Capitulo 70:

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----Narra Dani----

María salió de la habitación y miré hacia David con odio.

David: Tranquilo Dani, verás cómo vuelve.

Mayte: David, es que te has pasado un poco con el comentario.

Dani: Menos mal que hay alguien de mi parte.

Álvaro: No es por nada, pero lo que ha dicho a sonado un poco mal y en la postura en la que estabais y para colmo lo que os ha dicho la enfermera...-rió.

Dani: A mí no me hace gracia, por vuestra culpa ahora está picada. Mejor me voy, nos vemos luego.

Me despedí y salí de la habitación. Llegué al piso y primero pasé por el de María pero no estaba. Subí hasta el mío, me di una ducha y me vestí. Salí y entré al ascensor, se paró una planta después de la mía y entró David con Mayte.

David: Hey.

Dani: No me hables-lo miré mal.

Mayte: Ups, ¿no se te ha pasado el enfado?

Dani: No.

No hablé con ellos en todo el camino, se lo pasaron metiéndose conmigo todo el rato. Llegamos y David se puso a contarles a Blas y Carlos lo ocurrido en el hospital mientras yo me senté en un sofá aparte. Álvaro se sentó a mi lado.

Álvaro: ¿Por qué no le mandas un mensaje?

Dani: ¿Tú crees?

Álvaro: Prueba, con intentar no pierdes nada.

Cogí el móvil y le mandé un mensaje a María: 'Peque, ¿estás enfadada conmigo por lo que ha dicho David? No se lo tomes a mal, es idiota y pienso matarlo. Te quiero (L)'. Al poco rato, me llegó su respuesta: 'No estoy enfadada y no lo mates, ya pensaremos juntos en hacerle alguna maldad. Te quiero más (L)'. Sonreí y perdoné a David por esa noche. Cuando terminamos de cantar, fuimos al piso. Me quedé con el ordenador metido en twitter hasta casi las dos de la madrugada y por la mañana me levanté temprano y bajé, toqué y me abrió Mireya.

Dani: Buenos días, ¿cómo que hoy no estás con Blasito?

Mireya: Viene más tarde. Tu peque sigue durmiendo, llegó esta mañana temprano del hospital, anoche se quedó con Judith.

Dani: Vale, voy a verla.

David: Hombre, mira a quien tenemos aquí.

Pasé de él y entré a la habitación. Estaba durmiendo así que sin que se diera cuenta me puse de rodillas a su lado en el suelo y empecé a acariciarle el pelo...

María: Buenos días-me sonrió.

Dani: Perdón por haberte despertado.

María: No pasa nada, ven.

Levantó las sábanas, me quité los zapatos y me tumbé junto a ella. Se acurrucó junto a mí y se quedó dormida mientras le tarareaba una canción. Un rato después, noté como algo o alguien me acariciaba la cara. Abrí los ojos y me la encontré a mi lado sentada en la cama y vestida. La abracé por la cintura y pegué mi cara contra su barriga.

Dani: Al final me he quedado dormido.

María: Sí, estabas cansado. No sé para qué te has levantado tan temprano.

Dani: Para estar contigo.

María: Pues me ha dado tiempo a salir y tú no te has inmutado.

Dani: ¿A dónde has ido?

María: A por alguien que está en el salón esperando para conocerte.

Dani: Mmm, la verdad es que yo preferiría quedarme aquí contigo.

Cuando Menos Piensas Sale el SolDonde viven las historias. Descúbrelo ahora