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Maratón 3/3

Muchas gracias por las 50mil lecturas, agradezco el apoyo que le dan a la historia eso me hace querer seguir escribiendo, los quierx.






Habíamos aterrizado en Florencia, Italia, eran cerca de las 4 de la tarde habían pedido un auto y nos moveriamos a Volverá y mañana por la mañana iríamos con los Volturi.

Elijah se había ofrecido para manejar asi Carlisle y yo íbamos en la parte de atrás, me había quitado un rato el anillo así que estaba acariciando mi vientre mientras Carlisle buscaba una manta en la mochila de viaje, cuando la encontró la coloco en mis piernas.

—Tengo hambre, más bien los bebés tienen hambre— lo miró

—Cuando estemos cerca de la ciudad pasaremos por la comida amor— besa mi frente

Asiento sonriendo— Ya que estamos en Italia que sea pizza por favor

—Esta bien, solo por hoy— toma mi mano y la acaricia

Sonrio por haber conseguido mi pizza, no me había dejado comer nada no-sano para cuidar la dieta de los bebés pero mi cuerpo ya necesitaba algo diferente, comía prácticamente a cada rato y no es por exagerar pero cada día notaba que mi vientre crecía más.

Elijah suelta una risita desde donde está, lo miramos al escucharlo.

—Desde niña siempre consigue lo que quiere, todavía recuerdo cuando le pedías a Klaus que te comprara los beignets — sonríe

Hago un puchero— Ahora quiero uno

—Perdón Hope— Elijah me mira por el retrovisor

—No hay manera de conseguirlo en Italia?— Carlisle nos mira

Niego— Es algo que se hace solo en New Orleans, es la cosa más deliciosa del mundo si un día vamos comeremos muchos de esos

—Esta bien amor, por mientras puedes comer— saca la mochila y busca varias barritas— servirán para el antojo

Las tomo y asiento— Gracias amor— abro la barritas y la como.

Carlisle me mira con una sonrisa, le sonrio y sigo comiendo, llegamos a la ciudad luego de un buen rato y mi tío aparca frente a un restaurante típico de aquí, bajamos no sin antes ponerme el anillo nos acercamos a una de las mesas que se encontraban afuera y nos sentamos ya habían cartas en la mesa así que me puse a ver las pizzas que tenían.

Mi tío igual veía la carta, tomo mi bolso y le doy a Carlisle un frasquito con el antídoto ya que lo vi sin intención de ordenar, me mira con una sonrisa agradecido y toma lo que le doy e igual mira el menú.

Se acerca una señora para pedir nuestra orden, pedimos lo que queríamos yo con un italiano algo raro pero los dos hombres a mi lado tenían un excelente italiano, la señora se metió luego de repetir las órdenes.

—Terminando de comer nos iremos al hotel que reserve— Carlisle nos mira— mañana nos iremos tempranos y son solo 2 horas de viaje que a como manejamos serán cerca de una hora y unos pocos minutos

𝑷𝒐𝒘𝒆𝒓 || 𝑪𝒂𝒓𝒍𝒊𝒔𝒍𝒆 𝑪𝒖𝒍𝒍𝒆𝒏Where stories live. Discover now