Capítulo 10

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Max ha ido a pasar unos días con sus padres pero yo vuelvo a Madrid.

Navidad se acerca. Él va a pasarla con nosotros así que mi madre ha preparado, con ayuda de la mujer que siempre ha estado con nosotros y es una más de la familia, la cena de Nochebuena. Han comprado comida para doscientas personas. No de forma literal pero hay de todo en la cocina.

Ana se marcha a su casa y me da un beso en la mejilla bien fuerte antes de irse. Le deseo una feliz navidad. Le he regalado una caja grande con comida navideña, es lo que llamamos un cesta de navidad. Su hijo la recoge para ayudarla con esa caja y cierro la puerta. Hoy es 24, son las 13:30 del mediodía. Max vendrá esta tarde y estoy deseando verle.

Carlos está con Isabel sentados en la cocina mientras mi madre saca la carne que tiene haciéndose poco a poco en el horno para darle un baño con una salsa que ha hecho con miel.

-Huele tan bien mamá.

-Es gracias a Ana, ella ha hecho la salsa que es lo principal.

-Aunque seguro dirá que lo ha hecho ella para ponerse la medalla.-Dice Carlos.

Mi madre coge una aceituna y se la tira. De ahí vienen mis ganas de tirar comida al que sea cuando me saca de quicio. Por eso Carlos se parece más a mi padre y yo a mi madre.

Mi padre aparece y besa a mi madre. Ha ido a una entrevista en la radio y acaba de llegar.

-¿Cuándo llega Max?-Pregunta mi padre sentándose en el banquillo al lado de mi hermano.

-Si no se atrasa el vuelo debe llegar a Madrid a las 18:40.

Mi padre mira el reloj.

-Ha aguantado demasiado tiempo. Luego se forman los atascos interminables en Barajas y en la carretera.

-Iremos Carlos y yo a recogerle.

Asiente. Sé que tiene razón. Max venía demasiado justo de tiempo y el aeropuerto sería un caos a esas horas igual que la carretera.

Logramos llegar a casa de vuelta casi a las 21:15. Max llegó, venía algo tenso. Había gente que le reconocía en el aeropuerto y tuvimos que salir rápido donde mi hermano nos esperaba en el coche con un gorro y bufanda que le tapaba hasta la nariz para que no le conocieran.

Cuando llegamos lo primero que hacemos es ir a la habitación para cambiar nuestras ropas aunque ya hay familia que ha llegado. Max los saluda.

Le veo tenso y serio aunque fuerza la sonrisa. Algo con su padre. Eso es lo primero que cruza mi cabeza.

Solos en la habitación me empiezo a vestir y él también.

-¿Todo bien Maxie?

-Sí, claro.

Suspiro. No está bien, no me mira ni a la cara.

-Si no te apetece hablarlo ahora mismo lo entiendo. Pero al menos dime que no estás bien.

Para de vestirse y me mira serio.

-No, no es el momento.

Veo la seriedad y me callo. Sus problemas a veces me superan. Quizás yo he tenido unos padres más comprensivos y que me han apoyado en todas mis decisiones.

En el mundo de las redes sociales vuelvo para subir otra foto. La ultima que tengo es aquella de Max bailando.

 La ultima que tengo es aquella de Max bailando

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London Boy ~ Lando NorrisDonde viven las historias. Descúbrelo ahora