Caminos Reencontrados: Al fin juntos_(Radiodust)_[Tercer libro]

Capítulo 29: "Libre, sin ataduras"

Capítulo 29: "Libre, sin ataduras"

Todos en la corte veían en silencio aquel enfrentamiento entre los Overlods. Las primeras rondas estuvieron a la par dándola toda por ganar. El arácnido y su amiga veían todo en silencio muy nerviosos y ansiosos pues, de este juego dependerían sus almas.

—“Jaja, vaya Alastor…no sabía que aparte de ser un simple locutor de radio de quinta categoría tenías habilidad para los juegos de apostar”—dijo el demonio polilla. El ciervo sonrió, pero se notaba su desagrado hacia el contrario.

—“Y yo no sabía que aparte de ser un mafioso fracasado también eres un fracasado  en los juegos de azar”—el ciervo mostró sus cartas en la mesa y sonrió.

—Gane—dijo. El gato rio y también mostro sus cartas—Perdieron esta ronda, cabrones—dijo el gato bebiendo de su copa. Tanto Vox como Valentino fruncieron el ceño.

—“Je, bien…bien…pero aún no canten victoria, falta una ronda…la definitiva”—dijo la polilla. Vox tomo todas las cartas y comenzó a barajear las mismas, todos tomaron sus cartas y antes de lanzarlas tomaron un poco de sus bebidas. La polilla miro al ciervo y soltó un risita.

—”Mm…me preguntó ¿Que se sentirá ser comido vivo por perros? Debe ser muy doloroso y humillante ¿No lo crees Alastor?“—el ciervo amplió su sonrisa y una interferencia de radio se expandió por el lugar.

—”Ja…si…supongo, pero debe ser más humillante arrastrarse por alguien y rogar tan siquiera un poco de amor y afecto por esa persona, y aún más humillante que tú siendo un mafioso de buen 'rango' y con mucho dinero, esa persona haiga preferido a un simple locutor de radio ¿No lo crees Valentino?”—dijo el ciervo ampliando más su sonrisa y ladeó su cabeza. La polilla gruñó furiosa ante sus palabras.

—“Empiezo”—dijo Husk como si nada. Vox mostró sus cartas. Husk sonrió—“Buena mano, pero con eso no ganas”—dijo el gato con una sonrisa triunfante. La polilla miro al ciervo con odio y mirándolo fijamente mostró sus cartas.

—“¡Ja, eso es! Superen eso”—dijo Vox. La polilla rio y miro al ciervo—“A ver ¿Que tienes cervatillo”—dijo la polilla. El ciervo tomo de su copa y lo miro con una sonrisa. El ciervo mostró sus cartas.

—“Una Escalera Real, una A…una K, una Q, una J y un 10”—el ciervo rio—“Que mal por ustedes, pero pierden. Ahora el contrato de Anthony y de Ashley”—el ciervo calló y miro a su amigo.

—“Queda anulado, cabrones”—dijo el gato. Vox y Valentino no podían creerlo. Los demás que observaban estaban impresionados y a la vez aplaudían a los ganadores. Anthony y Ashley se miraron también sin poder creerlo.

—“Con su permiso”—dijo el ciervo educadamente levantándose de su asiento. El gato sonrió victorioso y también se levantó de su asiento. El ciervo miró al Arácnido y este aún estaba en shock.