58. Hombres bestias buscan frutos

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Ji Yang regresó a casa y vio a dos hombres bestias machos sentados en el patio y se acercó confundido.

Sin esperar a que Ji Yang hablara, los dos hombres bestias sentados se levantaron y se acercaron a él. Ji Yang reconoció a uno como una bestia león-tigre, pero no estaba muy seguro de la raza del otro macho de pelo gris. Parecía un lobo celestial o un zorro celestial.

El bestia león-tigre, que era aún más alto y grande, se frotó las manos y dijo con timidez: "Tú debes ser Ji Yang. El mayor Dongfang dijo que debemos seguir tu decisión, así que hemos estado esperando aquí tu regreso".

"¿Ah?" Ji Yang dejó los ingredientes en la mesa de piedra y miró con curiosidad a los dos extraños. En el último año, había crecido mucho y ahora alcanzaba la altura estándar para una hembra, (el autor añade: Ji Yang mide casi 1,80), pero frente al orco macho que mide más de 2 metros de altura, todavía tiene que levantar la cabeza para mirarlo.

"¿Qué pasa con ustedes?”

El bestia león-tigre se rascó la cabeza y un poco de sonrojo apareció en su rostro oscuro. "Eh, cuando las frutas estén maduras, ¿podrían darnos una? Estamos dispuestos a ofrecer una compensación adecuada".

Ji Yang frunció el ceño y no respondió de inmediato. ¿Por qué todos quieren sus frutos? Honglian actuó así para fortalecer su cuerpo, entonces, ¿pero por qué estos dos bestias machos, con sus cuerpos tan robustos, también lo deseaban?

En ese momento, Dongfang Qiu salió del salón principal, sosteniendo un recipiente con vegetales silvestres recién lavados en su mano y docenas de frutas verdes del tamaño de un huevo colgando de su cuerpo, balanceándose ligeramente mientras caminaba.

Dongfang Qiu dijo con una sonrisa: "Yangyang, has vuelto".

"Hmm". Los ojos de Ji Yang se iluminaron de inmediato, e inmediatamente corrió feliz, tomó las verduras de la mano de Dongfang Qiu, miró a las dos personas en el patio, se acercó a Dongfang Qiu y preguntó en voz baja: "Dongfang Qiu, ¿qué pasa con ellos?”

Aunque la voz de Ji Yang era baja, los hombres bestia tenían un oído excelente y podían escuchar claramente los susurros de Ji Yang.

El hombre bestia que había hablado antes con Ji Yang explicó de inmediato: "Bueno, debido a que mi pareja y yo somos mschos, por lo que no podemos concebir. Con el tiempo, no podemos evitar sentirnos solos, así que empezamos a buscar una forma de que los machos puedan concebir. Por casualidad, escuchamos que las frutas de la planta de mil colas pueden permitir que una persona quede embarazada, y resulta que el Mayor Dongfang acaba de cosechar frutos…”

El rostro de la bestia león-tigre se enrojeció y su rostro parecía más oscuro. El otro hombre bestia, cuya especie Ji Yang no podía reconocer, parecía más reservado, y su rostro pálido mostraba un ligero rubor. Dio un paso adelante y suplicó sinceramente: "Esperamos que nos ayuden".

"Uh..." Ji Yang estaba un poco confundido y miró a Dongfang Qiu en busca de ayuda. ¿Están estos dos machos en pareja? Ah, esto es verdadera homosexualidad. Bueno, en un mundo donde las hembras son escasas y los machos abundan, ¿qué deben hacer? Resulta que ellos también pueden formar parejas.

Dongfang Qiu dijo: "¿Saben que aunque mi fruto puede lograr que tengan un hijo, las semillas no son tuyas después de todo? Los niños no heredarán tus genes orcos, y como no es concebido por mi compañero, tampoco tendrá mi habilidad de planta. Solo podrá ser una hembra sin capacidad de transformación. ¿todavía están dispuestos a hacer esto?”

Ji Yang quedó atónito y cerró la boca sin emitir ningún sonido. Ji Yang nunca había escuchado a Dongfang Qiu decir estas cosas y tenía mucha curiosidad. Entonces, ¿Solo los frutos concebidos por él eran saludables? Esto es ridículo. Pensándolo bien, si su fruto fuera concebido por otra persona, sería realmente irrazonable.

┈ Mi Esposo es una plantaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora