidido a recorrerlo hasta el final, sin importar las consecuencias.

En la oscuridad, una sombra se alzaba, una promesa de poder y redención. Damian sabía que el camino que había elegido era peligroso y lleno de sacrificio, y no estaba menos ansioso de querer enfrentarse con él.

Y así, con el corazón lleno de esperanza y determinación, Damian se sumergió en la oscuridad, listo para enfrentar a esa sombra que siempre lo persiguió, el rostro de Damian se cruza con uno de los portales, Evelyn se encuentra ahi mirandolo y con una palabra sentencia todo.

- Ya es momento de buscarla, Damian - dice con voz débil - Ella es la clave de todo.

Con un asentimiento en la cabeza Damian decidió sumergirse en un nuevo portal.

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Creí que estaba en reposo la nostalgia, pero en algún lugar del universo aleteó una mariposa. Como un río viajando por su cauce, la mente esculpida a cada instante timonea emociones en la rutina.

El caos acecha transparente, lo simple se vuelve complejo, lo equilibrado comienza el desorden, lo invisible se presenta inexorable.

Porque la nostalgia es perversa, parásita, seductora. Omnipresente, se mezcla con el flujo de la sangre, con el aire que inspiramos. El bello paisaje se cubre de neblina, la música escuchada proviene desde las sombras, y pinta las caras extrañas que deambulan por las calles.

En el vasto abismo de la eternidad, donde las estrellas suspiran y los átomos danzan, la oscuridad y el caos se encontraron ella era mi caos y yo era su oscuridad, dos amantes cósmicos, entrelazados en un abrazo sin fin.

La oscuridad, con su manto de sombras, susurró secretos ancestrales al caos, y este último, con su risa desenfrenada, tejió galaxias y nebulosas en su telar de estrellas.

En el principio, cuando el tiempo aún no era, se besaron en la penumbra, y sus labios crearon explosiones titilantes, el Big Bang, un estallido de pasión y creación.

La oscuridad se enamoró del caos, y juntos forjaron mundos y constelaciones, sus cuerpos celestiales entrelazados, como amantes que nunca se separan.

En el vasto abismo de la eternidad, donde los universos nacen y mueren, la oscuridad y el caos siguen danzando, tejiendo la trama de la existencia con hilos de oscuridad.

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En el crepúsculo de un mundo, donde las sombras se alargan y los secretos se susurran entre las hojas de los árboles, la mariposa alzó sus alas. Su aleteo, apenas perceptible, desató una cadena de eventos que resonaría a través de los siglos.

Lysandra, era más que una simple mujer. Sus ojos guardaban los misterios del universo, y su corazón latía al ritmo de las estrellas. Pero ella no lo sabía. No hasta que Damian apareció en su vida.

El olvidado era un enigma. Su mirada profunda escondía un pasado turbio, y su sonrisa era un abismo de promesas rotas. ¿Qué lo impulsaba? ¿Qué secretos lo atormentaban? Porque los hilos del destino no podían evitar sentirse atraída hacia él, como si sus almas estuvieran entrelazadas desde el principio de los tiempos.

El verdadero peligro, sin embargo, no residía en ellos o eso creíamos. Era la oscuridad misma, esa entidad que se había enamorado del caos. La oscuridad, celosa de la luz que emanaba de Lysandra, tejía hilos invisibles alrededor de su destino. ¿Qué quería? ¿Por qué la perseguía incansablemente?

Y así, en el límite entre dos mundos, el primer libro llegó a su fin. Los lectores quedaron con preguntas sin respuesta, con intrigas que se retorcían en sus mentes como las nebulosas en el firmamento. ¿Quién era el verdadero villano? ¿Qué papel jugaba Lysandra en este pecado de sombras? ¿Qué oscuros secretos guardaba el pasado?

El segundo libro aguardaba en las sombras, sus páginas aún en blanco. Las palabras flotaban en el aire, esperando ser escritas. Los lectores ansiaban descubrir la verdad, desentrañar los hilos de destino que conectaban a los personajes. ¿Quién era Lysandra realmente?

Así, entre la nostalgia y la curiosidad. El aleteo de la mariposa resonaría en cada página, y el amor, la obsesión y la oscuridad se entrelazarían en una danza eterna. Porque, al final, todos somos parte de un Big Bang de historias, y nuestros destinos están tejidos en los hilos del tiempo.

Los veo próximamente en Oscura Posesión, el segundo libro, aguardaba. Y con él, la promesa de respuestas y revelaciones que cambiarían todo.

Sombras de Obsesión (Libro #1) PGP2024Where stories live. Discover now