Entre canciones, sanan los corazones 🎶💕

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Luego de que Dazai abandonará el lugar dónde se encontraba la lápida de Odasaku junto a los menores, habían parado en un pequeño restaurante de comida rápida para saciar el hambre que les había llegado y conversar sobre lo que harían a continuación.

Dazai había puesto al tanto a los hermanos sobre lo ocurrido con Chuuya en el pasado como también lo ocurrido en el festival hace una semana, ganándose una gran reprimenda por parte de Hikari. Si irónico cierto, él era el adulto y padre de la menor, pero era ella la que lo hizo entrar en razón.

Y ahora se encuentran cada uno en una pose pensativa tratando de pensar en algún plan efectivo que los ayude.

Para los clientes y trabajadores del lugar era bastante cómico el observar el gran parentesco entre los tres sus expresiones eran idénticas, como si hubieran sido fotocopiadas.

__ Debemos pensar en cómo hacer una disculpa lo suficientemente emotiva para que papá Chuuya se digne a escucharte- opinó Daichi.

__ Tienes que demostrarle que realmente estás arrepentido- continuó Hikari-. Al final las acciones dicen más que las palabras.

__ Tiene que verse sincero para que no piense que lo haces de manera forzada o por culpa- concluyó Daichi.

__ Es brillante su manera de pensar y hablar a pesar de su edad- halago Dazai impresionado.

Ambos sonrieron orgullosos al oírlo.

__ Pero... Creo que gracias a ello ya tengo una idea de lo que podemos hacer- habló sonriendo después de días de amargura-. Necesitaré ayuda extra.

__ Cuenta con eso- dijeron al unísono.

__ Agradezco aquello niños, pero yo me refería a más ayuda extra- aclaró, sonriendo como aquel que no rompe ni un plato.

Y los menores comprendieron sobre a quienes se refería.

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Atsushi no sabía cómo llegó de estar casi corriendo de la Agencia de Detectives gracias al mal humor que tenía Kunikida, y huyendo del mismo cuándo se le dió la mínima oportunidad, a estar en contra de la pared de un callejón besándose con su novio mafioso.

Si justo como leyeron, no es ninguna confusión o efecto óptico, realmente había dicho novio, porque eso es lo eran, o bueno desde hace 40 minutos.


Déjenme ponerlos en contexto.

Atsushi caminaba tranquilamente por las calles de Yokohama hasta que de la nada fue jalado hacia el interior de un callejón en donde antes de siquiera pensar en gritar por ayuda una mordaza ya estaba sobre su boca, casi entraba en desesperación cuando se dió cuenta de quien era su secuestrador.

__ Akutagawa..? - intentó decir cuando la tela de rashomon abandonó su boca, pero está vez eran los labios del azabache lo que le impidió hablar, correspondió el beso aún confundido.

__ ¿Porque dejaste que ese pelos de zanahoria te abrazara? - fue lo primero que pronunció con enfado al separarse.

__ Eh?

__ No me gusta que te toquen, te lo he dicho - dijo seriamente.

__ Eh..? - repitió tontamente Atsushi sin comprender, recibiendo una mala mirada por parte del contrario hasta que lo comprendió.

Desde lo ocurrido en el festival las cosas con el mafioso habían tomado un rumbo completamente diferente, y  con el pasar de las semanas Atsushi había descubierto muchas facetas del mismo, emociones que al parecer ocultaba y solo mostraba a personas de confianza, era alguien reservado pero muy bueno escuchando a los demás, era cariñoso a su manera y  por sobre todo cuidaba con su vida a aquellos que apreciada.

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⏰ Última actualización: Aug 05 ⏰

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