Los Winchester

Capítulo 5

-¿Quién?-preguntaron Dean y Stiles

-El demonio Crowley- contestó el ángel, como si eso aclarase algo

-La mano derecha de Lilith- respondió con asco Sam

-¿Por qué vamos a necesitar un demonio de los cruces de caminos Cas?- preguntó confuso el mayor- No soy experto en historia angelical, pero ¿No es algo conocido que los ángeles y los demonios se odian?

-El Kol- susurró el más pequeño- Él tiene el Kol ¿verdad?- afirmó mientras se levantaba ansioso y recorría de un lado a otro la habitación- Con esa arma podríamos destruir a Lucifer e impedir el apocalipsis

-Si eso es verdad ¿a qué estamos esperando?- preguntó Sam con ansías de venganza

- Sam, tú no puedes ir- repuso el ángel con sinceridad

-¿Cómo qué no?- susurró enfurecido- Yo provoque todo este desastre y tengo que arreglarlo

-Sammy, Cas tiene razón- apoyó el rubio- Si algo sale mal Lucifer tendrá lo que más desea, a ti

- Yo jamás le diré que sí Dean- afirmó dolido el pequeño

-Pero estará un paso más cerca de conseguirlo- intentó razonar- Además, todavía está ese pequeño problema con la sangre de demonio,  hermano

-Adiós Sam- se despidió el ángel antes de desvanecerse llevándose consigo a Dean y Stiles

-Mierda- susurró el humano mientras se removia con una mano el pelo con frustración

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-Dios, Cas avisa- exclamó el rubio tambaleante por el trayecto

-Lo siento- se disculpó un poco confuso el aludido- Creí que estabamos de acuerdo en que Sam no debía venir

-Sí, pero....- se interrumpió al ver a su hermano pequeño todavía tirado en el suelo- Stiles levántate

- ¿Dónde estamos?- preguntó ignorando al rubio- Cas no me digas que has dejado solo a Sam- pidió con preocupación

-Vale, no te lo diré- contestó Castiel con su característico desconcierto mientras le miraba fijamente- Estamos a una manzana de la residencia del demonio

- Mierda, traelo ahora mismo- ordenó nervioso

- ¿Qué? Stiles, cuanto más lejos este de los demonios mejor

- Y qué crees que hará ahora ¿Quedarse sentado esperandonos?- preguntó irónico el pequeño- Va a lanzarse de cabeza contra los demonios, dándole a Lucifer una clara pista de que se encuentra solo y a su disposición

-Vigilale y mata a cualquier demonio que este cerca- ordenó Dean- Y en cuanto a ti- dijo girandose hacía adolescente- Prepárate, nos vamos de caza

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-Castiel- gritó con todas su fuerzas Sam- Cas- susurró desesperado, llevaba cerca de tres horas gritando el nombre del ángel sin ningún resultado, no quería decepcionar a sus hermanos, pero tampoco podía quedarse quieto, él soltó a Lucifer de su jaula y tenía que arreglarlo. La única manera que se le ocurría para encontrar a Crowley era torturar a algún demonio que le llevaría hacía el nuevo jefe de los cruces de caminos.

Con su objetivo fijado salió a cazar a uno de esos seres, la opción más fácil habría sido tender una trampa a un hacedor de tratos, pero no quería alertar a Crowley de sus intenciones secuestrando a alguno de sus subordinados. Por ello, recorrió la mayor parte de los bares y callejones del pueblo, hasta que olió a un demonio, asustado por está extraña percepción procedió a seguir al ser. Cuanto más se acercaba mayor era su sed, consciente de esto, el cazador abandono su objetivo y corrió al motel

Tumbado en la cama con intensos espasmos y gran ansiedad recordó a Ruby, el demonio que le traicionó y provocó que liberará a Lucifer, pero sobretodo recordó lo poderoso que se volvía al beber su sangre, y, la verdad, es que en ese momento solo podía pensar en recaer en las garras de su adicción y, por ello, pidió que sus hermanos consiguiesen el Kol y regresarán antes de que hiciese una tontería

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Tras matar al demonio al que había estado siguiendo el mediano de los Winchester voló a la habitación del motel donde se alojaban sus amigos y en el plano astral observó al humano que entre susurros le pedía ayuda, confuso por la situación se acercó y comprobó con disgusto que lo que padecía el joven era un fuerte síndrome de abstinencia. Sellando todo el lugar, para que nadie pudiese entrar ni salir, fue en busca de ayuda o, por lo menos, apoyo

-Tenemos un problema- fue lo primero que dijo al aparecer frente a los hermanos

-¿Qué pasa Cas?- preguntó el mayor mientras rellenaba varias botellas con agua bendita- En cuanto acabe esto vamos donde Crowley, no te preocupes

- No es eso- susurró- Tenemos que irnos

-¿Irnos?- dijo la voz de Stiles desde el baño, para aparecer instantes después completamente empapado con un gran cubo de agua entre sus manos- He tenido un pequeño accidente- explicó con una sonrisa inocente

- El problema lo tiene Sam- prosiguió- Padece un fuerte síndrome de abstinencia y, teniendo en cuenta que lleva meses sin probar la sangre de demonio, me atrevería a decir que se trate del Hambre

-¿El Hambre? ¿ Cómo el jinete?

-Sí, los jinetes del apocalipsis son reales- informó el ángel como si nada- Y si el Hambre está aquí, quiere decir que dentro de poco vendrán sus hermanos

-Vamos con Sammy- dijo Dean- Espero que el demonio siga estando aquí cuando terminemos

-Creo que no, Dean- dijo una voz desde las profundidades de la sala- Sujeta a tu perro- ordenó señalando con la cabeza hacía Castiel del que recibió una mirada de molestia- Me presento, soy Crowley, el demonio que queréis, aunque no con mucha pasión- aclaró mordaz- No hace falta usar la violencia- dijo tirando con un pensamiento la daga "mata demonios" que estaba sujetando Dean con disimulo- Veamos, vosotros queréis destruir a Lucifer y yo tengo el único arma capaz de hacerlo, hagamos un trato- propuso con labia- Yo os doy el Kol- dijo señalando el arma que acababa de aparecer en su mano izquierda- y lo único que tenéis que hacer vosotros es matarlo

- ¿Me estás diciendo que nos vas a dar el Kol para que matemos a tu padre? Eso no parece muy creíble

-Lucifer no es mi padre- dijo el demonio con cierto resentimiento- Es un ángel elitista que nos considera una abominación y que nos destruirá a la menor oportunidad- explicó- Por ello, tomad- dijo mientras lanzaba el arma hacía Dean, quien la cogió en el aire

- ¿Te das cuenta de que si algo sale mal todos los demonios irán contra ti?- preguntó Stiles

- Bueno, eso tiene fácil solución- dijo tranquilamente el demonio- ¡¡No falleis!!- les gritó antes de desaparecer

- Eso ha sido raro- susurró Dean- Cas, llevanos con Sam