Capítulo. 6

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-¿A donde crees que vas? -me dijo saliendo del coche.
-Yo...
-¿Quién es esté? -me interrumpió.
-Que te importa.-respondí enojada.
-No me hables así, soy tu tía y tienes que respetatme.
-¿Respetarte?, créeme yo a ti ni un poco de respeto te volveré a tener, eres una maldita cínica, ¿acaso crees que ya se me olvido todo lo que me hiciste?
-Cállate.-me dio una bofetada.-No me faltes al respeto, mocosa malcriada.
-Señora, no le pegue.-dijo Erick.
-¡Tú que te metes!  ¿De seguro eres uno de los que se mete con esta zorra verdad?
-No.
-¿Zorra?  ¿Y tú que eres maldita?
-Que te calles.-dijo dándome otra bofetada.
-¡Te odio! ¿Qué no lo que querías era librarte de mi , para que me quieres de nuevo en tu casa?
-¡Si eso quería, pero Roberto no!
-¿Y tú por que crees? ¡Por que ese maldito trató de abusar de mi!
-¿Otra vez inventando?-dijo en tono burlón.
-No, no lo esta inventando, el trató de abusar de ella.-dijo Erick.
-¡Tú que diablos te metes! ,¡no sabes nada!
-¿Que pasa aquí? -dijo el oficial saliendo.
-Nada oficial, solo que mi sobrina de nuevo esta de grosera, pero no se preocupe.
-¿Otra vez inventando? -dije burlándome de ella.
-Calla niña, vayámonos tienes que comer, mira como de delgada estás, estos niños de hoy ¿verdad oficial?
-Si, hazle caso a tu tía y ve a casa.
-Por favor oficial, enserio créame lo que le dije es cierto.
-Hija ve a casa y deja las drogas.
-Oficial ella dice la verdad. -dijo Erick.
-Tú también hijo, ve a casa.
-Pero no puede dejar que se la llevé.
Fue lo único que escuché antes de que me subiera a su coche. 

-¿Que diablos le dijiste?-me preguntó arrancando el coche.
-Nada.-dije.
-No quieras verme la cara de estúpida.
-Pero si eso no es necesario de eso ya te encargaste tú no hay necesidad de que lo haga.
-Cállate maldita mocosa y dime que diablos le dijiste al oficial.
-Nada ya te lo dije.
-Dime ahora si no quieres...
-Si no ¿qué? ¿Qué harás?, no tienes con que chantajearme.
-¿A no? ¿Estás segura?
-Si.
-¿Y tu estúpida amiguita ¿como se llama Rachel? ¿Así se llama no?
-Con Rachel no te metas.
-Bien, si no quieres que lo haga entonces, dime ¿qué le dijiste?
-Bien le dije que eras una perra y que no quería estar más en tu casa.
-¿Perra? , Maldita zorra.
-¿Qué? Tú querías que te dijera la verdad. Y es así no quiero volver a tu casa ¿dime para qué me quieren de nuevo?
-Para que más, para que sufras y seas infeliz. -dijo cínicamente.
-¡Estoy arta de ti y de toda tu maldita familia!
-¿Y tú que crees que me hace muy feliz tu presencia en mi casa?, no amor si por mi fuera regresaría el tiempo y haría que no existieras.
-Sabes algo, ahora ya no esta tu maldito marido para defenderte.-la agarré de los cabellos, la jale, le arranque muchos cabellos y después le di puñetazos en la cara, por poco y chocábamos pero no me importó.
-¡Suéltame maldita! -me gritó.
-¡No ahora sientes lo que yo sentía!.
Después me dio un puñetazo que me aturdio y me empezó a golpear, estaciono el coche a una orilla de la carretera, me tomó del cabello y me sacó del coche, me tiró al suelo y comenzó a darme patadas, las patadas eran lo suyo.  
-¡Basta!-le grité.
-¡No así aprenderás a respetarme maldita!
La maldita no paraba de golpearme, hasta que después de un rato se canso y dejo de hacerlo.
-¡Levántate! -me gritó , pero no pude contestar, no podía levantarme, estaba sangrando pero a ella no le importó me tomó del brazo, me levantó y me subió al coche.
-Te odio. -fue lo único que logró salir de mi boca después de un rato.
-Yo también te odio cariño. -me dijo la muy maldita, arrancando el coche. 

Llegamos a la casa, me bajo del coche y me metió a la casa, no podía luchar para no entrar, estaba demasiado lastimada, me tiró al suelo como a un perro.
-¿Qué pasa? -dijo Roberto, saliendo de la cocina.
-Nada, sólo le enseño modales.
-No soy perro.-dije aún adolorida y levantándome como pude.
-Pues casi. -dijo arrogantemente.
-Tú eres la única perra aquí.
-¡Cállate! -me dio una bofetada.
-Bien déjala descansar, recuerda lo que tenemos preparado para ella.
-Oh si, lo había olvidado.-dijo con una sonrisa malvada.
¿Que diablos? ¿Qué están planeado?
-¿De qué hablan?-dije confundida.
-Ya veras, ya veras.-contesto Katy sin quitar su maldita sonrisita.
Los malditos se fueron y me dejaron ahí tirada y lastimada así que subí a mi habitación como puede, logré llegar a la cama y me quede profundamente dormida.

***

Al día siguiente algo húmedo y frío me cayó encima haciéndome despertar al instante.
-¿Qué diablos?-dije furiosa.
-Despierta huerfanita.-me dijo el otro miembro de esta familia Oliva,"mi primita"
La muy estúpida me había tirado encima agua fría.
La fulmine con la mirada.
-Vamos, tenemos que ir al instituto.
-Yo me voy sola.
-No, mis papás quieren que te cuide.
-¿La primita pequeña cuidándome?, wow, ahora los pequeños cuidan a los grandes.
-No soy pequeña me ganas solo con año.
-Un año es un año.
-Da igual, si te voy a cuidar acostumbrate por que si no mi madre me dijo que te diera una paliza.
-¿Y crees que me voy a dejar de ti?
-Si porque si me haces algo te irá peor con mis padres.
-No me importa.
-A mi tampoco, así que cámbiate,nos vamos en 5 minutos.

Bajo, me cambie, aún no podía moverme muy bien, me dolía todo, por lo que me fue muy difícil cambiarme pero lo logré, baje y tomé una manzana pero Katy me la quito al momento.
-Oye.-reclame.
-No puedes tomar comida.
-¿Por qué?
-Porque no es gratis mi vida tendrás que pagarla si quieres tomarla.
-¿Oh ahora ya no puedo tomar ni siquiera una manzana?
-No ¿para que quieres una manzana de esta "miserable casa"?-dijo dándole un mordisco a la manzana.
-Pues por si no lo recuerdas tú me volviste a traer a esta miserable casa.
-Te callas y te vas al instituto que Oliva te esta esperando afuera.
Salí y la idiota de Oliva aún estaba adentró, así que tuve que esperarla afuera.
-Bien vámonos. -dijo saliendo.
-En serio me voy sola.
-Que no, camina.
-Estúpida. -susurre.
-¿Que dijiste?
-Nada primita. -dije dándole una sonrisa falsa.
Caminé detrás de ella no me quedaba más remedio que hacerlo, la odio a ella y a toda su maldita familia.Cuando llegamos al instituto, ella se fue con sus amigas y yo busqué a Rachel entre los alumnos cuando la encontré me dirigí hacia ella.
-Hola.-le dije.
-Hola.-volteo a verme inspeccionándome.-Te vez diferente, ¿que te paso?
-Nada.
-Romina ¿qué paso?
-¿Prometes no sobresaltarte y no hacer algo?
-Okey, lo prometo.
-Bien...tuve una pelea con Katy.
-¿Que te hizo?
-Me volvió a golpear.
-Maldita ¿por qué no la demandas?
-Tú y tus demandas, yo ya no quiero hacer más grande este problema entiendes.
-¿Pero vas a aguantar todo lo que te hacen?
-Ya no falta tanto para cumplir los 18.
-Romina, no puedes esperar tanto.
-Lose.


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HOLA LECTORES AGRADEZCO A LOS QUE LEEN MI HISTORIA Y LES AGRADECERÍA SI COMENTARAN SU OPINIÓN Y SI LES GUSTA DENLE ESTRELLITA POR FAVOR.
BESOS Y ABRAZOS.♡♡
QUE TENGAN UN LINDO DÍA.

Mi verdadero ser. (Pausada)Onde as histórias ganham vida. Descobre agora