03: Bienvenida a Weeks

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El día pasó volando entre charlas y realizar los quehaceres, al menos para Esme y su nueva amiga, quienes comenzaron hablando sobre la importancia de realizar una buena limpieza, debido a lo estrictos y críticones que eran en el pueblo a los pasatiempos de los miembros familiares.

— A mi esposo, Hyperion, le gusta muchísimo diseñar Pero más le gusta hacerlo conmigo, ambos hemos diseñado este lugar trabajando en conjunto — Comenta Esme y la castaña asiente asombrada mientras seca los platos que la vampiresa lavó

— Pero no comprendo algo — Dice Zooey frunciendo sus labios — ¿Porque tú esposo si trabajo y tu no?

Una excelente pregunta, aunque no tanto por la expresión triste de Esme, quien apesar de eso le sonrió amable como siempre solía hacerlo

— Porque las mujeres de este pueblo solo servimos a los hombres, y las que no son consideradas mujeres vulgares — Explicó la Cullen no tan de acuerdo con aquel tonto pensamiento colectivo del pueblo y la muchacha a su lado estaba igual de indignada que ella.

— ¡E-eso es injusto!, ¿Porque una mujer debería ser ramera solo por trabajar?, eso es tonto — Se quejó Zooey haciendo reír levemente a la de cabellos caramelo.

— Porque así es aquí, y si quieres sobrevivir a las críticas debes obedecer, nosotros odiamos llamar la atención — Explicó amablemente y la asiática comprendió.

— Seguro es difícil para ustedes, porque ya de por si llaman la atención por ser todos bellísimos — Se atrevió a decir tapando su boca por la pena que le dió. — Y-yo quise decir que

— Gracias, tu también eres muy bonita, Zooey, por esa razón deberías tener cuidado, ya que hay muchos hombres solteros y sin educación en este pueblo — Agradeció advirtiendo de paso.

— Bu-bueno, pero igual no estoy de acuerdo — Susurró creyendo no ser oída por el fino oído de la vampiresa que aguantó una carcajada que quiso brotar de su garganta. — ¿Y tu?, además de pasar tiempo con tu esposo ¿Que te gusta hacer?

— Umh, bueno, me gusta mucho cocinar — Admitió finalmente Esme y la castaña sonrió aplaudiendo

— ¡Eso es fantástico!, deberíamos tener una tarde de cocina algún día — Casi suplicó Zooey, haciendo enternecer y emocionar a la ojidorada

— ¡Me encantaría!, hay recetas que amaría probar Pero que no puedo porque mi familia y yo llevamos una dieta estricta — Confesó alegremente y la ojicafé asintió sonriente.

— Será un gusto ser tu crítica gastronómica — Bromeó riendo junto a la otra fémina — Bueno, bueno, ¿Que hay de los demás?, ¿Carlisle...y Eduardo? — Preguntó ansiosa provocando otra risa de la contraria — ¿Dije algo malo?

— Es que es Edward no Eduardo, él se molesta cuando lo llaman así — Esme ríe levemente tapando su boca con su mano de manera elegante y delicada

— Oh, perdón, no quise decirlo, es que olvidé por un momento su nombre, pe-pero no es por nada, solo es que...— Intento explicarse y la vampiresa sonrió con picardía.

— Tranquila, entiendo completamente el efecto que causa mi hermano en las mujeres — Bromeó riendo levemente haciendo que el entrecejo de la castaña se frunciera levemente. — Pero en fin, a él le gusta el arte, cuando está muy estresado suele pintar — Le regala un guiño de ojo para sonreír amablemente  — Y su hijo Edward en cambio es amante de la música, toca piano muy bien

Pero lo que hiciera o no el adolescente no fue oído por Zooey, quien solo dejó de oir cuando oyó el nombre del hombre que comenzaba a traerla loca, lo cual Esme sabia, por lo que rió divertida para darle más datos acerca de los gustos del rubio.

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⏰ Last updated: Apr 14 ⏰

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[1] Blood Moon [Carlisle Cullen]Where stories live. Discover now