La casa olía a galletas de canela, no podría describirlo de otra forma. Tenía muebles antiguos, pero muy elegantes y los pisos eran de madera.
Aunque, no presté demasiada atención, porque Fabbio nos dirigió directamente hasta la cocina.
-¡Wow!- exclamó Jerry detrás de mí y todos nos detuvimos, volteándolo a mirar. Estaba frente a un piano vertical color negro, con unas partituras apoyadas en el- Es precioso...- suspiró y tocó con delicadeza las teclas, sin realmente generar la nota- ¿Tocas?- le preguntó.
-Eh... No, no mucho la verdad- negó con rapidez, soltando una risa- No es mi especialidad- siguió caminando por el pasillo, con todos detrás de él.
Jerry, esta vez, hizo un ruido extraño con la boca, como un grito ahogado, y él único que lo escuchó, aparentemente fui yo.
Me di vuelta, para ver que estaba haciendo ahora. Veía unos pósters colgados en las paredes, completamente hipnotizado.
-All you gotta do is say my name...- murmuró con un cantito- Beetlejuice, Beetlejuice, Beetlejuice- siguió, viendo el cartel. Pasó su vista a otro y volvió a hacer el mismo grito de antes- Dancing through life, mindless and careless...- casi tarareó, viendo el poster de "WICKED". Siguió con el de al lado y volvió a hacer lo mismo- Me está agarrando un orgasmo... ¡School of Rock! Necesito vivir en esta casa.
-¿Podemos enfocarnos?- hablé algo enojado- Deja de jugar- lo agarré del brazo, sacándolo del pasillo, notando que todos los pósters, eran diferentes musicales, claramente Fabbio amaba la música y... Jerry también.
Llegamos finalmente a una cocina muy anaranjada, donde Sarah y Violet, estaban sentadas en una pequeña mesa con Fabbio frente a ellas. Me senté también, junto a Sarah, listo para escuchar lo que tenía para decirnos.
-¿Hace cuánto tienes la fábrica de guitarras?- le preguntó Violet.
-Unos seis años, bastante nueva- contestó- Solo tenía pasión por la música y el mágico sonido de la guitarra.
-¡¿Tienes alguna aquí?! ¿Puedo probar?- Jerry habló exaltado, aún parado, como si fuera un niño queriendo jugar con un juguete nuevo.
-Oh... Eh... No, lo siento, chico- le dijo. Gracias a Dios.
-¿Cuál es la que más vendes?- siguió la chica.
-Guitarras eléctricas- respondió sonriendo.
-¿Telecaster, stratocaster, Les Paul, Jaguar, tipo V, explorer?- habló Jerry otra vez, con la misma actitud que antes y también con curiosidad.
Fabbio lo miró muy confundido.
-¿Disculpa?
-Amo la explorer, pero la clásica telecaster siempre será mi favorita, mi primer amor la verdad- siguió el chico.
Silencio y lo rompí yo finalmente, yendo al punto.
-Ok... pregunta de curiosidad y porque nos serviría- empecé- Eres el hermano de Mario L'eruie, ¿verdad? O... familiar- solté, con el corazón latiéndome bastante rápido.
Fabbio suspiró con cansancio y asintió.
-Lamentablemente, si. Mi hermano.
-¿Hablas con él?- inquirió Sarah.
-A veces, si- admitió- Y lo voy a visitar también. Es un estúpido por cometer los errores que cometió, es tan inteligente y tan exitoso- explicó- Mario, tiene sus excentricidades, siempre muy testarudo, eso...
-No digas el nombre tres veces- interrumpió Jerry, soltando una risa.
Suspiré, harto de tener que soportar no solo la misión imposible que teníamos ya de por si, sino tener que escucharlo a él, diciendo la cantidad de ridiculeces que le salían tan natural.
Todos lo miramos, completamente inenetendidos por sus palabras, y volvimos inmediatamente a Fabbio, que estaba diciendo algo importante.
-¿Crees que esté metido en algo raro aún?- le preguntó Violet.
-¿Desde la cárcel?- dudó- Aunque, bueno... supongo que si hay alguien que lo puede hacer, es él.
-Howard...- Jerry volvió a interrumpir. Esto no puede ser.
-¿Qué?- contesté, claramente sin paciencia.
-¿Puedo verte un segundo en el pasillo, por favor?
-¿Ahora?- lo miré, diciéndole con los ojos, que obviamente no era le momento. Ya había empezado a hablar de cosas que nos interesaban.
-Si, ahora- insistió.
Sarah me hizo una seña con la cabeza para que vaya. Sabía, que ellas podrían seguir sin problema, así que, me levanté de la silla, listo para matarlo al rubio, de todas formas.
Me metí en el pasillo, casi hasta el living y lo miré muy enojado.
-¿Qué estás haciendo?- dije en tono bajo- ¿Te has vuelto loco? Estamos intentando...
-Este tipo, no vive aquí- me interrumpió, muy serio.
-¿Qué?- hablé, sin poder seguirle el pensamiento por ningún lado ¿Qué estaba diciendo?
-Fabbio no vive aquí- repitió.
-Jerry...
-Mira a tu alrededor- volvió a interrumpirme- Los muebles, el empapelado- señaló todo- Tiene un piano y no sabe tocarlo, le nombro tipos de guitarra eléctrica y no tiene idea de lo que estoy hablando, le hago un chiste de Beetlejuice y no lo entiende, vende guitarras y no tiene ni una sola en su casa- enumeró muy seguro.
Pensé, mordiéndome el labio, que si tal vez eran cosas raras.
-Quizás, solo...
-¡Hay un gnomo en la puerta, Oliver!- exclamó, pero en un susurro- ¿Fabbio te parece el tipo que tiene gnomos en su jardín?
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Mastermind 2 💻 Misión ILOVEYOU
Teen FictionEl amor puede ser la cosa más hermosa, pero también la más peligrosa... Oliver, se ha mudado a Nueva York, una vez que empieza la universidad y Sarah, prácticamente vive con él, ya que sus padres y ella, están en el mismo edificio. No han pasado muc...