Capítulo 33

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33. Los novios

Theo

-Mamá, voy a salir con Saúl. -llego a la cocina y me paro al frente de ella.

Hoy voy a preguntarle a Saúl si quiere ser mi novio. Pues llevamos casi un mes saliendo, y pues, lo quiero mucho y quiero que seamos algo más que amigos.

-Theo, antes quiero hablar contigo. -mi mamá le dedica una mirada a mi papá, entonces el vuelve a la realidad.

-Si, lo que dijo tu mamá. -responde asintiendo.

-Oh, esta bien. -me siento en la mesa en la cual los dos están. -¿De que quieren hablar?

Ellos dos se dedican una mirada cómplice, lo suelen hacer cuando quieren hablar de un tema serio conmigo.

-Queremos hablar... eh... -mi papá mira a mi mamá con panico- mi amor, yo no sirvo para esto, habla tu. -mi papá sonríe cuando mi mamá lo mira mal.

-¿Porque me case contigo? -se agarra el puente de la nariz-Queremos hablar de ti y Saúl.

-Oh, bueno. -respondo. Aparto la mirada y mi pierna comienza a moverse inconscientemente.

Esta conversación la he estado postergando demasiado tiempo, algún día tendría que hablar con ellos de esto.

-Supongo que puedo deducir de que quieren hablar. -susurro mientras me arreglo el cabello.

-Si hijo. Tu mamá el otro día me comentó que te encontró a ti y a Saúl en una situación media... ¿incomoda?

Oh si. Que horrible. Entro a mi habitación mientras le estaba tocando la pija a Saúl por arriba del pantalón mientras me lo besaba bien fuerte.

-Si. Muy incomoda... -susurro.

-Bueno, lo que tu papá quiere decir, es que queremos saber que pasa entre tu y el. -mi mamá interrumpe.

-Si, eso mismo.

-Pues nada. Pues, estamos saliendo y... pues, ah...

-¿Son novios? -pregunta mi mamá.

-No. De hecho... -dudo un segundo si contarles. -le voy a pedir hoy que... sea mi novio oficialmente.

-¿Enserió? -pregunta mi papá con las cejas levantadas-¿preparaste algo bueno verdad?

-Se podría decir. Lo voy a llevar a un lugar en donde solíamos ir mucho cuando eramos pequeños, en donde se me declaró y en donde quedamos de intentarlo.

-Espero que elijas bien tus palabras y te conviertas en el chico más romántico, respetuoso y amable que jamás haya visto.

-Obvio papá. -sonrió

-Muy bien hijo. -mi papá me dedica una sonrisa.

Papá no se muestra desacorde, entonces significa que lo acepto, porque es un hombre muy expresivo y siempre dice lo que piensa sin importar lo que piensen los demás.

Pero en cambio mi mamá, ella trata de entender y se muestra acorde, pero en el fondo no lo está. Yo se que ella hubiera preferido que estuviera con una chica, pero no me va a decir eso en la cara. Ella lo intenta, intenta aceptarlo, y eso igual lo agradezco.

-¿Eres gay? -mi mamá interrumpe el silencio.

-Bisexual. -corrijo-O sea que me pueden gustar los hombres y las mujeres.

-Oh, esta bien.

-Mi amor -mi papá interrumpe mientras mira a mama. -, en estos tiempos ser homosexual es de lo más normal, ¿o no Theo?

Estamos destinadas a perder | Estamos destinadas a ganar Donde viven las historias. Descúbrelo ahora