Mi espía favorita

" Un proceso de recuperación lento "

POV MORGAN

- Creo que no, puedo- dijo Lucrecia.

- Ven, te ayudo- dijo el celador.

La ayudó a levantar se dé la cama para sentarse en la silla.

- Gracias- le miró.

- No hay de que- le sonrió.

- Yo empujo la silla- dije.

El asintió y salió de la habitación. Me coloque tras ella y comencé a empujar la fuera.

- Tengo ganas de verla- comento.

- Seguro que ella tambien- giré despacio para llegar a la habitación de Sofia.

Habían pasado una semana y tres días, hoy iban a probar a quitarle la respiración, dijeron que en el último escaner sus pulmones se veian mejor. Todos queríamos estar ahí para verlo.

Austin nos abrió la puerta nada más vernos por el pasillo. Sonrió al ver a Lucrecia.

- Estas fantástica- comentó.

- Lo se, siempre lo estoy- dijo un poco animada.

Los tres pasamos, el resto ya estaba ahí, esperando a que el medico llegara, mi madre. La coloque al lado suya, era la primera vez que la veía desde el accidente, por su estado no la dejaban moverse.

- Mi pequeña...- tomo su mano- Eres una idiota- dijo- Te dije que te fueras, pero tenías que ser así de cabezota- le pmizco el brazo.

- Lo es- dijo Rebeca con una sonrisa- Es muy cabezota-

- Pues si- rio Noah.

- Un día decidimos hacer una pequeña "reunión de amigos"- hizo comillas- Para pasar más tiempo juntos-

- Para nosotros fue una pijamada, pero ella prefería decir reunión de amigos, se negaba a conocernos más- añadió Rebeca.

- Fuimos a comprar de todo, pero ella solo quería dulce y hasta que no lo consiguió no salimos de la tienda, un poco más y nos quedamos acampando ahi- los cuatro rieron.

- Pero hubo una vez en la que ganamos- se miraron.

- Gane, me lleve un puñetazo, pero mereció la pena- dijo un Austin orgulloso.

- Pobre Buddy- susurro Noah.

- Ese perro es un mimado- Rebeca se cruzó de brazos- Sofia no lo quería ver ni en pintura, pero ese perro no se despegaba de ella-

- Creo que es tan listo que lo hace por joderla- añadió Austin- Y mira que yo le hago todo, pero nada-

- Deberíamos haberlo traído- dijo Noah, mirando a Sofia.

- Si, para que Sofia estuviera todo el día quejándose- Rebeca se rio.

- "Austin, tu perro se a cagado"- él intento imitar su voz.

- "Austin, quítalo de encima mía, ahora"- Noah hizo lo mismo.

- "Austin deja de darle tantas chuches al perro, está gordo"- añadió Rebeca.

Los tres comenzaron a reírse, yo no pude evitar reírme ante aquello.
Las risas cesaron en cuanto mi madre y Laura entraron a la habitación.

No dijeron nada, simplemente se acercaron a ella, cada una a un lado.

- Vamos a quitárselo- dijo seria.

Todos nos tomamos de las manos, si no respiraba sola tendrían que volver a intubarla.