Los Winchester

Capítulo 30

Entró con cierto escepticismo en el local, enseguida se vio envuelto en la oscuridad, la música de la discoteca le embotaba los sentidos, giro sobre si mismo intentando encontrar a alguien que le pudiese ayudar entre la gran marea que se contoneaba con sensualidad embriagados por la sordidez que los inundaba. Stiles, intentando sin mucho éxito, pasar desapercibido, se encamino hacia la barra, rezando para que nada saliese mal, aunque no quisiese admitirlo sentía al noguitsune retorcerse de placer en su interior.

- Quiero hablar con Eva- pidió al camarero, que dejo a la vista sus ambarinos en señal de advertencia- Ahora- ordenó sintiendo como poco a poco se le escurría el control de entre los dedos, lo que sin duda no era una buena señal, más bien era una pésima señal y cuanto antes saliese de ese local antes podría controlarlo

- Perdiste- dijo una voz gélida a su espalda, al girarse vio a una joven de cabello negro vestida únicamente con un vestido blanco, sin contar el hecho de que estaba descalza lo más raro de la joven era su expresión, que no reflejaba ninguna emoción, su rostro parecía congelado- ¿Qué quieres Sael?

- Yo no….

- No niegues lo que eres, eso solo te hará débil- le interrumpió- ¿Qué quieres?

- Se como parar el apocalipsis….Necesito tu ayuda

- Mis hijos no te seguirán en tu suicidio- objeto dándose la vuelta para marcharse- ¿Pero qué..?- susurró dándose la vuelta al escuchar un gemido de dolor

- ¿Sabes? Los hombres lobo siempre tienen mucho dolor acumulado- dijo el muchacho con el puño enterrado en el pecho del camarero que gemía aterrorizado viendo como los ojos castaños del muchacho se encontraban completamente negros- Bien, ahora que tengo las pilas cargadas- susurró sacando la mano del pecho del hombre y dejando caer su corazón sin muchos miramientos- Creo que no me he expresado con claridad- susurró volviendo sus ojos castaños- Si no quieres que todos los aquí presentes mueran vas a ayudarme…¿Quién ha dicho que he perdido?

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- Scott- llamó Isaac desde el salón- ¿Escuchas eso? Es como…
- Una grabación- finalizo el Alpha- Mamá no salgas de la casa y activa la seguridad que instalo Deaton en cuanto nos vayamos- pidió el joven- Vamos
- ¿Qué escucháis? - pregunto Allison mientras salían de la casa
- Es una voz, en nuestra cabeza- intento explicar Isaac- Repite una y otra vez lo mismo...” Encontrar al arcángel Miguel, obedeced criaturas”
- ¿Y a dónde vamos? – susurró poniéndose al volante
- A encontrar al arcángel Miguel- contesto Isaac, ante esto la joven extrañada se giró hacia Scott que simplemente miraba por la ventanilla del coche
- Esto no tiene ningún sentido…¿De verdad vais a obedecer a una voz en vuestras cabezas?- se quejó incrédula
- No es que tengamos muchas opciones Allison- explicó Scott sin apartar la vista de la carretera- Ahora mismo somos peones de nuestros padres… Veo a Eva está con Stiles, parece que sabe la forma de derrotar al cielo
-¿Derrotar al cielo? Scott, debemos impedir la lucha no unirnos a ella- le recordó la cazadora- ¿Y qué narices hace Stiles con Eva?
-Dirigir la lucha- musito Scott- Llama a la manada- ordenó apeándose del coche junto con Isaac- Debemos encontrar a Miguel

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- ¿Y ahora dónde coño está Stiles?- maldijo Dean  comprobando que la habitación estaba vacía y las llaves del Jeep desaparecidas- ¿No podía quedarse quieto una hora? Noo… tenía que salir a hacer alguna estupidez- gruño tirando uno de los trozos de la mesa, que estaban desperdigados por el suelo, contra la pared- ¡Castiel! - gritó mientras ayudaba a Sam a recoger sus pocas pertenecías, agrupándolas en una maleta de mano

- Mi hermanito no puede atenderte en este momento- informó Gabriel sentado en una butaca mientras se comía un chupa chups- Por suerte para vosotros yo estoy aquí para ayudaros…O eso se supone- dijo con una sonrisa diabólica- Y decirme princesas ¿qué se os ofrece?

- Cúrale- ordenó el mayor sin siquiera mirar al ángel que arqueo la ceja divertido- No lo digas- dijo señalándole con cierto enfado

- Oh, venga…Aquí falta algo- concluyo levantándose de su asiento y recorriendo la estancia- ¿Dónde está el pequeño?... Ese tan nervioso

- ¿Dónde está Cas?- intervino Sam

- Ocupado…Llevar la recepción de padre no es tarea pequeña, de hecho, todos los pequeños serafines están allí

- ¿Y qué haces tú aquí?

-Pues no estoy del todo seguro que llamarle haya sido una buena idea y… La verdad, por mí, podría seguir perdido…Ya sabéis la figura del padre asunte atrae a las nenas- finalizó asintiendo con sorna- En fin, hacéis bien en iros estoy puede acabar arrasado…No sé si ya os lo había dicho, pero padre no tiene muy buen carácter

- Está bien saber la opinión que me procesas- dijo una voz a las espaldas del arcángel, quien puso una mueca de arrepentimiento y susurró un imperceptible “mierda”- No tan deprisa Gabriel- ordenó impidiendo que el ángel desapareciese- Tenemos mucho que hablar
- ¿Enserio? ¿” Tenemos mucho que hablar”? - se burló enfrentándose a Dios- Mis hermanos se están matando unos a otros por tu culpa ¿Por qué no hablamos de eso?

- Espera- interrumpió Dean, quien junto a su hermano miraban con cierto escepticismo al hombre que se presentaba ante ellos- ¿Chuck? ¿Dios es Chuck? -preguntó a su hermano que asentía no muy convencido

- Puede que sea algún tipo de brujería- dijo Sam agitando la mano intentando que la ilusión se desvaneciese- Te dije que no debíamos pararnos a comprar, la dependienta debe haberte colocado alguna bolsita- susurró empezando a inspeccionar los bolsillos del otro cazador quien había empezado a girar sobre si mismo buscando la bolsita maldita

-Chicos- llamó Chuck un poco incrédulo por la situación

- Buena creación, padre- se jacto Gabriel- De tus mejores obras- finalizo con ironía

- ¿Has sido Dios todo este tiempo? - preguntó Sam dándose por vencido en la búsqueda de la bolsita- ¿Y si has sabido todo este tiempo lo que pasaba porque no has hecho nada?

- No tengo que excusarme ante ninguno de vosotros- dijo sin apartar la vista de Gabriel que bajo la cabeza con molestia- Parece que Castiel está empeñado en salvaros…y me alegro, sois valiosos, todos…hasta Stiles- informó- Buscar a vuestro hermano, debe aprender a controlar el mal de su interior antes de que sea demasiado tarde

-¿Mal? El noguitsune ya…Mierda- maldijo Dean- ¿Y qué podemos hacer?

-Terminar lo que se empezó- susurró sin más- Voy a volver al cielo- dijo esta vez hacía el arcángel, quien seguía sin mirarle- Pero antes debéis arreglar este desastre- riño- Sam, Dean- se despidió desapareciendo a continuación