Taeko Hanagaki era una chica con muchos problemas referente a su aspecto y una mentalidad un poco dañada debido a la anorexia y la bulimia, ahora su único propósito ahora es recuperarse y seguir adelante.
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Taeko y Takemichi se movían rápidamente por la cocina, asegurándose de que todo estuviera perfecto para la reunión. Taeko había decidido preparar una selección de comida italiana que evitara lo más típico como la pasta. En su lugar, había optado por una variedad de platos sabrosos y apetitosos.
Sobre la mesa del comedor, dos pizzas ocupaban un lugar destacado: una margherita con tomates frescos, albahaca y mozzarella derretida, y otra quattro formaggi, cubierta con una mezcla de quesos deliciosamente fundidos. Junto a las pizzas, había una fuente de ensalada caprese con rodajas de tomate, mozzarella y albahaca fresca, rociadas con aceite de oliva y vinagre balsámico. Además, Taeko había preparado arancini, unas bolitas de arroz rellenas de queso, fritas hasta alcanzar un dorado perfecto, y una selección de bruschettas con diversas coberturas, desde tomates y albahaca hasta champiñones salteados y ricotta.
La cocina olía increíble, llena de aromas frescos y tentadores. Taeko estaba colocando los últimos arancini en un plato cuando el timbre sonó.
-Eso debe ser ellos- Dijo Takemichi, secándose las manos y mirando a su hermana-
-Voy a ducharme y me quedaré en mi cuarto haciendo crochet- Respondió Taeko, dirigiéndose hacia el pasillo-
Takemichi frunció el ceño y la siguió.
-Vamos, Taeko. Deberías quedarte con nosotros. A Mikey le encanta tu comida y estoy seguro de que los demás también disfrutarían de tu compañía-
Taeko se detuvo y lo miró, su expresión un tanto vacilante.
-No sé, Taka. No quiero ser una molestia, además vais a hablar de cosas de la pandilla y en fin-
-No serás una molestia- Insistió Takemichi con una sonrisa tranquilizadora- Eres parte de esto tanto como yo. Además, todos están deseando conocerte mejor, además hay un montón de gente que no conoces. Y sé que Mikey estará más que encantado de verte-
Taeko suspiró, aún dudosa. Pero la sincera insistencia de su hermano la hizo ceder.
-Está bien, me quedaré un rato. Pero primero necesito ducharme y cambiarme-
Takemichi sonrió, agradecido.
-Perfecto. Te espero aquí-
Mientras Taeko se dirigía al baño, Takemichi abrió la puerta y saludó a los invitados. Mikey, Draken, y el resto de los capitanes y sub-capitanes de la Tokyo Manji Gang entraron.
-Hola Takemitchi- Saludo Mikey-
-Buenas tardes- Saludo Draken-
-Woah Takemichi, no sabía que fueras un anfitrión tan dedicado- Comentó Mitsuya-
-Jajaja cualquiera diría que eres gay Takemichi- Río Hanma recién nombrado sub-capitan de una de las divisiones-
