2- Oscuridad

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Pasaron muchas horas, dormí varias veces, y cada que despertaba, creí que él estaba ahí observandome dormir, pero estaba completamente solo, empecé a preocuparme, había pasado mucho tiempo desde su última visita, más de lo normal,

Algo no estaba bien, jamás debí de haberle dicho esas palabras, y si se enojo tanto que me dejó aquí para morir solo, encerrado muriendo de hambre y sed, solo tenía comida y agua como para 3 días si no volvía sería mi perdición, acaso ese hombre sería tan cruel para dejarme pudrirme lentamente en esta prisión, empecé a entrar en pánico, no quería morir, no sin luchar o al menos tratar de escapar, morir sin intentar nada me parecía más horrible que morir peleando

Pasaron los minutos y después las horas, trate de distraerme, recorriendo una vez más la habitación, fui al refrigerador para tomar una botella y algo de comida
Pero me quedé helado al momento de meter la mano dentro
Nada
No había absolutamente nada, estaba vacío toda el agua y comida que había dentro desapareció

Entonces recordé

-Si me vez como un monstruo no me queda otra opción que serlo-

Y todo cobro sentido, el no volvería, me quito lo poco que me dió, como castigo por retarlo, pero en qué momento entro en la habitación no escuché absolutamente nada ni sus pasos ni siquiera un respiro, no tenía el sueño pesado, con un ligero ruido bastaba para despertarme, tal vez el cansancio se apodero de mi y no escuché cuando entro?, Me vio dormír indefenso ante el, estaba enfermo, un escalofrío me recorrió por completo, no podía dejarme aqui solo, dejando que muriera de inanición y deshidratación, seguro volverá el no se cansaba de decir cuánto me amaba y cuando me deseaba,
-solo quiere asustarte, tranquilo, el volverá- me dije para mi mismo, debía mantener la calma, fui a la cama y me senté a esperar era lo único que podía hacer, empecé a contar hasta quedarme dormido.

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Sangre había mucha sangre goteando de mis manos, y ropa, estaba completamente vestido de blanco pero lleno de salpicaduras rojas , estaba rodeado de cuerpos sin vida, mutilados, con sus extremidades desgarraras de sus cuerpos, y a un lado mío estaba Román, con un perfecto traje Italiano negro sin una sola gota de sangre en sus manos, pero su boca, estaba chorreando de sangre
- Ahora lo entiendes corderito, esto es lo que quiero para nosotros, tu y yo, juntos, para siempre- tomo mis manos y las llevo a sus labios para darme un beso, y una sonrisa se apodero de sus labios
-Solo tienes que decirlo, corderito- jale mis manos para soltarme de su agarre estaba temblando
-No quiero, No quiero, dejame ir, yo no siento nada por ti, excepto miedo es lo único que provocas en mi, temor- empecé a llorar y temblar estaba en pánico empecé a hiperventilar,
-Si no eres mío entonces no será de nadie- sus manos tomaron mi cuello y empezó a apretar está vez no con la intención de dejarme inconsciente, si no de romper mi cuello, sus ojos estaban completamente rojos, y caían lágrimas carmesí por sus mejillas, trate de liberarme, arañe sus brazos, luche con todo lo que tenía pero no era suficiente
-perdoname corderito- entonces escuché un crujido

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Desperté sobresaltado empapado en sudor, era un pesadilla solo un sueño nada más, estaba a salvó, respire con más tranquilidad, tenía muchísima sed, cuánto tiempo había pasado? sentí que fueron horas , mi estómago dolía por el hambre , la cabeza igual, todo mi cuerpo se sentía mal, sentí náuseas al recordar el sueño, los cuerpos, la sangre, sus manos alrededor de mi cuello

Vomité,

alcance a girar en la cama para vomitar en el suelo y no en el colchón,
Ardía mi garganta, saque lo poco que estaba en mi estómago, las arcadas seguían, y ya no tenía nada más que expulsar, solo el acido de mi estómago que quemaba a un más mi garganta, estaba exauso, termine de escupir lo poco que quedaba en mi boca, sabía horrible, quería un poco de agua para enjuagar mi boca, entonces recordé el baño, el lavamanos, como no lo pensé antes

Amo temerteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora