El Harem De Mi Amigo Está Obsesionado Conmigo

04

"Hmm".

Cuando terminaron todas las clases, decidí dar un simple paseo por la academia, algo que no había hecho en mucho tiempo. Por supuesto, no fue un simple paseo sin rumbo. No pude evitar pensar en lo que tenía que hacer para evitar la expulsión.

"De todos modos, al final tendré que limpiar mi nombre".

Por muy bien que pudiera volver a hacer los exámenes, el verdadero problema eran las acusaciones de agredir a un compañero y acosar a una compañera. Tenía que conocer a los que decían ser víctimas.

"Esa chica era una de ellas hoy".

Era la chica de la clase E, la que estaba sentada tranquilamente en un rincón, escuchando las clases, igual que yo. Nos habíamos mirado a los ojos varias veces, pero lo que más me llamaba la atención era cómo apartaba rápidamente la mirada, aparentemente asustada.

"Pero, extrañamente, no sentí ningún odio".

En cambio, percibí un atisbo de culpa y tristeza en sus ojos, lo que me hizo considerar varias posibilidades. Tal vez cargaba con el peso de acusaciones falsas, o tal vez conocía la verdad debido a algún tipo de presión.

"¿Por qué no pensé en esto entonces?".

Hubo algunos momentos en los que me sentí frustrado con mi yo tímido del pasado, pero estar en esta situación ahora distaba mucho de ser agradable.

"Vaya, aquí también ha pasado tiempo".

En la azotea de la escuela, había subido para tomar una brisa casual y disfrutar del paisaje cercano, pero inesperadamente, hubo una conmoción. Los gritos de una chica. Abrí suavemente la puerta de la azotea y encontré a varias alumnas atormentando a otra estudiante, una chica que reconocí.

"Ahora que lo pienso, todavía no sé su nombre".

Lamentablemente, seguía sin saber su nombre, pero era la chica rubia que me había estado siguiendo todo el día. Parecía tener muchos amigos y parecía extrovertida y simpática, por lo que resultaba difícil imaginarla sometida a semejante acoso. Pero cuando vi a la mujer que lideraba el acoso, involuntariamente asentí con la cabeza.

"¿No es esa la chica que sigue a Ares a todas partes?".

Con el pelo castaño en un estilo corto y ondulado, su apariencia era ciertamente superior a la media, pero su expresión decidida dejó una impresión.

"¿Estás intentando llamar la atención de Ares?".

"¡Yo no he hecho nada de eso!".

No puede ser. Hace un rato, cuando estábamos hablando cerca del baño, ella corrió hacia él como si fuera un cachorro saludando a su dueño.

La chica del pelo corto la agarró por el pelo y la levantó, burlándose.

"No vayas por ahí haciéndote pasar por maya. Ni siquiera eres de la familia principal; sólo eres de una rama".

"Se cree la más guapa del mundo".

"¿Viste su sonrisa hoy? Casi vomito".
Comentó la alumna de pelo corto, y otros se sumaron con sus propios comentarios. Era una situación realmente divertida, y me pregunté si Ares era consciente de ello.

"Quizá debería decírselo", pensé, imaginándome como un príncipe en un caballo blanco que acude al rescate. Al fin y al cabo, solía interpretar muy bien ese papel. Cuando Rin y yo nos peleábamos con los chicos mayores del barrio, él venía corriendo a salvarnos.

De repente, una de las alumnas me señaló con expresión perpleja. "M-May. ¿Quién es ese de ahí?".

"¿Qué?" Se llamaba May.